Una noche mágica para Domínguez, una resurrección para Paddack y señales de vida en los Padres

Tres historias memorables en una sola jornada de MLB: los Yankees descubren a su nueva joya, los Padres reviven su ofensiva y los Twins celebran el regreso de un as de la rotación

Jasson Domínguez y su explosión histórica con los Yankees

Este pasado viernes 9 de mayo de 2025 será recordado durante mucho tiempo en el Bronx, gracias a una actuación que solo puede describirse como legendaria. Con apenas 22 años y 91 días, Jasson Domínguez entró en los anales de la historia de los Yankees de Nueva York al convertirse en el pelotero más joven de la franquicia en conectar tres cuadrangulares en un solo juego.

El joven dominicano, apodado “El Marciano” por su talento “de otro mundo”, conectó un jonrón solitario en la tercera entrada ante Osvaldo Bido, repitió la dosis en la séptima entrada ante Hogan Harris y luego coronó su noche estelar con un grand slam contra Elvis Alvarado en el octavo inning. Como si eso no bastara, sumó una impulsada adicional con un elevado de sacrificio en la quinta.

Siete carreras impulsadas, ambas manos, y un récord

Domínguez no solo brilló por su poder, sino también por su versatilidad. Dos de sus jonrones fueron desde el lado izquierdo del plato, mientras que el otro lo bateó desde la derecha, subrayando su capacidad como bateador ambidiestro. Esa omnipresencia le permitió convertirse en el quinto jugador en lo que va de temporada en conectar tres cuadrangulares en un juego. Otros que ya lo habían logrado son nombres grandes como Aaron Judge, José Ramírez e Iván Herrera; aunque el más descomunal fue Eugenio Suárez que conectó cuatro jonrones en un solo juego con los Dbacks.

Con esta actuación en West Sacramento, Domínguez elevó sus totales de la temporada de forma drástica, pasando de apenas dos cuadrangulares hasta un total de cinco. En lo que llevaba de carrera antes de este choque, solo había conectado ocho jonrones en 191 turnos al bate.

“Estoy agradecido por esta noche. He trabajado duro por este tipo de momentos, pero ni siquiera yo esperé algo así”, declaró Domínguez postpartido, mientras los fanáticos de los Yankees sueñan con tener una nueva superestrella en crecimiento.

Chris Paddack, renacido tras la tormenta

Lejos de la algarabía en California, en Minneapolis se vivió otra historia de redención y esperanza. Chris Paddack, lanzador de los Twins, había pasado por lo que muchos considerarían una pesadilla: lesiones constantes, dos cirugías Tommy John, y una larga rehabilitación que lo alejó del estrellato que había prometido en sus inicios con los Padres.

Pero este viernes, Paddack alcanzó ese punto de madurez y excelencia del que tanto hablaban sus reportes de scouting. Tiró canas al aire durante 7.1 entradas dominantes, permitiendo apenas tres imparables al conjunto de los Giants de San Francisco. Su única mancha fue un jonrón de Matt Chapman en el séptimo inning. Antes de eso, la perfección casi lo acompañaba: sólo permitió un sencillo de Christian Koss con dos outs en la sexta.

La imagen final del juego fue enternecedora e hilarante. Durante la entrevista post-juego de Apple TV+, algunos compañeros lo sorprendieron con una lluvia de cubetas de agua helada, una tradición que Paddack sabía que llegaría, pero que igual lo tomó desprevenido.

“Me dije a mí mismo que estuviera atento si llegaba a una entrevista así, pero me enfoqué tanto en el juego que lo olvidé. ¡Valió totalmente la pena!”, comentó entre risas.

Un regreso sólido y una rotación esperanzadora

Con esta apertura, Paddack obtuvo su primera victoria desde el 10 de junio del año pasado y acumuló seis ponches sin otorgar pasaportes. Los Twins están ahora en racha, sumando su sexta victoria consecutiva (su mejor seguidilla desde junio del año pasado) y parte de esa buena racha se debe a sus abridores.

La rotación de lanzadores ha sido el punto más estable del equipo en un inicio de temporada errático. Con una ERA colectiva de 3.34, los abridores de Minnesota ocupan el quinto lugar en efectividad en todas las Grandes Ligas. Una señal clara de que el equipo quiere competir en serio este 2025.

“Nuestros abridores tienen que ser una gran fortaleza para nosotros este año. Y así lo están demostrando”, explicó el manager Rocco Baldelli.

San Diego revive su ofensiva, los Rockies siguen cuesta abajo

En Denver, los Padres de San Diego finalmente encontraron vida con el bate, venciendo 13-9 a los Rockies en un duelo que pareció más un partido de primavera que un juego oficial del mes de mayo. Este festival de carreras tuvo como grandes protagonistas a Gavin Sheets (dos dobles y cuatro remolcadas), Manny Machado, Luis Arráez y el novato Jackson Merrill, quienes conectaron tres imparables cada uno.

Incluso Martín Maldonado se unió a la fiesta con un jonrón de dos carreras en el sexto inning que coronó un rally de cinco carreras y prácticamente enterró a Colorado. Sheets también dejó su marca con un doble productor que impulsó a Cronenworth y luego anotó él mismo gracias a un sencillo de Jason Heyward.

Randy Vásquez y Robert Suárez, héroes silenciosos

En medio del vaivén ofensivo, el pitcher Randy Vásquez logró contener a la ofensiva de los Rockies con seis entradas sólidas, permitiendo apenas dos carreras. En el noveno, con dos corredores en base y un solo out, Robert Suárez entró para apagar el incendio y consiguió un doble play que selló el triunfo. Era su salvamento número 15 de esta temporada.

Los Rockies, por su parte, siguen sumidos en el peor inicio de temporada de su historia moderna con un récord de 6-32. Incluso cuando conectan múltiples jonrones (como sucedió este juego), no logran ganar. Ya son nueve derrotas en nueve juegos en los que han dado al menos dos cuadrangulares.

Dato curioso: la racha de los Rockies sin anotar carreras contra Padres había llegado a 32 entradas consecutivas antes de que Michael Toglia conectara un jonrón en la cuarta entrada.


¿Una noche fortuita o señales de cambios profundos?

La jornada del viernes dejó clara una cosa: la juventud está tomando protagonismo en MLB. Con protagonistas como Domínguez, Merrill y una reaparición de figuras que alguna vez parecieron estrellas caídas como Paddack, los fanáticos del béisbol tienen razones para soñar con una campaña rica en historias humanas y épicas deportivas.

Mientras Yankees y Twins se ilusionan con lo que estos jugadores pueden aportar a lo largo del año, los Padres aún buscan estabilidad, pero dejaron ver sus garras con un lineup encendido. En contraste, los Rockies siguen encontrando nuevas maneras de perder, incluso cuando muestran signos de vida.

La temporada apenas comienza, pero noches como esta nos recuerdan por qué amamos este deporte.

— Por Redacción MLB Hispana

Este artículo fue redactado con información de Associated Press