Irán entre la espada nuclear y la pared diplomática: ¿resistencia estratégica o teatro geopolítico?
Mientras Teherán ensalza ataques contra Israel y señala a EE.UU., aún insiste en negociar un acuerdo nuclear. Un análisis profundo de la paradoja iraní en un Medio Oriente en llamas.
Una retórica confrontativa con sed de diplomacia
En las últimas semanas, Irán ha intensificado su discurso beligerante contra Estados Unidos e Israel, al mismo tiempo que reitera su intención de reanudar las conversaciones nucleares con Washington. Esta contradicción estratégica revela un telón de fondo tan complejo como volátil.
Desde la difusión de pruebas de misiles balísticos, hasta un mural que muestra una jambiyya —el tradicional puñal yemení— apuntando a objetivos israelíes, Irán presenta una figura desafiante. Sin embargo, afirma querer evitar una escalada total y apostarle al diálogo. ¿Contradicción? ¿Teatro político? ¿O una compleja maniobra diplomática?
El ‘Eje de la Resistencia’ en jaque
El autodenominado Eje de la Resistencia, compuesto por Irán, Hezbolá, los hutíes y algunas facciones proiraníes en Siria e Irak, ha sustenido durante décadas su narrativa de confrontación con Israel y EE.UU. No obstante, los últimos eventos han cambiado radicalmente el tablero geopolítico.
El ataque de Hamas a Israel el 7 de octubre de 2023 —que dejó más de 1.200 israelíes muertos y 250 secuestrados— desencadenó una devastadora ofensiva israelí sobre Gaza. Más de 52.000 palestinos han muerto desde entonces, muchos de ellos mujeres y niños, según autoridades sanitarias palestinas.
Este conflicto ha generado un nuevo equilibrio. Hezbolá ha sido contenido por ataques israelíes, mientras que Bashar al Asad, viejo aliado de Teherán, perdió el control de Siria tras cinco décadas de gobierno hereditario. Ahora, los hutíes en Yemen son el último bastión exterior de influencia efectiva para Irán.
El rol de los hutíes: independencia o brazo largo iraní
El reciente ataque de los hutíes contra las cercanías del Aeropuerto Ben-Gurión en Israel, que logró evadir sus defensas antimisiles, fue destacado por los medios estatales iraníes como un triunfo. No obstante, el Ministerio de Exteriores iraní afirmó que la decisión fue independiente.
Esto es debatido por expertos internacionales. Si bien los hutíes tienen cierta autonomía política y militar, el papel de Irán en el suministro de armas y entrenamiento a lo largo de la guerra civil en Yemen ha sido determinante.
“El pueblo yemení, por sentimientos humanos y solidaridad religiosa con los palestinos, ha tomado medidas ante la agresión constante de América”, declaró Esmail Baghaei, vocero del Ministerio iraní.
La línea entre autonomía insurgente y proxy regional es delgada, pero funcional para Teherán.
El dilema nuclear: ¿negociación sincera o táctica de presión?
A pesar de su agresiva postura mediática y militar, Irán mantiene como prioridad el alcanzar un nuevo acuerdo nuclear con EE.UU. A través del pacto, Irán busca reducir su enriquecimiento de uranio a cambio del levantamiento de sanciones internacionales.
La situación económica de Irán ha puesto presión sobre su liderazgo: el rial iraní, que llegó a estar a más de 1 millón por dólar estadounidense, se ha apreciado a 840.000 por dólar solo por la expectativa de conversaciones.
Sin embargo, las conversaciones en Roma programadas recientemente fueron canceladas. Trump, en una carta enviada en marzo al líder supremo Ali Khamenei con intermediación de Emiratos Árabes Unidos, impuso un plazo de dos meses para llegar a un entendimiento. La presión crece mientras Irán desafía pero también necesita alivio económico.
La sombra estadounidense y el hardline de Trump
El expresidente Donald Trump, con su férrea oposición al acuerdo nuclear firmado bajo Obama en 2015, continúa presionando para que Irán renuncie totalmente a su capacidad de enriquecer uranio; demanda considerada inaceptable por Teherán.
Trump también amenaza con sanciones a países que compren petróleo iraní, lo cual reaviva la urgencia para Irán de encontrar una salida negociada.
Asimismo, Israel, con Netanyahu al frente, ha apoyado consistentemente esta línea dura, abogando por la desvinculación total de Estados Unidos del acuerdo nuclear.
Europa pierde la paciencia
En medio de estos movimientos, Irán intenta tender puentes. El Ministro de Exteriores iraní Abbas Araghchi se reunió con su homólogo pakistaní para tratar el tema nuclear. Sin embargo, la recepción en Europa fue considerablemente más fría.
Kaja Kallas, jefa de política exterior de la Unión Europea, afirmó:
“Pedí a Irán detener su apoyo militar a Rusia y expresé preocupaciones sobre los derechos humanos y los ciudadanos europeos detenidos. Las relaciones UE-Irán dependen del progreso en todos estos temas.”
El apoyo de Irán a Rusia en la guerra en Ucrania también ha deteriorado las relaciones con Europa, complicando aún más cualquier reactivación del acuerdo nuclear de 2015.
¿Puede Irán sostener su retórica dual?
Esta estrategia de mostrar fuerza mientras se busca negociación puede ser una jugada arriesgada. Demasiado endeble para sostener prolongadamente, plantea preguntas sobre su viabilidad a largo plazo.
La crítica del ministro de Defensa iraní, Aziz Nasirzadeh, al secretario de Defensa de EE.UU. Pete Hegseth —quien advirtió que Irán pagaría por armar a los hutíes— engloba esta sintomática contradicción. Nasirzadeh sentenció:
“Aconsejo a los funcionarios estadounidenses que lean la historia reciente de Irán. No se habla con Irán en el lenguaje de amenazas.”
El futuro del rompecabezas regional
Irán se encuentra ahora en una posición geopolítica frágil: su red de alianzas regionales ha sido erosionada, su economía está al límite, y su diplomacia pende de un hilo.
Al mismo tiempo, Teherán no puede renunciar a su narrativa de fuerza y resistencia sin poner en peligro su legitimidad interna y regional. Después de todo, su política exterior ha funcionado durante décadas bajo esa fórmula: resistencia ideológica combinada con flexibilidad pragmática cuando la supervivencia nacional lo exige.
El problema es que, cada vez más, esa fórmula parece destinada al agotamiento.