Jan Schakowsky: El adiós de una pionera progresista tras 14 mandatos en el Congreso
La representante de Illinois cierra un ciclo en Washington tras más de dos décadas de activismo legislativo marcado por su lucha por la equidad, los derechos reproductivos y la sanidad universal
Por más de 25 años, Jan Schakowsky ha sido un bastión del progresismo estadounidense en la Cámara de Representantes. Ahora, a sus 80 años, la veterana legisladora del Distrito 9 de Illinois anuncia su retiro, marcando el fin de una era para la política del norte de Chicago. En este análisis, exploraremos el legado de Schakowsky, sus causas más emblemáticas y cómo su salida se inscribe en un proceso más amplio de renovación dentro del Partido Demócrata.
Un legado de lucha progresista
Schakowsky llegó al Congreso de Estados Unidos en 1999 y, desde entonces, se mantuvo fiel a una agenda de izquierda centrada en la justicia económica, el acceso universal a la salud, los derechos de los adultos mayores y la defensa de los derechos reproductivos de las mujeres. Su lema siempre fue claro: "el poder pertenece al pueblo".
Durante su mandato, fue parte clave del Comité de Energía y Comercio de la Cámara, desde donde impulsó legislaciones enfocadas en la protección del consumidor, el acceso a medicamentos asequibles y una fuerte fiscalización de las prácticas corporativas abusivas en sectores como el farmacéutico.
“Voy a seguir luchando por mi comunidad y mi país,” dijo Schakowsky en su anuncio, realizado durante su tradicional almuerzo anual en Chicago. “Haré todo lo que esté en mis manos para garantizar una economía que funcione para todos, no solo para los ricos”.
Una voz crítica en la era Trump
Uno de los momentos más mediáticos de la congresista vino durante la era Trump. Desde el primer momento, fue una de las voces más críticas del entonces presidente. De hecho, se negó a asistir a sus dos ceremonias de investidura, denunciando públicamente lo que consideraba políticas regresivas en materia de inmigración, sanidad, derechos civiles e igualdad de género.
Schakowsky también jugó un papel clave durante la redacción de la Ley de Cuidado de Salud Asequible (Affordable Care Act), uno de los principales logros legislativos de la administración Obama. Tuvo una presencia destacada en los debates del Congreso e impulsó enmiendas que ampliaban el acceso a cuidados médicos para poblaciones vulnerables.
El Distrito 9: bastión demócrata
El Distrito 9 de Illinois que representa Schakowsky es notoriamente progresista. Incluye vecindarios del norte de Chicago, como Evanston y Skokie, y combina zonas de clase media y alta con una diversidad racial considerable. En las elecciones de noviembre de 2022, derrotó cómodamente al republicano Seth Allen Cohen (veterano de la Marina), reafirmando el perfil ideológico del distrito.
Sin embargo, a pesar de su popularidad, nuevas figuras jóvenes del progresismo ya analizaban competir en futuras contiendas. Entre ellas, Kat Abughazaleh, una periodista e influencer política de 26 años, había declarado su intención de postularse en 2026, incluso antes del anuncio de retiro de Schakowsky. Según la Comisión Federal de Elecciones, Abughazaleh recaudó $379,000 en el último trimestre reportado, superando a Schakowsky, que recaudó $213,000. Aun así, esta última tenía más del doble de fondos en efectivo disponibles: $877,000.
Movimiento generacional en el Partido Demócrata
La noticia de la jubilación de Schakowsky se suma a una tendencia creciente en las altas esferas del Partido Demócrata. Hace solo unas semanas, el senador Dick Durbin —el número dos del partido en el Senado— anunció que no buscará la reelección en 2026. Esta tendencia sugiere una transición generacional que podría redefinir el futuro ideológico y estratégico del partido.
Muchos ven en esta ola de jubilaciones la oportunidad de renovar las filas del partido con figuras emergentes que sintonizan mejor con la generación Z y los millennials, promoviendo temas como el Green New Deal, la cancelación de deuda estudiantil y la reforma del sistema penal.
¿Quién hereda el liderazgo?
Además de Abughazaleh, otros posibles contendientes para el escaño son el alcalde de Evanston, Daniel Biss (exlegislador estatal con fuerte credibilidad progresista), la representante estatal Kelly Cassidy y la senadora estatal Laura Fine. Todos comparten una visión progresista, lo que sugiere que el distrito probablemente se mantendrá bajo control demócrata, con un giro a agendas posiblemente más audaces o más alineadas a los nuevos tiempos digitales.
Daniel Biss, por ejemplo, fue uno de los primeros defensores de una renta básica universal en Illinois durante su paso por el Senado estatal. Cassidy ha llevado fuertes iniciativas para despenalizar la marihuana y ampliar derechos LGBTQ+, mientras que Fine ha trabajado intensamente en salud mental.
Educación y trayectoria antes del Congreso
Jan Schakowsky no llegó al Congreso como parte de la elite empresarial o del derecho. Su formación proviene del activismo de base y la educación. Nacida en Chicago en 1944, trabajó como maestra en el sistema de escuelas públicas de Illinois antes de ingresar en la política estatal. Su enfoque siempre tuvo una fuerte carga pedagógica: explicar las leyes, conectar con los votantes y traducir el lenguaje legislativo en propuestas tangibles para la gente común.
En los años 80 y 90 trabajó como activista en defensa del consumidor, enfocándose en etiquetado veraz de productos alimenticios y marketing ético de productos infantiles. Su paso por la legislatura estatal marcó el inicio de un perfil tenaz en temas de regulación y derechos.
Una mujer en política: persistencia, visión e impacto
En una arena históricamente dominada por hombres, Schakowsky destacó no solo por su longevidad, sino por su consistencia ideológica. Nunca cedió ante presiones corporativas ni cambió su postura en temas neurálgicos como el aborto, la inmigración y el cambio climático.
En 1998, derrotó en las primarias demócratas a un joven empresario, ahora gobernador de Illinois, JB Pritzker. Él estaba entre los asistentes a su último almuerzo anual y, con tono emotivo, reconoció su victoria de hace más de dos décadas. “Perdí ante Jan, y fue una de las derrotas más educativas de mi vida política,” dijo entre risas.
Retiro, pero no despedida
Schakowsky dejó claro que, aunque no buscará la reelección, su papel en la política no se desvanece. Ha prometido usar el resto de su mandato —que concluye en enero del 2027— para asegurar que su legado continúe a través de nuevas políticas y líderes progresistas que compartan su visión.
“Seguiré luchando. No me retiro de la causa, solo del cargo,” aseguró.
El Congreso de EE.UU. no pierde solo una legisladora; pierde a una activista, maestra y defensora de los vulnerables. La generación que toma la posta tendrá el reto de no solo sostener el legado de Schakowsky, sino de expandirlo hacia un futuro de mayor equidad y justicia social. Mientras tanto, su historia permanecerá como inspiración para miles de mujeres que deciden entrar a la política para transformar el sistema desde adentro.