Nezza, ‘El Pendón Estrellado’ y el nuevo poder Latino en el béisbol de EE.UU.

La emotiva interpretación del himno en español por parte de Nezza en el Dodger Stadium desata una ola de apoyo, críticas y reflexiones sobre la identidad latina, el activismo y el deporte

El béisbol en Estados Unidos nunca ha sido solo un deporte. En las gradas, los estadios y las transmisiones en vivo se entrelazan relatos de comunidades, nacionalidades y luchas sociales. La noche del 14 de junio de 2025, en el Dodger Stadium de Los Ángeles, se vivió uno de esos momentos que marcan época: la cantante Nezza se plantó en el campo y, contra instrucciones previas, interpretó en español el himno nacional de Estados Unidos, “The Star-Spangled Banner”, ante un estadio repleto mayoritariamente por familias latinas.

Una voz, un himno y un mensaje político

Nezza, artista de pop latino y R&B nacida en EE.UU. pero con fuertes raíces latinas, decidió cantar “El Pendón Estrellado”, la traducción oficial del himno que fue realizada en 1945 por la compositora peruano-estadounidense Clotilde Arias a petición del entonces presidente Franklin D. Roosevelt. La versión en español rara vez se canta en ceremonias oficiales, pero Nezza cambió la narrativa con su decisión audaz y emocional.

La artista explicó que pensaba cantar el himno en inglés, como se le había indicado, pero al salir al campo y ver las gradas llenas de familias latinas vestidas de azul Dodgers, sintió que era su «momento para representar». Y vaya que lo fue. El video, viral en TikTok, muestra cómo un representante del equipo le pide que lo haga en inglés. Nezza, serena pero decidida, lo ignora. Y canta.

Reacciones encontradas: de la ovación al intento de censura

Las redes sociales estallaron. Celebrities como Becky G, Jason Mraz, Kehlani, Ava DuVernay y Chiquis le mostraron su apoyo. Becky G lo dijo sin rodeos en su historia de Instagram: “No se atrevan a darnos la espalda. Nosotros llenamos su estadio”.

Pese a rumores de que sería vetada tras su performance, los Dodgers emitieron un comunicado en el que aseguraron que Nezza “no fue invitada a irse” y que estarían encantados de tenerla de nuevo. No obstante, la propia cantante ha expresado sus dudas: “No creo regresar. Pero me siento empoderada de haber usado mi voz. No me arrepiento”.

El trasfondo: redadas migratorias y una ciudad herida

La interpretación de Nezza llega en un contexto complejo. Los Ángeles ha sido epicentro de recientes redadas migratorias realizadas por agentes del ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE.UU.). Barrios cercanos al Dodger Stadium fueron escenario de arrestos masivos que han generado protestas, vigilancia policial intensiva y miedo generalizado en la comunidad latina.

El silencio del equipo ha molestado a muchos. Mientras que figuras como el pelotero Kiké Hernández alzaron su voz en favor de los inmigrantes mediante un post en Instagram bilingüe, el mánager Dave Roberts dijo “no saber lo suficiente sobre el tema para opinar”. Una excusa que ha sido criticada ampliamente.

“No puedo soportar ver a nuestra comunidad violada, perfilada, abusada y destrozada. TODAS las personas merecen respeto, dignidad y derechos humanos”,

– Kiké Hernández, en Instagram

Dodgers y la comunidad latina: una historia de amor... y desamor

No se puede hablar de los Dodgers sin mencionar su profundo lazo con la comunidad latina de Los Ángeles. Desde las “Noche de la Herencia Mexicana” hasta la venta de productos con la marca “Los Dodgers”, el equipo parece abrazar la latinidad cada temporada. Además, ha promocionado estrellas como Fernando Valenzuela, ídolo mexicano que revolucionó el béisbol en la década de 1980. El legado de inclusión y diversidad también incluye a Jackie Robinson y Chan Ho Park.

Sin embargo, hay heridas sin cerrar. La construcción del Dodger Stadium en la década de 1950 implicó el desalojo forzoso de cientos de familias mexicanas en la zona conocida hoy como Chávez Ravine. Décadas después, esa historia aún resuena como un eco de traición en la memoria colectiva.

Silencios selectivos: ¿equidad o conveniencia política?

Los Dodgers han mostrado posturas políticas en ocasiones específicas, como cuando condenaron el ataque de Hamas a Israel en 2023. Pero cuando se trata de temáticas que afectan directamente a su base local —como la inmigración— el equipo parece retroceder.

Durante la Noche del Orgullo del 13 de junio, espectadoras como Emeli Avalos fueron abordadas por el personal del estadio por llevar camisetas con mensajes políticos. Aunque no fue expulsada, se le pidió cubrir la parte trasera de su camiseta, que contenía una sigla ofensiva hacia Donald Trump. Avalos, indignada, afirma que no volverá al estadio.

Incluso circularon videos donde la seguridad exigía a aficionados bajarle un cartel con la palabra “ICE” tachada. Preguntados al respecto, los Dodgers remitieron a su política de estadio: no se permiten pancartas, ni ropa alusiva a causas políticas.

Nezza y el resurgir de una nueva ola activista latina

Más allá de la música, el gesto de Nezza se instala en un creciente llamado a la acción dentro de la comunidad latina. “Hay poder en nuestra comunidad”, afirmó la cantante. “Debemos usar nuestra voz porque si no lo hacemos nosotros, nadie más lo hará”.

Colectivos locales han lanzado llamados a un boicot parcial del equipo, exigiendo que se pronuncien sobre las redadas y políticas migratorias inhumanas. Influencers como Letty Peniche lo ponen claro: “Queremos saber si nos aman tanto como nosotros a ustedes. O solo les importamos como dólares”.

Para muchos latinos en Los Ángeles, los Dodgers representan pertenencia, arraigo, orgullo. Pero estas semanas han puesto en evidencia que esa relación merece más reciprocidad y menos marketing.

¿Qué sigue para los Dodgers y la comunidad?

Estamos en una encrucijada histórica. El gesto de Nezza abrió una nueva etapa en la conversación sobre identidad cultural, diversidad verdadera y justicia social en el mundo del deporte. No se trata simplemente de cantar en español, sino de lo que eso representa: una declaración de existencia, de dignidad y de pertenencia.

El béisbol, como todo en la cultura, es político. Y en esta temporada, en este estadio, la pelota está en la cancha de los Dodgers.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press