Miembro detenido de las FARC continúa en huelga de hambre

BOGOTÁ (AP) Jesús Santrich un comandante de la extinta guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que está detenido y es requerido en Estados Unidos por tráfico de drogas sigue en huelga de hambre y aunque está débil el jueves se informó que su condición es estable.

La condición psicológica del señor Santrich es buena. Completa a la fecha 11 días en huelga de hambre, señaló la defensoría del pueblo, que avaló un chequeo médico, a través de un comunicado.

Según constató esta entidad, las autoridades le ofrecen comida a pesar de que él las rechaza. Santrich ha afirmado que continuará su postura mientras no se cumpla la petición que formuló para ser juzgado por la JEP (Jurisdicción Especial para la Paz).

La defensoría argumentó que el director de la cárcel de máxima seguridad La Picota, donde Santrich está recluido al sur de Bogotá, fue quien solicitó el examen médico. De acuerdo con esa comisión, el señor Santrich se encuentra recluido solo en una celda digna, en buenas condiciones, con servicios de agua y luz, y en un pabellón amplio.

Por su parte, el partido político de las FARC dijo en un comunicado el mismo día que reitera su exigencia de libertad inmediata para Jesús Santrich de los más de 600 combatientes que aún permanecen tras las rejas.

El presidente Juan Manuel Santos expresó al respecto en un evento en Bogotá que quien no cumpla los acuerdos en materia de compromisos con la legalidad será sometido a la justicia ordinaria y será castigado debidamente. Que sobre eso no quepa la menor duda.

La Corte Suprema de Justicia negó la libertad a Santrich el jueves y el recurso de habeas corpus que había presentado su abogado, argumentado supuestas irregularidades en la detención de su defendido.

De acuerdo con una orden de captura emitida por la Interpol, Santrich planificó envíos de cocaína a Estados Unidos a partir de junio de 2017, siete meses después de que las FARC firmasen el acuerdo de paz con el gobierno colombiano. El antiguo líder está acusado por una corte federal de Estados Unidos de conspirar para exportar diez toneladas de la droga a ese país.

Las FARC y el gobierno de Santos firmaron en 2016 un acuerdo de paz luego de 50 años de conflicto interno.

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