Perú: liberan barco retenido en protesta por contaminación

LIMA (AP) — El barco que permanecía retenido en Perú por una comunidad indígena de la Amazonia es liberado un día después de ser interceptado con 23 turistas extranjeros y 75 pasajeros peruanos a bordo como protesta contra la contaminación petrolera en la zona por dos derrames de la estatal Petroperú y la falta de atención del Estado.

El jefe de la comunidad de Cuninico, Wadson Trujillo, informó el viernes por teléfono a The Associated Press que la embarcación partió a las 13:45 hora local (1845GMT) con todos sus pasajeros rumbo a la ciudad de Iquitos, la principal de la Amazonia peruana. No obstante, advirtió de que seguirán protestando y bloqueando el paso de embarcaciones por el río Marañón hasta recibir la ayuda y atención que exigen al Estado.

"Nos hemos visto obligados a tomar esta medida para llamar la atención de un Estado que no nos atiende desde hace ocho años, no sólo desde hace semanas o meses”, justificó más temprano dando voz a los reclamos de una comunidad de alrededor de 1.000 integrantes que está en el corazón de la Amazonia peruana y es inaccesible por carretera.

El primer ministro Aníbal Torres aludió al problema el viernes en una actividad pública replicando que los “males de 200 años de vida republicana no se pueden resolver en un día, en unos meses o en unos pocos años”. Lanzó, además, una acusación sobre las comunidades nativas ya que algunos de sus miembros "son los que cortan el oleoducto para después reclamar la refacción e indemnizaciones”.

El líder comunitario de Cuninico negó los señalamientos del primer ministro. En octubre la estatal Petroperú informó que la fiscalía había corroborado que el derrame de crudo de septiembre, que se extendió por el río Cuninico y llegó al río Marañón, “fue el resultado de un corte intencional realizado por terceros”.

Los 23 extranjeros que vieron interrumpida su ruta con la retención del barco desde la víspera son de nacionalidad alemana, británica, española y francesa. El líder indígena no dio detalles de sus nombres, del número de personas de cada país o de sus edades, pero garantizó que todos estuvieron bien de salud y que podían salir y entrar del barco sin impedimentos. La AP no pudo comunicarse con ningún turista o peruano que viaja en la embarcación.

Trujillo solicitó al gobierno del presidente Pedro Castillo que declare en emergencia la zona para que su comunidad sea atendida de forma adecuada ante los efectos de la contaminación por petróleo. El líder comunitario recordó con amargura que los dos derrames petroleros, el primero de 2014 y el segundo a mediados de septiembre de este año, “han provocado mucho daño" a la población que depende del agua del río y los peces, que son parte de su dieta básica.

Han tenido que "tomar agua y comer peces contaminados con petróleo sin que ningún gobierno se haya preocupado”, se quejó aludiendo al mandatario actual pero también a sus predecesores.

Los dos derrames petroleros afectaron no sólo a Cuninico sino también a 79 comunidades indígenas, en las que a menudo no hay agua potable, electricidad, internet o telefonía.

El Ministerio de Salud peruano realizó exámenes de sangre y orina a 129 pobladores de Cuninico y San Pedro en 2016, dos años después del primer derrame, y descubrió que el 50% de Cuninico y el 16% de San Pedro tenían elevados niveles de mercurio y cadmio, por encima de los recomendados por la Organización Mundial de la Salud.

“Los niños tienen esos venenos en la sangre, la gente sufre de problemas estomacales, eso es de todos los días”, dijo Trujillo.

Galo Vásquez, dirigente de la Federación de los Pueblos Cocamas Unidos del Marañón, que se encuentra en la zona, dijo a AP que su madre murió en 2020 de cáncer cuando tenía 73 años. Otras dos mujeres fallecieron con cáncer diagnosticado y 29 murieron con los mismos síntomas sin haber sido atendidas por un médico o diagnosticadas. “Tomar agua contaminada y que cinco gobiernos no hagan nada por solucionarlo significa que nos quieren exterminar”, reclamó.

El barco que había sido retenido continuó su ruta por el río Marañón. Había partido de Yurimaguas y su destino es Iquitos, la capital de la región de Loreto y principal ciudad de la Amazonia de Perú.

Publicado en Inicio » Mundo »