Donald Trump, Rusia y Ucrania: La influencia de su pasado en el presente

El expresidente sigue obsesionado con la 'caza de brujas' y su relación con Putin mientras su relación con Zelenskyy se deteriora

El peso de la 'caza de brujas' en la visión de Trump

Donald Trump nunca ha dejado de mencionar la investigación sobre la interferencia rusa en la elección presidencial de 2016. En su discurso más reciente, volvió a calificar la pesquisa como un 'engaño' y una 'cacería de brujas', destacando que tanto él como Vladimir Putin fueron víctimas de lo que considera una injusticia.

La investigación, encabezada por el fiscal especial Robert Mueller, confirmó que Rusia interfirió en la elección mediante ciberataques y la difusión de información falsa para favorecer a Trump. Si bien no se probaron colusiones directas con la campaña del republicano, el caso dejó una sombra sobre su presidencia. En una cumbre en Helsinki en 2018, Trump llegó a insinuar que creía más en las palabras de Putin que en las agencias de inteligencia estadounidenses, un hecho que generó indignación en su país.

La relación con Ucrania: Un pasado conflictivo

Si hay un episodio clave que define la relación actual de Trump con Ucrania es su primer juicio político en 2019. En medio del proceso electoral, el entonces presidente presionó a su homólogo ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, para que investigara al entonces candidato Joe Biden y a su hijo Hunter. Durante una llamada telefónica, se escucha a Trump pidiendo un 'favor' a Zelenskyy, sugiriendo que solo entonces liberaría ayuda militar retenida para Ucrania.

El incidente fue denunciado por un informante y resultó en el primer impeachment de Trump, aunque finalmente fue absuelto por el Senado. Esta experiencia marcó profundamente su relación con el líder ucraniano y su percepción sobre el conflicto actual entre Ucrania y Rusia.

La explosiva reunión en la Casa Blanca

Recientemente, un encuentro entre Trump y Zelenskyy en Washington terminó en una confrontación sin precedentes. Trump acusó al mandatario ucraniano de falta de respeto, señalando que su país no estaba listo para aceptar un acuerdo de paz con Rusia. Zelenskyy, por su parte, enfatizó que el conflicto sigue lejos de resolverse y agradeció al Congreso estadounidense su apoyo.

El deterioro de la relación bilateral preocupa a muchos aliados occidentales. Líderes europeos como el primer ministro británico, Keir Starmer, han mostrado su apoyo a Ucrania tras la reunión fallida. Mientras tanto, Rusia ha celebrado la discordia entre ambos mandatarios, ante la posibilidad de que Estados Unidos frene su ayuda a Kyiv.

¿Qué sigue para Trump, Putin y Zelenskyy?

El futuro de la política exterior de Trump, especialmente en relación con Rusia y Ucrania, sigue siendo incierto. Su insistencia en que la guerra podría solucionarse rápidamente con concesiones a Moscú genera preocupación entre expertos políticos y miembros del Congreso.

A medida que la política internacional se fragmenta, el legado de relaciones controvertidas y decisiones polarizadoras de Trump sigue influyendo en el panorama global. Su afinidad con Putin y su escepticismo hacia Ucrania pueden determinar no solo su posible regreso a la Casa Blanca, sino también el futuro de un conflicto que ha cambiado la dinámica geopolítica del mundo.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press