Análisis AP: Acuerdo entre EEUU-GB no será fácil tras Brexit
WASHINGTON (AP) — Gran Bretaña todavía no se ha retirado de la Unión Europea, y un nuevo pretendiente ya está llamando a su puerta: Estados unidos.
Durante su visita al Reino Unido esta semana, el vicepresidente Mike Pence llevó un mensaje de su jefe, el presidente Donald Trump: Estados Unidos está ansioso de firmar un nuevo acuerdo - el cual no será posible hasta que Gran Bretaña concrete el Brexit y se retire del bloque europeo comercial de 28 países.
"Nuestro mensaje es claro: Estados Unidos entrará a figurar el minuto que Gran Bretaña se retire", dijo Pence al visitar al primer ministro británico Boris Johnson en 10 Downing Street el jueves.
Pero no hay que apresurarse. Desarrollar una nueva relación británica-estadounidense en base a lo que quedará tras el Brexit no será fácil.
Funcionarios británicos ya están prometiendo oponerse a un acuerdo que favorezca a la parte más poderosa, Estados Unidos, creando el potencial de disputas por asuntos como pollos blanqueados y el divisivo platillo escocés haggis.
"Yo sé que ustedes son unos negociadores feroces", dijo Johnson a Pence. "Así que vamos a trabajar muy duro para asegurarnos de que el acuerdo de libre comercio funcione para ambos lados".
Como miembro de la Unión Europea, Gran Bretaña dejó su política comercial en manos de los burócratas del bloque en Bruselas. Antes de hacer algo por su cuenta y alcanzar un nuevo pacto con Washington, Londres tendrá que negocia un divorcio con el bloque europeo, o salirse del bloque sin un acuerdo y correr el riesgo de dañar su economía.
"Hasta que eso se resuelva, todo es especulación", dijo Christine McDaniel, investigadora del Centro Mercatus de la Universidad George Mason.
Y los términos del acuerdo entre Gran Bretaña y el bloque europeo complicarán cualquier acuerdo con los estadounidenses, que tendrá que ser aprobado por el Congreso.
Pero ningún obstáculo es tan grande como la disputa sobre la frontera entre Irlanda, que es un país independiente y miembro de la UE, e Irlanda del Norte, que es parte del Reino Unido.
Actualmente, la gente y bienes pueden cruzar libremente la frontera irlandesa sin revisiones de aduanas o migratorias porque ambos lados, Irlanda y el Reino Unido, pertenecen al bloque europeo, que permite el comercio libre y la migración sin visa de ciudadanos de países miembros.