Cristiano Ronaldo y su legado eterno: lágrimas, récords y pasión por Portugal

A sus 40 años, el astro portugués sigue marcando historia con la selección nacional mientras se despide, quizás, de sus últimos grandes escenarios

Un nuevo título, una vieja leyenda

Cristiano Ronaldo añadió otro trofeo a su imponente colección: la Liga de Naciones 2025. Portugal se coronó campeón tras vencer a España en una final vibrante que terminó empatada 2-2, decidiéndose en la tanda de penaltis. Ronaldo, visiblemente emocionado, no pudo contener las lágrimas: “Tengo muchos títulos con mis clubes, pero nada es mejor que ganar con Portugal. Estas son lágrimas. Misión cumplida y mucha alegría”, declaró tras el encuentro.

Aunque lleva dos décadas en la élite del fútbol mundial, Ronaldo sigue siendo el motor emocional y estratégico de su selección. Su gol número 138 con la camiseta portuguesa, un récord absoluto en selecciones nacionales masculinas, fue determinante para mandar el partido a penales. Ese tanto llegó en su aparición número 221 con Portugal, otro récord que difícilmente será superado pronto.

Una semifinal histórica ante Alemania

Antes de la final, el camino de Portugal hacia el título pasó por un encuentro trascendental frente a Alemania. Fue la primera victoria portuguesa sobre los germanos en 25 años, con Ronaldo como protagonista al anotar el gol del triunfo con marcador de 2-1. Tres días después, la historia se volvió a alinear en favor de Cristiano y los suyos, demostrando que el veterano delantero sigue siendo sinónimo de momentos decisivos.

Una pasión que duele

Durante el calentamiento previo a la final, Ronaldo ya sentía molestias físicas. “Lo sentí durante el calentamiento y lo venía arrastrando, pero si era necesario romperme una pierna por la selección, lo habría hecho. Era por un trofeo, tenía que jugar y lo di todo”, confesó. Esta declaración resume la actitud del capitán portugués: una entrega incondicional al equipo nacional, al margen de estadísticas y contratos.

El retiro que se asoma

La emoción desbordada no solo fue por el título, sino también por la incertidumbre del futuro. Con su contrato actual con Al-Nassr terminando en junio, y su negativa a jugar el Mundial de Clubes pese a múltiples ofertas, crece la especulación sobre si este fue el último gran torneo de Cristiano Ronaldo a nivel de selecciones.

Durante su carrera, CR7 ha dejado su huella por clubes de élite: Sporting de Lisboa, Manchester United, Real Madrid, Juventus… El palmarés lo abalan: múltiples Champions League, Balones de Oro, títulos de liga en tres países distintos. Pero Ronaldo siempre ha sostenido que jugar para Portugal es especial. “He vivido en muchos países, he jugado para muchos clubes, pero cuando se trata de Portugal es un sentimiento único”, aseguró.

El último baile… ¿con trofeo?

El partido final contra España fue una montaña rusa emocional. El español Martin Zubimendi abrió el marcador y luego Mikel Oyarzabal amplió a 2-1 antes del descanso. Pero Nuno Mendes empató 1-1 momentáneamente, y luego Ronaldo, con olfato goleador intacto, empató 2-2 tras un centro desviado del propio Mendes.

A los 88 minutos, Ronaldo abandonó el campo entre una ovación monumental y un abrazo afectuoso de Roberto Martínez, su seleccionador. La imagen parecía una despedida. ¿Será este el cierre de una era dorada para la selección lusa?

221 partidos, 138 goles: una máquina inimitable

El legado estadístico de Cristiano impresiona: máximo goleador de la historia del fútbol internacional masculino, por delante de nombres como Ali Daei (109) o Messi, y seguramente fuera del alcance de futuras generaciones.

Más allá de cifras, el impacto de Ronaldo en Portugal es comparable al de Pelé con Brasil o Maradona con Argentina. Desde que debutó en 2003, cambió la narrativa de un país futbolero pero sin títulos. En 2016, lideró al equipo a su primer gran campeonato con la Eurocopa, y ahora, nueve años después, levanta la Liga de Naciones con 40 años encima.

El futuro de Portugal después de Cristiano

Portugal cuenta con una generación emergente con grandes promesas: João Félix, Rafael Leão, Nuno Mendes, entre otros. Pero llenar los zapatos de Ronaldo será prácticamente imposible. No solo se trata de goles, sino de liderazgo, carisma y mentalidad.

“Cristiano es irrepetible. Veremos muchos buenos jugadores después de él, pero nadie será como él. Es nuestro rey, nuestro motivador, nuestro símbolo”, afirmó Manuel Fernandes, exseleccionado luso.

Ronaldo y la eterna competencia con Messi

Aunque ambos han descartado la rivalidad personal, Messi y Ronaldo han definido más de una década de fútbol. El argentino ganó el Mundial, Ronaldo ha sido campeón continental con Portugal. Messi sigue activo con Inter Miami, mientras que el futuro de CR7 está en el aire.

Con este título de la Liga de Naciones, Ronaldo alcanza los 35 títulos oficiales, incluyendo selecciones y clubes. Es uno de los jugadores con más trofeos en la historia del fútbol.

¿Y ahora qué?

Todo parece indicar que Cristiano podría anunciar su retiro internacional pronto. Quizás no de inmediato, pero 2025 podría ser su última temporada con la selección. Sin embargo, tratándose de un competidor forjado en acero como él, nada puede darse por sentado.

Ese abrazo de despedida, esas lágrimas, ese último gol: la última danza de Cristiano Ronaldo con Portugal ha sido poética, simbólica y dolorosamente hermosa. Como él mismo dijo: “Para la selección, si tenía que romperme una pierna, lo haría”.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press