Una rotación bajo fuego: la lucha de los Cubs para sostenerse entre lesiones y esperanza
Con Shota Imanaga, Javier Assad y Justin Steele en la lista de lesionados, la rotación inicial de los Chicago Cubs enfrenta un duro desafío en medio de una temporada prometedora
Una nueva baja en la rotación de los Cubs
La temporada 2025 de las Grandes Ligas ha traído tanto esperanza como frustración para los Chicago Cubs. En una jornada marcada por la decepción, la noticia de que el abridor zurdo Shota Imanaga ha sido colocado en la lista de lesionados de 15 días debido a una distensión en el tendón de la corva izquierda suma una nueva preocupación en Wrigleyville. El japonés, que venía firmando una gran campaña, se une a una ya preocupante lista de bajas en el cuerpo de lanzadores titulares del equipo.
El incidente que encendió las alarmas
Durante la sexta entrada del juego del domingo ante los Milwaukee Brewers, Imanaga corrió hacia primera base en un intento por completar una doble matanza. Al hacerlo, mostró claros signos de incomodidad en la parte posterior de su pierna izquierda. Aunque inicialmente trató de seguir jugando, tuvo que abandonar el campo con una visible cojera y fue retirado del encuentro.
No era la primera señal de problemas físicos para el exlanzador de la NPB: en su apertura anterior contra Pittsburgh Pirates, dejó el montículo después de cinco entradas debido a calambres en ambas piernas.
Una joya japonesa bajo amenaza
Shota Imanaga llegó a Chicago en enero de 2024 con gran expectativa, firmando un contrato de cuatro años y 53 millones de dólares. Su impacto fue inmediato: en su primer año finalizó con un impresionante récord de 18 victorias y 5 derrotas, con una eficiencia de 2.89 ERA, lo que le valió el cuarto lugar en la votación a Novato del Año en la Liga Nacional.
Este 2025 parecía ser la consolidación de su talento en el béisbol de Grandes Ligas, hasta que las lesiones comenzaron a hacer mella. Las estadísticas de esta temporada, antes de su más reciente incidente, seguían siendo positivas: 5⅔ entradas lanzadas, 4 hits y 2 carreras permitidas contra Milwaukee. Sin embargo, la constante aparición de molestias musculares ha encendido las alarmas en la gerencia de los Cubs.
Una rotación desmembrada
El caso de Imanaga no es aislado. El zurdo Justin Steele ha sido descartado para el resto de la temporada debido a una lesión en el codo. A eso se suma el diestro Javier Assad, actualmente fuera de acción por un problema en el oblicuo. Tres piezas clave de la rotación inicial están fuera simultáneamente, obligando al equipo a depender de lanzadores jóvenes y menos experimentados.
En respuesta a la baja de Imanaga, el derecho Gavin Hollowell, quien venía trabajando en Triple-A Iowa, fue convocado para unirse al equipo principal. Pero aunque Hollowell suma experiencia en ligas menores, está lejos de representar una solución de largo plazo para un equipo que apunta a los playoffs.
¿Una oportunidad para brillar u otra caída?
La situación lleva al mánager Craig Counsell a una encrucijada. ¿Debe reforzar el bullpen temporalmente con más brazos jóvenes o presionar a la oficina principal para hacer cambios agresivos en el mercado?
Con un récord apenas por encima del .500 y una división Central de la Liga Nacional altamente disputada, los Cubs se enfrentan a una bifurcación crucial: si bien la calidad ofensiva se ha mantenido aceptable, la ausencia de rotación sólida podría comprometar seriamente su campaña.
Recuerdos del pasado: la maldición y la redención
No es la primera vez que los Cubs enfrentan un colapso físico en medio de una promesa de éxito. Basta recordar la temporada 2004 cuando figuras como Mark Prior y Kerry Wood, ambos abridores estelares, sufrieron lesiones secuenciales que arruinaron uno de los cuerpos de lanzadores más temidos de la liga en teoría.
Desde entonces, la franquicia ha tenido destellos, incluyendo el histórico campeonato de 2016 que rompió la maldición de 108 años. Pero lograr consistencia ha sido el verdadero reto.
Lo que dice la estadística
Según datos de FanGraphs, Chicago se ubicaba antes de la lesión de Imanaga entre los 10 mejores equipos de MLB en efectividad combinada de sus abridores, con un promedio colectivo de 3.71 ERA. Sin embargo, desde la lesión de Steele, esta cifra comenzó a deslizarse, y tras la baja de Assad, ha rozado los 4.20.
Más aún, el WAR (Wins Above Replacement) de la rotación abridora de Chicago estaba en declive: de 6.3 en abril a apenas 1.2 en los primeros diez días de mayo, marcando una pendiente descendente que preocupa tanto al cuerpo técnico como a la afición.
¿Hay luz al final del túnel?
La buena noticia para los fans de los Cubs es que Imanaga, a sus 31 años, no ha sufrido lesiones crónicas previas. La distensión del tendón de la corva requiere reposo y fisioterapia, pero en la mayoría de casos no implica una ausencia prolongada si se maneja adecuadamente.
Además, con el mercado previo a la fecha límite de cambios acercándose, es posible que el presidente de operaciones Jed Hoyer explore nuevas opciones. Queda por ver si optarán por nombres de peso como Shane Bieber o Paul Blackburn, o buscarán adquisiciones menos arriesgadas pero igualmente necesarias.
Mientras tanto, la responsabilidad recae sobre bateadores como Seiya Suzuki, Cody Bellinger y Christopher Morel para mantener a flote al equipo ofensivamente mientras el cuerpo de lanzadores lidia con estos obstáculos.
El camino hacia octubre está lleno de espinas
La temporada 2025 promete estar marcada por la resiliencia. Si bien los Cubs arrancaron con fuerza, la salud física de sus lanzadores será el factor decisivo para determinar si el equipo puede realmente competir por un lugar en la postemporada.
El lema no oficial en Chicago siempre ha sido "esperanza eterna". Esta vez, la esperanza vendrá acompañada de evaluaciones médicas diarias, recuperación fisioterapéutica y decisiones gerenciales cruciales. Y aunque los nombres en la lista de lesionados siguen aumentando, no cabe duda de que los Cubs buscarán, con todas sus armas, mantenerse en la pelea.