Wally Lamb regresa con “The River Is Waiting”: culpa, redención y humanidad detrás de las rejas

El autor de ‘She’s Come Undone’ ofrece un intenso retrato de la tragedia personal y la vida en prisión en su primera novela en casi una década

Wally Lamb regresa con fuerza al panorama literario con su esperada novela “The River Is Waiting”, publicada tras nueve años de silencio. Este nuevo trabajo, seleccionado recientemente para el club de lectura de Oprah Winfrey por tercera vez en la carrera del autor, se sumerge en la oscuridad de la psique humana, la culpa y la posibilidad —aunque tenue— de redención. Con un estilo introspectivo y una prosa que no rehúye el dolor humano, Lamb insiste en recordarnos que los protagonistas reales rara vez son héroes: simplemente, son humanos.

El descenso de Corby Ledbetter: adicción, mentira y tragedia

La historia gira en torno a Corby Ledbetter, un hombre común que ha perdido su trabajo como artista comercial. En lugar de buscar una salida, Corby se sumerge en una peligrosa adicción a alcohol y medicamentos recetados para la ansiedad. Su comportamiento errático y su negación lo conducen a una tragedia impensable: en un desgarrador accidente, atropella y mata por accidente a su hijo pequeño, Niko, en el camino de entrada de su casa.

Este momento marca el clímax de una serie de decisiones autodestructivas que lo llevan a enfrentar una condena de tres años de prisión por homicidio involuntario. A partir de aquí, la historia transcurre casi en su totalidad tras las rejas. Lamb utiliza este escenario para explorar la condición humana como solo él sabe hacerlo: con dolorosa honestidad y sin concesiones.

Un entorno carcelario como reflejo de la condición humana

La prisión en la que Corby cumple su condena está retratada de forma totalizante. Lejos de los clichés, Lamb logra construir un mundo donde la brutalidad y la humanidad coexisten. El autor no es ajeno a este entorno: durante más de dos décadas impartió talleres de escritura a mujeres encarceladas. Esa experiencia vibra en cada página. Lamb describe con dureza la violencia institucional, pero también destellos de belleza y vinculación humana.

Entre los personajes secundarios destaca la bibliotecaria de la prisión, una mujer que ve el potencial latente en los reclusos. Ella comparte libros, galletas caseras y finalmente convence a Corby de pintar un mural en la pared de la biblioteca. Su figura sirve como símbolo de esperanza dentro del encierro. Otro personaje clave es su compañero de celda, un hombre amable que lo protege, así como un joven y vulnerable recluso por quien Corby intenta hacer lo correcto.

Una exploración sin redención artificial

A diferencia de otras novelas de redención carcelaria, Lamb no ofrece grandes epifanías ni transformaciones milagrosas. Corby, aunque devastado por la pérdida de su hijo y acosado por las culpas pasadas, sigue siendo —hasta el final— un hombre egoísta, atormentado, ambivalente. No hay redención fácil ni finales hollywoodenses. Eso es precisamente lo que hace que la novela resuene con tanta profundidad.

El retrato psicológico de Corby recuerda los mejores momentos de “She’s Come Undone” (1992) y “I Know This Much Is True” (1998). En ambas obras, Lamb se muestra como un maestro en narrar desde el punto de vista del quebranto emocional y la lucha personal. En The River Is Waiting, vuelve con la misma intensidad a esos territorios de fragilidad humana y dolor atravesado con amor torpe.

Oprah vuelve a apostar por Lamb

La elección de The River Is Waiting como parte del Oprah’s Book Club no es casual. En años anteriores, la presentadora ya había seleccionado otras dos obras del escritor: “She’s Come Undone” y “I Know This Much Is True”, consolidando a Lamb como una voz prominente en la literatura estadounidense contemporánea. Al igual que en aquellas elecciones, Oprah apuesta por un relato emocionalmente devastador, introspectivo y profundamente humano.

La masculinidad fallida y frágil como eje temático

Un aspecto a destacar es cómo Lamb trabaja la masculinidad fallida y frágil en el personaje de Corby. Las acciones del protagonista no están motivadas por maldad, sino por una inseguridad crónica, una incapacidad para enfrentar la realidad y la presión de desempeñar un rol que no puede ni quiere sostener. En un contexto donde se habla cada vez más sobre nuevas masculinidades, The River Is Waiting ofrece otro ángulo: el de un hombre desmoronado que trata —mal y tarde— de entender qué lo llevó al abismo.

Contra el arquetipo del héroe: lo trágico de lo cotidiano

Quizás lo más potente de The River Is Waiting sea su capacidad de contar una historia extraordinaria a partir de lo cotidiano. No hay mafias, guerras ni psicópatas. Hay una familia, un hombre buscando trabajo, niños pequeños, adicciones no tratadas y decisiones torpes. Y sin embargo, la tragedia ocurre. Lamb nos recuerda que las peores decisiones pueden habitar en los escenarios más comunes, y que la ficción, cuando es honesta, se parece mucho a la vida.

Datos curiosos y contexto histórico del autor

  • Lamb debutó como novelista en 1992 con “She’s Come Undone”.
  • Fue profesor en la Universidad de Connecticut y coordinó programas de escritura en cárceles estatales.
  • “I Know This Much Is True” fue adaptada como miniserie por HBO en 2020 con Mark Ruffalo como protagonista.
  • En total, Lamb ha sido seleccionado tres veces por el club de lectura más influyente de los Estados Unidos: el de Oprah Winfrey.
  • The River Is Waiting es su séptima novela.

¿Una obra imprescindible del año?

En una época acostumbrada a personajes que se redimen con rapidez y un sinfín de tramas donde la moral se resuelve con discursos inspiradores, The River Is Waiting es una obra que exige más del lector. Lamb no busca consuelo ni justicia. Ofrece lo que muchos temen ofrecer: una mirada dura pero honesta sobre el comportamiento humano. Y eso hace que esta novela no solo sea relevante, sino profundamente necesaria.

Si alguna vez has sentido culpa, vergüenza o dolor por fallarle a alguien a quien amas —aunque sea de una manera infinitamente más leve— entonces esta novela te pondrá frente a ti mismo. Con compasión, sí, pero sin filtros.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press