Iglesia mexicana denuncia desaparición de sacerdote
El episcopado mexicano exige a las autoridades la búsqueda de un sacerdote desaparecido desde el 3 de enero
El episcopado mexicano exigió a las autoridades el martes la búsqueda de un sacerdote desaparecido desde el 3 de enero.
El padre Joaquín Hernández Sifuentes es un cura párroco en el estado norteño de Coahuila, asolado por la violencia de los cárteles del narcotráfico. Aunque no queda claro si su desaparición se trata de un delito, la Conferencia del Episcopado Mexicano dijo que "el crimen y la violencia destruyen lo más sagrado que tenemos: la vida".
Se suponía que Hernández iba a tomar unas vacaciones cortas a partir del 3 de enero, según la diócesis de la ciudad de Saltillo. Pero un amigo cercano no logró ponerse en contacto con él telefónicamente ese día. Horas antes esa misma mañana, un vecino vio a dos hombres jóvenes llevarse el automóvil del sacerdote, pero a él no lo vio con ellos.
El amigo fue a la residencia de Hernández en la iglesia y encontró su habitación desordenada, con el armario y los cajones abiertos y ropa en el piso, lo cual es inusual en el clérigo, quien es muy limpio y ordenado, señaló la diócesis.
Dos días después, el amigo regresó a la vivienda del sacerdote y notó que su maleta con ropa y otras pertenencias aún estaban ahí, junto con sus lentes que necesita para manejar. Entre sus posesiones desaparecidas se encuentra el automóvil, su teléfono celular, su tableta y su computadora.
Hernández fue ordenado sacerdote en 2004 y prestó servicio en varias iglesias antes de llegar en 2014 a la actual, ubicada a las afueras de Saltillo.
Varios sacerdotes católicos han sufrido ataques recientemente en México. Tres de ellos fueron secuestrados en el estado de Veracruz, ubicado junto al Golfo de México, a fines de 2016. Uno apareció con vida y los otros dos muertos a tiros.
Otro sacerdote fue asesinado en el estado occidental de Michoacán en septiembre.
Al menos 31 han sido asesinados en México desde 2006.