El museo del Indianapolis Motor Speedway renace como un templo inmersivo para los amantes del automovilismo
Con una renovación de $60.5 millones y un diseño que combina historia, tecnología y emoción, el museo se posiciona como una experiencia imprescindible para los fanáticos del deporte motor
INDIANÁPOLIS, Indiana — En el corazón de uno de los circuitos más legendarios del automovilismo mundial, el Indianapolis Motor Speedway Museum ha reabierto sus puertas tras una profunda transformación. Pero esta no es solo una reapertura: es un renacimiento total de cómo se cuenta y se vive la historia del automovilismo en Estados Unidos. Con una inversión de $60.5 millones y una remodelación que ha durado más de 18 meses, el museo ha pasado de ser un espacio estático a una experiencia inmersiva y educativa que promete cautivar a generaciones enteras de fanáticos.
Una historia sobre ruedas que cobra nueva vida
El Indianapolis Motor Speedway, fundado en 1909, es el hogar del legendario Indy 500, la carrera conocida como “The Greatest Spectacle in Racing”. Desde su creación, este óvalo ha sido testigo de más de un siglo de innovación, riesgos, tragedias y triunfos. El museo, ubicado entre las curvas 1 y 2 del circuito de 2.5 millas, ha evolucionado para convertirse en un espacio que honra ese legado con una narrativa moderna y emocionante.
En palabras de Rick Mears, uno de los cuatro pilotos que ha ganado cuatro veces las 500 Millas de Indianápolis, el nuevo museo genera emociones intensas: “Es increíble. Nunca soñé estar en una lista como esta, y que se haya hecho de esta manera... te trae muchos recuerdos. Es un honor”.
Un homenaje a los grandes
El nuevo museo dedica un espacio especial a los únicos cuatro pilotos que han ganado el Indy 500 en cuatro ocasiones: Rick Mears, A.J. Foyt, Al Unser y Helio Castroneves. Este club de élite cuenta ahora con una galería exclusiva en el nivel inferior, antes utilizado solo como almacén. Videos, autos originales y elementos interactivos permiten que los visitantes se sientan parte de esas legendarias victorias.
De la nostalgia al futuro: tecnología para aprender e inspirar
La renovación no solo se enfocó en restaurar artefactos, sino en crear un espacio orientado a la educación STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas). Las nuevas galerías incluyen experiencias inmersivas como la Starting Line Experience, donde se recrea la primera fila de autos del Indy 500 con pantallas envolventes, simulando la adrenalina del día de la carrera.
El museo también incorpora tecnología de vanguardia, con zonas interactivas donde los más jóvenes, estudiantes o aficionados pueden aprender sobre ingeniería automotriz, aerodinámica o el diseño de autos de carrera.
Repasando la evolución de los talleres: Gasoline Alley
La visita comienza con una recreación de Gasoline Alley, la zona de boxes y garajes del circuito, mostrando su evolución desde los años 1900 hasta la actualidad. Allí se ven desde antiguos cubículos de madera hasta las modernas instalaciones donde hoy se preparan los bólidos que compiten por la gloria.
Un espacio que cuenta la historia completa del automovilismo en Indianápolis
El museo ya no está centrado únicamente en el Indy 500. Otras disciplinas también tienen su lugar: NASCAR, motociclismo, Red Bull Air Race e incluso competencias con globos aerostáticos son parte de la rica historia de este templo del motor.
El nuevo espacio cuenta con:
- 7 galerías permanentes
- 3 galerías rotativas
- Más de 40,000 pies cuadrados de espacio adicional
- Una galería dedicada a Roger Penske, actual propietario del circuito e ícono del automovilismo
- Una división específicamente orientada al equipo Chip Ganassi Racing
Un legado rodante: los autos de Ganassi se suman al acervo
Una de las grandes adquisiciones recientes del museo es una colección de 14 automóviles del equipo Chip Ganassi Racing, incluidos cinco ganadores del Indy 500. Estos autos fueron adquiridos tras vender vehículos ajenos a la historia del Indy, incluyendo un Mercedes W 196 R muy raro, dejando además dinero para fortalecer el fondo patrimonial del museo.
“Durante años nuestros autos ganadores estaban en nuestra sede y casi nadie los veía”, comentó Chip Ganassi. “Me di cuenta de que merecían estar junto a otros grandes ganadores del Indy. Ahora más de mil personas al día pueden verlos”.
Un museo que evoluciona con su comunidad
La visión detrás de esta renovación va más allá de lo estético o lo histórico. Joe Hale, presidente del museo, lideró el esfuerzo de recaudación y de transformación con un objetivo claro: “Queríamos que el museo fuera más que una galería de piezas antiguas. Buscamos un espacio que motive a regresar una y otra vez”.
Ese objetivo se ha cumplido. Entre los planes del museo está la construcción de un taller de preservación cerca del circuito, que permita mostrar los trabajos de restauración de los más de 200 autos en el catálogo, muchos aún en funcionamiento, además de una colección de más de 55,000 artefactos del mundo del automovilismo.
Un impulso para la economía y la cultura local
El IMS Museum no solo es un símbolo del automovilismo: también es motor económico para Indianápolis. Durante eventos como el Indy 500, se espera que miles de personas atraviesen sus puertas. Su reapertura refuerza el ecosistema turístico y educativo de la ciudad, convirtiéndose en un punto de encuentro tanto para fanáticos como para instituciones educativas.
Además, el espacio servirá como punto de encuentro para visitas escolares, campamentos de verano y eventos interactivos, haciendo que el legado del automovilismo inspire a las nuevas generaciones de ingenieros, mecánicos y pilotos.
Una visita ineludible para los fans de las carreras
A poco de celebrarse otra edición de las 500 Millas de Indianápolis, el nuevo museo se presenta como el complemento ideal para el mayor espectáculo del automovilismo en Estados Unidos. Si alguna vez soñaste con estar en la línea de partida, sentir el rugido de los motores y conocer cómo se gesta una leyenda del deporte motor, este lugar ahora lo hace posible.
Tal como lo expresó Ganassi: “Es un lugar especial. Le va a sumar mucho al circuito, a la carrera y a toda la comunidad. Vale la pena verlo”.