Abuchean a DeVos en universidad de negros en Florida

Entre gritos de ¡mentirosa! y ¡simplemente vete!, la secretaria de Educación Betsy DeVos se mantuvo firme en su discurso de graduación el miércoles en una universidad de negros en Florida, incluso mientras muchos de los estudiantes le daban la espalda.

Elijamos escucharnos mutuamente, afirmó DeVos, quien siguió leyendo su texto preparado de antemano en un tono moderado a pesar de las oleadas de abucheos, silbidos y aplausos aquí y allá en la Universidad Bethune-Cookman en Daytona Beach, ciudad ubicada en la costa del Atlántico.

Mientras la multitud seguía intentando acallarla, Edison Jackson, presidente de la universidad, tomó brevemente el micrófono para regañar duramente a la generación de 2017.

Si este comportamiento continúa, sus títulos les serán enviados por correo. Elijan el camino que prefieran, advirtió.

DeVos hizo enfurecer a muchos afroestadounidenses en febrero cuando describió a las universidades que históricamente han tenido alumnos negros como verdaderas pioneras en lo que se refiere a la selección de escuelas. Sin embargo, tras una oleada de críticas reconoció que estos planteles nacieron, no por mera elección, sino por necesidad, ante el racismo.

En su discurso, DeVos elogió repetidas veces a la fundadora de la universidad, Mary McLeod Bethune, como alguien que se negó a aceptar el racismo sistémico y repugnante y tuvo el valor de modificar ideas viejas.

Estoy aquí para demostrar de la forma más directa que yo y este gobierno estamos totalmente comprometidos con su éxito y con el éxito de cada estudiante en todo este gran país, afirmó.

Algunos alumnos y líderes afroestadounidenses habían dicho que la invitación a la secretaria era insensible y equivocada. Los estudiantes organizaron peticiones en las que exigían que no se le permitiera hablar.

Jackson había sido acusado de vender la escuela al invitar a DeVos. l le dio un abrazo y luego subió de nuevo al podio cuando ella salió del escenario.

Como hemos dicho en repetidas ocasiones, hay que tener cuidado al elegir a la gente a la que uno le permite entrar a su casa, afirmó Jackson, con lo que aparentemente admitió el motivo de las críticas. Pero, señaló, la Universidad Bethune-Cookman no puede hacerlo sola. Necesitamos que todo el mundo forme parte de esta continuidad de nuestra institución.