Williams y Halep avanzan a final de Wimbledon
WIMBLEDON, Inglaterra (AP) — Serena Williams está de nuevo al borde de un octavo cetro de Wimbledon y 24to de Grand Slam, al avanzar el jueves a la final en el All England Club con una victoria de 6-1, 6-2 sobre la checa Barbora Strykova.
El sábado, Williams se enfrentará con la rumana Simona Halep, que venció en la otra semifinal a Elina Svitolina 6-1, 6-3.
Será la 11na final en Wimbledon para Williams y primera para Halep, cuyo único título de Grand Slam se produjo el año pasado en el Abierto de Francia.
Williams tiene un récord de 9-1 en su carrera contra Halep.
Aún así, la estadounidense de 37 años sabe que ya ha estado en esta situación: En el 2018, su primera campaña de regreso al Tour tras el nacimiento de su hija, Olympia, Williams llegó a las finales en Wimbledon y el Abierto de DEstados Unidos, pero las perdió ambas.
Eso la ha dejado con un total de 23 títulos de Grand Slam, un récord para la era profesional y uno menos que los acumulados por Margaret Court en una carrera que incluyó a rivales amateur.
Ha sido un año de altibajos para Williams, con enfermedades y lesiones que la habían limitado a 12 matches hasta la semana pasada. Tras una derrota en la tercera ronda en Roland Garros el 1 de junio, se quedó en Francia para tratamiento médico y finalmente pudo entrenar sin dolor en preparación para Wimbledon.
Parecía que Halep se encaminaba a una larga tarde cuando su semifinal arrancó con un par de games que abarcaron 32 puntos en 20 minutos.
Pero Halep brilla en ese tipo de situación, vista más frecuentemente en arcilla que en césped, y pronto empezó a dominar.
La ex número 1 mundial le rompió el servicio a Svitolina tres veces en el primer set y de nuevo para ponerse arriba 4-3 en el segundo. Ganó el match con otro break en el último game.
"No fue tan fácil como lo muestra la pizarra”, dijo Halep, que tuvo una ventaja de 26-10 en winners.
Halep ganó el Abierto de Francia el año pasado y ha llegado a la final en Roland Garros en otras dos ocasiones. También llegó a la final del Abierto de Australia en el 2018, pero su mejor actuación previa en Wimbledon había sido semifinales en el 2014.