Líbano y Gaza en llamas: una mirada crítica al conflicto olvidado del Medio Oriente

Mientras el mundo observa conflictos globales, el Líbano y Gaza viven un infierno silencioso con miles de muertos, destrucción masiva y una creciente desesperanza humanitaria

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¿Quién responde por el Líbano?

En medio del caos regional que azota al Medio Oriente, el Líbano ha vuelto a ocupar un lugar trágico en los titulares por los bombardeos israelíes sobre la periferia sur de Beirut, uno de los bastiones de Hezbollah. Estos ataques, según el ejército israelí, tenían como objetivo instalaciones subterráneas de fabricación de drones del grupo chií. Sin embargo, para el resto del mundo, representan otra peligrosa escalada en un conflicto que nunca se terminó de apagar.

La declaración del ejército libanés de que estos bombardeos podrían llevar a suspender su cooperación con el comité de monitoreo del alto el fuego firmado en noviembre de 2024, evidencia el deterioro institucional en el país. Dicho comité incluye a figuras clave: representantes de Líbano, Israel, Francia, Estados Unidos y efectivos de la fuerza de paz de la ONU conocida como UNIFIL.

Una tregua malherida desde el principio

El actual conflicto entre Israel y Hezbollah tiene sus orígenes en octubre de 2023, cuando el grupo libanés decidió apoyar a su aliado palestino Hamas lanzando cohetes hacia territorio israelí. El gobierno de Tel Aviv respondió con dureza, y lo que comenzó como baja intensidad terminó escalando a una guerra abierta en septiembre de 2024, que dejó más de 4,000 muertos en el Líbano, la mayoría civiles.

Desde entonces, las agresiones por parte de Israel no han cesado. A pesar del acuerdo de alto al fuego, las ofensivas aéreas sobre Beirut y el sur del país son casi diarias, dejando poco espacio para respirar.

¿Es Hezbollah el único objetivo?

Muchos cuestionan si estas operaciones tienen como único fin neutralizar la amenaza de Hezbollah o si también funcionan como una especie de disuasión permanente hacia otros actores regionales. Lo que sí está claro es que estas constantes intervenciones han provocado que cerca de 190 personas hayan sido asesinadas y al menos 485 resultaran heridas desde la firma del alto al fuego, según cifras del gobierno libanés de abril de 2025.

Hezbollah, por su parte, ha reducido casi por completo su presencia militar al sur del río Litani, tal como lo exigía la tregua. Sin embargo, se niega a desarmarse mientras Israel mantenga su ocupación de cinco puntos estratégicos en la frontera.

Gaza: el infierno visible

La situación en Gaza es, si cabe, aún más trágica. Durante las celebraciones de Eid al-Adha, miles de palestinos se vieron obligados a realizar sus oraciones entre los escombros, sin comida, ni refugios, ni mezquitas. Este año marca el segundo Eid consecutivo en el que los habitantes de Gaza no pudieron viajar a Arabia Saudita para completar el hajj.

"Este es el peor Eid que ha vivido el pueblo palestino por la guerra injusta que se nos impuso", declaró Kamel Emran, desde Khan Younis. Y es difícil no estar de acuerdo con él. Desde octubre de 2023, cuando Hamas atacó Israel y mató a unas 1,200 personas (principalmente civiles), el Estado israelí ha lanzado una ofensiva devastadora sobre Gaza.

Según el Ministerio de Salud de Gaza, han muerto más de 54,000 palestinos, la mayoría mujeres y niños. Gran parte del territorio está ahora reducido a escombros, con más del 90% de la población desplazada.

¿Hacia una hambruna total?

Las condiciones de vida en Gaza están cercanas al colapso total. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) advirtió que cerca de 500,000 personas caerán en inseguridad alimentaria aguda para septiembre de 2025. Rein Paulson, director de la Oficina de Emergencias de la FAO, fue tajante: “El riesgo de hambruna golpea a todo el territorio”.

Aunque Israel ha permitido recientemente el ingreso de algo de ayuda humanitaria, las restricciones militares y la inseguridad han hecho casi imposible su distribución. En los nuevos centros de entrega de ayuda, se registran tiroteos casi diarios. Hospitales locales aseguran que más de 80 personas han muerto recientemente en estos incidentes.

La paradoja del control

Mientras Israel acusa a Hamas de robar ayuda y bloquear su distribución, múltiples organizaciones humanitarias afirman que las medidas israelíes impiden cualquier forma efectiva de socorro. La Fundación Humanitaria de Gaza, una organización compuesta mayormente por contratistas estadounidenses elegidos por Israel, cerró sus centros el pasado viernes por la violencia, emitiendo un mensaje pidiendo a los ciudadanos evitar los puntos de ayuda por su seguridad.

¿Dónde está la comunidad internacional?

A más de un año del inicio del conflicto, la comunidad internacional permanece dividida. Estados Unidos ha vetado resoluciones clave en el Consejo de Seguridad de la ONU que buscaban un alto al fuego inmediato. En otras palabras, parece no haber un final claro en el horizonte.

Sin embargo, cada día que pasa deja más víctimas, tanto humanas como materiales. En Gaza, incluso la esperanza ha sido bombardeada.

¿Qué futuro tiene Medio Oriente?

Si algo ha quedado claro desde octubre de 2023 es que el polvorín del Medio Oriente sigue tan volátil como siempre. La situación del Líbano deja entrever las fracturas internas y la imposibilidad de detener el fuego mientras se mantenga la doctrina de la represalia preventiva.

En Gaza, la guerra se ha convertido no solo en una ofensiva militar, sino en una metáfora de la deshumanización total. Si el objetivo era eliminar a Hamas, la operación israelí ha arrasado con mucho más que combatientes: ha destruido hogares, hospitales, mezquitas y, sobre todo, vidas.

La pregunta fundamental sigue siendo: ¿Cuánto más puede resistir una población privada de casi todo? Y más importante aún: ¿cuánto más puede la comunidad internacional seguir mirando hacia otro lado?

“No hay comida, no hay mezquitas, no hay casas. ¿Hasta cuándo?” repite un padre palestino en medio de los restos de lo que una vez fue su hogar. La respuesta, por ahora, sigue perdida en el humo de los bombardeos.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press