Grandes banqueros de EEUU comparecen ante Congreso dividido

Grandes banqueros de EEUU comparecen ante Congreso dividido
Imagen de video facilitada por la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes que muestra a la CEO de Citigroup Jane Fraser prestando juramento antes de testificar de manera remota ante ese panel legislativo el jueves 27 de mayo de 2021. (Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes vía AP)

WASHINGTON (AP) — Los directores ejecutivos de los bancos más grandes de Estados Unidos comparecieron de nuevo ante el Congreso, donde enfrentaron otra ronda de interrogatorios que reflejó la profunda división partidista entre demócratas y republicanos.

La audiencia de la Cámara de Representantes del jueves se realizaba después de que los senadores interrogaron el miércoles a los seis directores ejecutivos sobre temas que fueron desde el cambio climático y los derechos de voto hasta las desigualdades raciales.

Es la segunda audiencia que la representante demócrata Maxine Waters, presidenta de la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, ha celebrado desde que los demócratas tomaron el control de la cámara baja en 2019.

En la audiencia anterior, muchos de los mismos directores ejecutivos fueron interrogados sobre sus compromisos con la diversidad y sobre los cargos que cobran a los clientes.

Los directores ejecutivos comparecían mientras la economía de Estados Unidos se recupera de la recesión provocada por la pandemia de COVID-19.

Las ganancias de los grandes bancos aumentaron en los primeros tres meses de este año a medida que se afianzó la recuperación. Pudieron liberar miles de millones de dólares de sus reservas, creadas originalmente en los primeros días de la pandemia el año pasado para enfrentar posibles pérdidas de los préstamos.

La industria bancaria, a la que se culpó de la Gran Recesión hace más de una década, ha pasado la mayor parte de 2020 y lo que va de este año enfatizando sus esfuerzos para trabajar con prestatarios y empresas. Los bancos de todo el país se abstuvieron de aplicar ciertos cargos y pusieron millones de hipotecas en estado de indulgencia a fin de apuntalar las finanzas apretadas de los estadounidenses a causa de la pandemia.

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