¿Deben ser liberados los hermanos Menéndez? La justicia y el trauma en juego, 34 años después

La historia del brutal asesinato de sus padres, su condena sin libertad condicional y el nuevo debate judicial impulsado por acusaciones de abuso sexual y avances en la comprensión de traumas

Un crimen que sacudió a Beverly Hills en 1989

El 20 de agosto de 1989, el acomodado vecindario de Beverly Hills despertó con la noticia de un crimen estremecedor: José y Mary “Kitty” Menéndez habían sido brutalmente asesinados a tiros en su propia mansión por sus hijos, Lyle y Erik Menéndez. Lo que parecía una escena salida de una película de terror fue el inicio de uno de los casos judiciales más mediáticos y controvertidos de los años 90 en Estados Unidos.

Más de tres décadas después, los hermanos Menéndez, de 21 y 18 años al momento del crimen, vuelven a ocupar titulares. Esta vez, enfrentan una posible oportunidad de libertad tras pasar casi 30 años en prisión. El proceso de resentencia se ha activado gracias a nuevas pruebas y cambios en las leyes de California sobre jóvenes delincuentes. Pero, ¿es esta justicia tardía o una peligrosa concesión?

Revisión y debate público renovado

El caso de los Menéndez no solo capturó la atención por la brutalidad del crimen, sino por los motivos alegados por la defensa: años de abuso sexual, emocional y físico por parte del padre, José Menéndez, ejecutivo de RCA. En el primer juicio, separado por jurados independientes para cada hermano, los jurados no lograron llegar a un veredicto. Pero en el segundo juicio, ya con jurado único y sin aceptar nuevos testimonios sobre los presuntos abusos, fueron condenados en 1996 a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

Desde entonces, y particularmente en los últimos años, una ola de apoyo ha surgido en distintas partes del país. Documentales, entrevistas, grupos en línea y, sobre todo, la serie de Netflix “Monsters: The Lyle and Erik Menendez Story” (2024) han propiciado un cambio en cómo el público percibe el caso, en un contexto más informado sobre los efectos del abuso infantil y las conductas disociadas que pueden provocar.

¿Qué hay de nuevo? Pruebas e interpretaciones actuales

En 2023, los abogados de los hermanos presentaron nuevas pruebas, incluyendo una carta escrita por Erik a un primo antes del asesinato donde describía el abuso sexual al que su padre lo sometía desde niño. Incluso Roy Rosselló, exmiembro del grupo Menudo, reveló en un documental que también fue víctima de José Menéndez cuando tenía 14 años.

Estas pruebas han llevado a la Fiscalía de Los Ángeles, bajo el mandato anterior de George Gascón, a reconsiderar la sentencia impuesta. Gascón argumentó que “el entendimiento moderno del trauma infantil y la violencia familiar habría cambiado el curso del juicio en los años 90”. Su equipo solicitó oficialmente la resentencia con posibilidad de libertad condicional.

Una nueva fiscalía cambia el rumbo

La llegada de Nathan Hochman como nuevo Fiscal del condado de Los Ángeles modificó el panorama. Contrario a su antecesor, Hochman se opone firmemente a una reducción de la sentencia. Considera que los hermanos no han asumido total responsabilidad y duda de la veracidad de las acusaciones de abuso, señalando nuevos incidentes en prisión como la introducción ilegal de teléfonos celulares.

En mayo de 2024, Hochman presentó un informe de un psicólogo forense que concluyó que los hermanos, aunque rehabilitados en ciertos ámbitos, siguen presentando un riesgo moderado de peligrosidad si son liberados.

¿Qué dice la ley sobre crímenes cometidos por jóvenes?

Una de las claves para este proceso es la aplicación de la ley de jóvenes delincuentes de California. Esta ley, vigente desde 2014, permite la revisión de sentencias para individuos condenados cuando tenían menos de 26 años al momento del crimen. Si se aprueba la solicitud de resentencia, los Menéndez podrían recibir la pena de “50 años a cadena perpetua”, haciéndolos elegibles para libertad condicional por tiempo cumplido.

De hecho, el estado ha revisado más de 3,000 casos desde que se implementó esta norma, priorizando la rehabilitación sobre el castigo para jóvenes que muestran crecimiento, estudios, colaboración y sociales contribuciones dentro del sistema carcelario.

¿Rehabilitados? Un análisis del paso del tiempo

Desde su encarcelamiento en 1996, los Menéndez han mantenido buena conducta, según registros penitenciarios. Han obtenido títulos universitarios, participado en programas de ayuda psicológica y creado grupos de apoyo para presos víctimas de abuso sexual. Familiares y activistas consideran que han demostrado reforma y merecen una segunda oportunidad.

Muchos miembros de la familia Menéndez han perdonado a los hermanos y han pedido públicamente su liberación. “El mundo en 1996 no estaba listo para creer que los niños podían ser abusados sexualmente por sus padres”, dijo en rueda de prensa una sobrina de José Menéndez.

El argumento de la fiscalía: el móvil fue el dinero

La narrativa del fiscal Hochman sostiene que los hermanos asesinaron a sus padres por una herencia millonaria y que elaboraron un plan con frialdad y premeditación. En el juicio de 1995, se presentó evidencia de que, tras los asesinatos, los hermanos realizaron adquisiciones costosas, como relojes Rolex y autos deportivos.

Hochman sostiene que, incluso si hubo abuso, nada justifica el crimen y que la sociedad no puede permitir que “la venganza sea justificada por un trauma no denunciado a tiempo”.

La cultura popular, el juicio paralelo y las emociones del pueblo

Casos mediáticos como este suelen generar juicios paralelos en la sociedad. En redes sociales, el grupo #FreeTheMenendezBrothers ha ganado miles de seguidores, incluyendo psicólogos, sobrevivientes de abuso y activistas de derechos humanos que ven en este caso una oportunidad de rectificación legal y societal.

La serie de Netflix también ha reavivado viejas emociones e impulsado un debate sobre qué se considera justicia dentro de una estructura judicial todavía maleable al contexto cultural de cada época.

¿Qué podría pasar esta semana?

Del 13 al 14 de mayo de 2024, el juez Michael Jesic evaluará si aprueba o no la resentencia. El fallo podría darse en audiencia o por escrito en días posteriores. Si el juez reduce la sentencia, los hermanos podrían tener una nueva audiencia frente a la Junta de Libertad Condicional del estado de California, donde se evaluará si representan un peligro para la sociedad.

Mark Geragos, abogado de la defensa, ha declarado que pedirá reducir el cargo de asesinato a homicidio involuntario, lo cual permitiría a sus clientes salir en libertad de forma casi inmediata.

Esta semana, la corte escuchará también el testimonio de al menos siete miembros de la familia Menéndez que apoyan la libertad de los hermanos.

Más allá del caso: ¿Cómo debe actuar el sistema judicial?

El caso de los Menéndez desafía los principios de proporcionalidad, castigo y rehabilitación del sistema penal. ¿Debe el estado admitir que se equivocó o aggiornarse a una sociedad más empática con las consecuencias del abuso? ¿Deben argumentos emocionales e históricos permitir la salida de quienes cometieron un acto violento?

Estas preguntas siguen dividiendo al público y a expertos legales por igual. En palabras del abogado constitucionalista Jay Wexler: “La justicia no se trata solo de castigar, sino de entender el alma humana. Es imperfecta precisamente porque lo humano también lo es.”


📎 Si tú o alguien que conoces está sufriendo violencia familiar o abuso sexual, puedes comunicarte de forma confidencial con la línea directa nacional en EE.UU.: 1-800-799-7233. Siempre hay ayuda disponible.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press