¿Es suficiente dar solo el 70%? El eterno debate sobre el 'hustle' en el béisbol moderno

Entre lesiones, millones de dólares y códigos no escritos, el esfuerzo en el diamante ya no se mide únicamente por correr a toda velocidad

Una vieja regla con una nueva mirada

Desde las divisiones infantiles hasta las grandes ligas, uno de los mandamientos sagrados del béisbol ha sido: "hay que dar el 100% siempre". Pero en 2024, con la evolución del deporte y la valorización extrema de los jugadores, esa regla empieza a tambalear. ¿Es tiempo de reconsiderar lo que entendemos por "hustle"?

Jazz Chisholm y su filosofía arriesgada: el 70%

Jazz Chisholm Jr., pelotero de los Marlins, ha llamado la atención al declarar que da solamente el 70% de su esfuerzo en defensa, ofensiva y corrido de bases. Su argumento es simple pero provocador: "De ese modo, no me lesiono, hago el contacto que necesito y juego mejor en general".

El enfoque de Chisholm desafía décadas de tradición. En un deporte plagado de frases como "si no te estás deslizando de cabeza no lo estás intentando lo suficientemente fuerte", sugerir limitar la intensidad suena casi sacrílego. Sin embargo, la frágil realidad física de los atletas de hoy parece darle algo de razón.

Lesiones y contratos millonarios: el gran dilema

El béisbol moderno no solo es más veloz y atléticamente exigente, también es más valioso. El salario promedio en la MLB superó los $5 millones por primera vez en 2024. ¿Vale la pena que una estrella corra a toda velocidad hacia segunda por un doble marginal y se desgarre un oblicuo de paso?

No son pocos los ejemplos recientes. Juan Soto, figura de 765 millones de dólares con los Mets, fue criticado por no correr con intensidad tras golpear un batazo que pegó en el Green Monster. A simple vista, parecía flojera. Pero ¿qué pasa si esa "flojera" evitó una distensión?

La vieja guardia no lo acepta

Ron Washington, mánager de los Angels y exjugador de ligas mayores en los 70 y 80, no quiere saber nada con el "70%". “Tienes que dar la imagen de estar al 100% siempre”, dice. “El único que sabrá si vas al 70% eres tú… pero no expliques eso, porque cuando te vean flojo dirán ‘ah, claro, es que es su 70%.’”

Washington representa una generación en la que no correr cada jugada era motivo de sanción inmediata, sin importar quién estuviera en juego. Lo mismo opina Vinny Castilla, leyenda de los Rockies. Solía recibir consejos de veteranos que le exigían compromiso total sin excusas: "Hay que hacerlo todos los días", recuerda Castilla.

Juan Soto, Ronald Acuña Jr. y otras polémicas del "hustle"

El debate sobre el esfuerzo no es nuevo, pero se ha intensificado en temporadas recientes gracias a casos mediáticos:

  • Ronald Acuña Jr. fue retirado de un juego en 2019 por no correr una línea al jardín derecho —que terminó siendo un largo sencillo.
  • Jarred Kelenic recibió críticas por no correr un batazo, y su mánager no lo sancionó, lo cual irritó a algunos compañeros.
  • Juan Soto fue criticado por admirar un batazo creyendo que sería cuadrangular. Esa pausa breve le costó un doble seguro.

El consenso parece ser que si el pelotero está completamente sano, el gastar cada gota de esfuerzo vale la pena. Pero, como dice el mánager de los Dbacks Torey Lovullo: “Dame el 100% de lo que TENGAS ese día. Si estás a media máquina por una molestia, eso es lo que espero. Pero sé honesto.”

¿Hustle es solo correr?

Muchos expertos coinciden en que el concepto de hustle ha cambiado. Ya no se trata solo de lanzar el cuerpo al suelo en una barrida o correr a pesar del dolor. Hustle también es estar concentrado, mentalmente presente en cada jugada, como lo define Pat Murphy, mánager de los Brewers: "A veces el verdadero hustle ni siquiera puede verse. Está en la preparación mental, en estar enfocado pitcheo a pitcheo".

Incluso Cody Bellinger, conocido por su pasividad en el campo en sus primeros años, aprendió temprano que la actitud era clave. Su padre lo reprendía con una mirada conocida como el “Clay Stare” cuando no se esforzaba al máximo. “Hustle es lo único que puedes controlar completamente en este juego”, dice Bellinger.

El poder de la cultura y los códigos no escritos

En generaciones anteriores, la disciplina por falta de esfuerzo venía directamente del vestuario. Cuando un jugador se relajaba, sus propios compañeros lo corregían. Hoy, el miedo a frustrar a una joven estrella que gana más que el resto del club combinado impide ese tipo de controles.

Como decía Washington: “Ahora no quieren herir sentimientos. En mis días, Gene Mauch me decía las cosas en la cara. Si no dabas resultado, te lo hacían saber”.

La evolución de las celebraciones y su impacto

Parte del cambio de mentalidad también se relaciona con las nuevas expresiones en el deporte. Antes, mirar un batazo demasiado tiempo era considerado una provocación; hoy, el "bat flip" y la admiración de jonrones son parte del espectáculo y hasta se alientan en redes sociales.

Eso ha llevado a algunas jugadas donde los jugadores no corren de inmediato tras conectar la pelota. Sin embargo, este comportamiento a veces termina perjudicando a su equipo si la pelota no termina saliendo del estadio.

El riesgo real de ir a fondo todo el tiempo

No es solo cuestión de orgullo o dureza mental. Los estudios muestran que más del 15% de las lesiones musculares en peloteros ocurren en jugadas de sprint. Hamstrings, oblicuos y pantorrillas son las principales víctimas.

En un deporte de 162 juegos, muchos argumentan que dar todo en cada jugada no vale la pena. Un bateador estrella a menudo prefiere preservar su salud que desgastarse para convertir un sencillo en doble marginal. Como dirían los analistas de sabermetría: a veces, el riesgo no justifica la recompensa.

Un problema sin fórmula mágica

Tanto aficionados como periodistas siguen divididos. Para algunos, un pelotero que no corre a máxima velocidad pierde respeto. Para otros, están haciendo lo correcto al priorizar su durabilidad en una industria que paga fortunas por su talento.

En muchos casos, lo visual termina siendo más importante que el fondo. Un jugador que hace "eyewash" —es decir, muestra esfuerzo excesivo sin producir resultados— puede ser más apreciado que otro más efectivo pero menos vistoso.

Entonces... ¿Es válido el 70%?

Como todo en el béisbol (y la vida), la respuesta no es blanca o negra. Chisholm no está completamente equivocado, pero tampoco es el modelo ideal. Tal vez la clave, como sugiere Lovullo, no es dar siempre el 100%, sino dar el 100% de lo que uno puede ofrecer ese día.

Eso sí, si vas al 70%, más te vale que tus números lo respalden. Porque aunque ya no estés bajo la mirada de Pete Rose o Vinny Castilla, tus decisiones siguen siendo analizadas cada día por tus compañeros, entrenadores… y toda una legión de fanáticos mirando desde casa.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press