El críquet bajo fuego: la Premier League India suspendida por tensiones militares con Pakistán

La geopolítica choca con el deporte: cómo la creciente crisis entre India y Pakistán detuvo el torneo de críquet más popular del mundo

Una pausa inesperada para el torneo más seguido

En un giro dramático de los acontecimientos que pone en evidencia cómo los conflictos geopolíticos permean todas las esferas de la sociedad, la Premier League India (IPL), el torneo de críquet más popular y lucrativo del mundo, ha sido suspendido temporalmente. El anuncio lo hizo el Consejo de Control de Críquet de India (BCCI) el pasado viernes, citando como motivo las intensas tensiones militares con Pakistán tras recientes enfrentamientos en la frontera de Cachemira.

Crónica de un conflicto resurgente

Todo comenzó con un ataque contra turistas en la región de Jammu y Cachemira, controlada por India, lo que desató una serie de intercambios de artillería entre los dos ejércitos enfrentados. Este acontecimiento fue suficiente para que las autoridades indias decidieran, en una maniobra sin precedentes desde la creación del torneo en 2008, interrumpir una competición que atrae a millones de fanáticos no solo en India, sino en el mundo entero.

El BCCI emitió un comunicado afirmando:

"Si bien el críquet es una pasión nacional, no hay nada más importante que la nación misma, su soberanía, integridad y seguridad."

Impacto en el desarrollo del torneo

La suspensión afecta directamente a los 10 equipos que compiten actualmente en la liga, con 12 partidos restantes de la fase de grupos y fases eliminatorias todavía por disputarse. El partido final estaba originalmente programado para el 25 de mayo en Kolkata. Aún no se han definido nuevas fechas ni sedes para reanudar el torneo.

El IPL no es simplemente una competencia local. Esta edición del torneo cuenta con la participación de 65 jugadores internacionales provenientes de países como Australia, Nueva Zelanda, Inglaterra, Sudáfrica, Sri Lanka, Afganistán y las Indias Occidentales. Así, su interrupción pone en jaque a los contratos millonarios, la programación de las cadenas televisivas internacionales y a patrocinadores globales.

Partidos cancelados y logística colapsada

El partido entre Punjab Kings y Delhi Capitals fue cancelado el pasado jueves en Dharamsala a causa de un apagón eléctrico impulsado por una orden gubernamental, como medida preventiva ante posibles ataques. Además, el aeropuerto local fue cerrado y varios vuelos en la región noroccidental de India quedaron suspendidos.

El equipo de Punjab, que tenía previsto jugar su siguiente partido contra Mumbai Indians en Dharamsala, fue reubicado para competir en Mumbai. Estos cambios logísticos resaltan la gravedad de la situación, al punto que se han modificado itinerarios enteros para evitar zonas consideradas de alto riesgo.

Pakistán y el éxodo del críquet

El Consejo de Críquet de Pakistán (PCB), por su parte, ha optado por reubicar la Pakistani Super League (PSL) a Dubái, una medida similar a la que India ha implementado con el IPL. Según un comunicado oficial del PCB, la decisión fue tomada "para garantizar la seguridad de los jugadores internacionales y oficiales" tras el hallazgo de un dron indio dentro del estadio de críquet de Rawalpindi, justo antes del inicio de un partido.

Esta situación marca un nefasto precedente para torneos del subcontinente asiático, incapaces de garantizar seguridad en medio de tensiones militares cada vez más frecuentes. En palabras del periodista deportivo pakistaní Faizan Lakhani:

“Cuando hasta el deporte debe huir del conflicto, sabes que las redes diplomáticas han colapsado.”

El críquet como espejo del nacionalismo

En el sur de Asia, el críquet es más que un deporte. Es símbolo de identidad nacional, de competencia geopolítica y de orgullo cultural. Los enfrentamientos entre India y Pakistán en la cancha de críquet han sido tan feroces como los que se dan en el ámbito político. La famosa frase de Imran Khan, expremier pakistaní y exjugador de críquet, lo resume con crudeza:

“Cada vez que vencemos a India en críquet, es como ganar una guerra sin disparar una bala.”

¿Seguridad vs. espectáculo?

La seguridad de los jugadores y espectadores ha sido colocada como la prioridad principal. No obstante, no son pocos los que critican la decisión, argumentando que suspender el IPL entrega una victoria simbólica al conflicto. También están en juego miles de empleos temporales ligados a la organización del torneo, la venta de entradas, los derechos televisivos y servicios turísticos.

El sociólogo deportivo Ashish Nandy escribió una vez:

“Cuando el estadio se apaga, no es solo por razones de logística. Lo que está en juego es el alma colectiva de un pueblo que buscaba refugio en el juego.”

Las consecuencias económicas

El IPL está valorado en más de 7 mil millones de dólares, según un informe de Deloitte de 2023. La jefatura del BCCI estima que perder una semana de partidos podría significar una pérdida de hasta 122 millones de dólares, incluyendo derechos de transmisión, patrocinio e ingresos por entradas.

Las cadenas televisivas como Star Sports y plataformas de streaming como JioCinema ya han registrado de 25 a 40 % menos de tráfico diario desde la interrupción, según reportó The Economic Times.

El futuro inmediato y sus incógnitas

Con la incertidumbre reinando sobre cuándo se podrá reanudar el torneo, el BCCI se enfrenta al parecer al que puede ser el momento más delicado en su historia. La institución indicó que cualquier reprogramación se realizaría en “consultación con las autoridades pertinentes y las partes interesadas”, pero no ha establecido fecha límite.

Además, con elecciones nacionales en el horizonte en India y tensiones políticas en aumento, parece poco probable que se logre una rápida estabilización capaz de garantizar un entorno seguro para el retorno de los encuentros.

Algunas lecciones

  • El deporte no es inmune: Si bien se promueve como una herramienta para unir pueblos, el deporte puede convertirse en víctima de intereses políticos y conflictos interestatales.
  • Una industria en riesgo: La economía deportiva depende de la paz. Conflictos regionales pueden afectar fuertemente la confianza de inversionistas, jugadores internacionales y patrocinadores.
  • Diálogo urgente: Si algún mensaje emiten estas suspensiones, es que se necesita con urgencia una diplomacia deportiva que proteja tanto a los jugadores como a las millones de personas cuya conexión emocional y económica con el críquet es significativa.

¿Qué pasará después?

Mientras el destino del IPL 2025 pende de un hilo, una cosa queda clara: cuando el críquet, ese potente bálsamo cultural del sur asiático, se apaga, el mensaje es ensordecedor. No se trata solo de un juego detenidos, sino de naciones enteras preguntándose si alguna vez podrán tener una cancha libre de bombas, tensiones diplomáticas o medidas de emergencia.

Por ahora, el críquet se ha rendido ante las realidades más crudas del mundo moderno.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press