Perú: postergan análisis de prohibición contra primera dama

LIMA (AP) — Un magistrado peruano postergó hasta el miércoles una evaluación sobre si prohíbe viajar fuera del país a la esposa del presidente Pedro Castillo investigada de forma preliminar por la fiscalía por presuntamente integrar una red de lavado que involucraría al mandatario.

El juez Raúl Justiniano indicó el lunes que en 48 horas continuará examinando la solicitud de la fiscalía pese a que la esposa del presidente, Lilia Paredes, aún no ha sido acusada formalmente. Esta la primera vez en la historia local que un fiscal pide prohibir la salida de Perú de una primera dama.

La fiscalía afirma que Paredes podría fugarse debido a las serias acusaciones, pero la defensa de la primera dama, niega tal afirmación. La fiscalía busca que el juez le imponga una prohibición de salir de Perú por tres años.

La semana pasada el Congreso -dominado por la oposición- también negó al presidente un permiso de visita a Europa que incluía una audiencia privada con el papa Francisco y el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado de la Santa Sede. Es la segunda vez que el Parlamento niega un permiso de viaje al mandatario. La primera fue en agosto cuando no autorizó que viajara a Colombia para asistir a la toma de mando del presidente Gustavo Petro.

En ambas negativas los parlamentarios afirmaron que existe riesgo de fuga del mandatario. No obstante, Castillo viajó junto a su esposa en septiembre a Nueva York para participar de la Asamblea General de Naciones Unidas y ambos retornaron sin inconvenientes.

Según las leyes peruanas, el Congreso decide si un presidente puede o no salir del país a una visita oficial.

A partir de testimonios de aspirantes a delatores, la fiscalía ha esbozado la supuesta existencia de una organización criminal para lavar activos supuestamente dirigida por el mandatario en la que la primera dama sería la coordinadora, mientras otros familiares de Paredes serían integrantes.

La fiscalía afirma que Castillo y sus familiares se aprovecharon de sus contactos para recibir dinero a cambio de entregar a obras públicas. Esa afirmación aún no ha sido probada.

Castillo y su esposa niegan todas las acusaciones. El mandatario gobierna desde hace un año y su mandato terminará en 2026.