Ancelotti y la eterna espera: ¿Es el DT ideal para una Brasil sin rumbo?
Brasil sueña con Carlo Ancelotti al mando de la Selección Nacional, pero entre idas y venidas, la incertidumbre crece y la paciencia se agota
Un gigante sin timón: la saga de la Selección Brasileña sin entrenador
Desde el despido de Dorival Júnior el pasado 28 de marzo, la Selección Brasileña de fútbol vive días de incertidumbre. A menos de un mes de anunciar la próxima convocatoria para las Eliminatorias rumbo al Mundial de 2026, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) aún no ha concretado la contratación de su nuevo director técnico, y todos los focos apuntan a uno de los entrenadores más laureados del siglo XXI: Carlo Ancelotti.
¿Por qué Ancelotti?
Carlo Ancelotti no es un novato en estas lides. Con cuatro Champions League en sus vitrinas (dos con el Milan y dos con el Real Madrid), títulos en las cinco principales ligas europeas y una reputación intachable, no es de extrañar que el nombre del italiano seduzca a la CBF.
No obstante, el cortejo lleva más de un año cocinándose, desde que Tite dejara el cargo tras el Mundial de Catar 2022. Desde entonces, la Selección ha tenido tres entrenadores interinos: Ramon Menezes, Fernando Diniz y el propio Dorival Júnior. Ninguno logró convencer ni ofrecer resultados llamativos.
La obsesión por Ancelotti tiene tanto de lógica como de emocional. La CBF ve en él una figura de peso internacional que puede devolver a Brasil al pedestal del fútbol mundial, algo que no ocurre desde 2002, cuando Cafú, Ronaldo, Rivaldo y compañía levantaron la Copa del Mundo en Corea-Japón. Pero el precio de este deseo puede estar siendo demasiado alto.
Ancelotti, aún atado al Madrid
El gran escollo es evidente: Ancelotti aún tiene contrato con el Real Madrid hasta junio de 2025. Según fuentes internas de la CBF, el presidente Ednaldo Rodrigues y el director de selecciones Rodrigo Caetano lideran la negociación desde hace meses, pero el desenlace parece más lejano que nunca. Mientras que Florentino Pérez mantiene su respaldo al italiano públicamente, los aficionados merengues ya claman por un recambio joven como Xabi Alonso, actual DT del Bayer Leverkusen.
La temporada del conjunto blanco está lejos de ser brillante. Eliminado por Arsenal en los cuartos de final de la Champions League, derrotado por el Barcelona en la final de Copa del Rey y varios puntos por debajo de los azulgranas en LaLiga, el crédito de Ancelotti está cerca de agotarse, al menos para parte de la afición. Sin embargo, dejar el club madrileño de forma prematura parece improbable salvo que cese de forma voluntaria o el Real Madrid decida cortar la relación, algo que no ha sucedido.
La presión aumenta en Brasil
Al otro lado del Atlántico, la situación alcanza tintes dramáticos. Brasil se encuentra cuarta en las Eliminatorias Sudamericanas, diez puntos por debajo del líder Argentina, que ya aseguró su presencia en el Mundial 2026 tras 14 jornadas. Los tropiezos recientes han dejado a la “Canarinha” tocada anímicamente y falta de identidad. El 4-1 sufrido frente a la Albiceleste en marzo fue la gota que rebalsó el vaso para Dorival Júnior.
Esto ha encendido los ánimos de leyendas del fútbol y de la prensa local. El ex capitán Cafu declaró a la cadena SBT que se debería haber mantenido a Dorival al mando: “Deberíamos dejar que nuestros entrenadores se consoliden. Yo habría continuado con Dorival.”
Más dura fue la crítica del popular comentarista Galvão Bueno en TV Globo: “Lo que ha hecho la CBF con el fútbol brasileño es vergonzoso. Cuatro años con técnicos interinos, es una payasada. Se habla de Ancelotti desde enero de 2023 y todo parece una novela sin final.”
Jorge Jesus, la alternativa silenciosa
Mientras Ancelotti mantiene los labios sellados y declara que seguirá en el Madrid mientras Florentino lo desee, los medios brasileños insisten en que Jorge Jesus —ex Flamengo y actual entrenador del Al-Hilal saudí— es la carta de respaldo en caso de que el italiano no llegue.
Jesus no es ajeno al fútbol brasileño: bajo su mando, Flamengo ganó la Copa Libertadores en 2019 y enamoró a una generación de expertos con un fútbol vertiginoso, comprometido y ganador. A diferencia de Ancelotti, conoce la idiosincrasia brasileña, el entorno mediático y el tipo de jugador que prevalece en Sudamérica.
¿Y si fuera un brasileño?
En una paradoja que resurge con fuerza, muchos hinchas y voces autorizadas del fútbol nacional comienzan a preguntarse si no sería mejor apostar por uno de los suyos. ¿Por qué Brasil, cuna de grandes técnicos como Telê Santana, Zagallo o Luiz Felipe Scolari, debe salir a buscar figuras extranjeras?
A favor de un DT brasileño se argumenta que el idioma, la cercanía cultural y el conocimiento del fútbol base brasileño son ventajas difíciles de suplir con conferencias o traductores. Además, tras tantos años sin una identidad clara en la Selección, se clama por un proyecto más a largo plazo, auténtico y menos mediático.
El tiempo se agota
La CBF ha indicado que espera tener nuevo entrenador antes del 20 de mayo, fecha en la que se anunciará la convocatoria para los partidos clasificatorios frente a Ecuador (de visitante) y Paraguay (como local), programados para principios de junio. Sin embargo, con el último partido del Real Madrid en LaLiga fijado para el 25 de mayo, parece improbable que haya cambios antes de esa fecha.
Además, el calendario no favorece: el Mundial de Clubes se celebrará en Estados Unidos a partir de mediados de junio, y si Ancelotti continúa con el Madrid hasta entonces, su disponibilidad inmediata estaría comprometida, alargando aún más la espera.
Qué se juega Brasil con su decisión
Brasil se encuentra en una encrucijada: arriesgarse a una operación larga y mediáticamente desgastante con Ancelotti o apostar por una solución nacional —quizás menos glamorosa— pero más cercana, rápida y funcional.
- Ventajas de Ancelotti: experiencia europea, respeto internacional, gestión de egos estelares, historial exitoso.
- Desventajas: falta de experiencia con selecciones nacionales, barrera del idioma y la cultura, poca disponibilidad actual.
- Ventajas de un DT brasileño: conocimiento del medio local, identificación cultural, contacto con futbolistas emergentes.
- Desventajas: presión mayor de la crítica local, menor peso mediático internacional.
¿Es momento de una revolución futbolística o de reencontrarse con sus raíces?
El futuro inmediato
Este mes será decisivo para la CBF. Cualquier nueva decepción puede extender aún más la herida emocional de una nación acostumbrada a ganar. El tiempo apremia y los errores del pasado pesan más que nunca. ¿Será Ancelotti el salvador en quien esperan desde hace más de un año? ¿O dará Brasil un golpe de timón para reconstruir desde casa?
Mientras tanto, el mundo mira con lupa cada movimiento del gigante sudamericano. Porque cuando Brasil estornuda, el fútbol mundial se resfría.