Dallas Mavericks revoluciona la NBA: Kyrie, Davis y Flagg, la nueva era comienza

El inesperado giro de los Mavericks: adiós Doncic, hola Cooper Flagg

Pocas veces en la historia reciente de la NBA se ha visto un giro tan radical en una franquicia como el que acaban de ejecutar los Dallas Mavericks. En un lapso de meses, la organización se desprendió de su mayor estrella, Luka Doncic, en un blockbuster trade que lo envió a los Los Angeles Lakers. A cambio, recibieron al veterano y campeón Anthony Davis, abriendo un nuevo capítulo en la historia de la franquicia texana.

Como si eso no fuera suficiente, mediante un golpe de suerte estadísticamente improbable (apenas un 1.8% de probabilidad), Dallas ganó la lotería del Draft de la NBA y se posicionó con la primera selección global. Todo apunta a que elegirán al fenómeno de la Universidad de Duke, Cooper Flagg, quien se perfila como el nuevo rostro de la franquicia.

Irving se queda: nuevo contrato, nuevas expectativas

En la víspera del Draft, otro movimiento sacudió el panorama: los Mavericks acordaron con Kyrie Irving una extensión de tres años por $119 millones de dólares, según fuentes cercanas al equipo. Pese a que el base se encuentra recuperándose de una ruptura de ligamento cruzado anterior —situación que lo mantendrá fuera hasta entrado el 2025-26—, la organización ha mostrado fe ciega en sus capacidades.

Este contrato reemplaza el último año de su acuerdo anterior y alinea su duración con el contrato de Davis, cuya opción de jugador también termina en la temporada 2027-28. Esta sincronización sugiere una apuesta seria por consolidar un núcleo estable que aspire al anillo en las próximas tres campañas.

Un trío con potencial histórico: Davis, Kyrie y Flagg

Cuando Kyrie regrese y se integren los tres elementos clave —Irving, Davis y Flagg—, los Mavericks contarán con una mezcla explosiva de experiencia, talento y juventud. Anthony Davis aporta su capacidad defensiva y su presencia en la pintura, Kyrie el manejo del balón y la creatividad ofensiva, y Cooper Flagg llegará con el estatus de prodigio colegial.

No debemos olvidar que Dallas cuenta también con Dereck Lively II, quien tras su año de novato mostró progresos tangibles como protector del aro. Con base en esta configuración, el quinteto titular para 2025 podría lucir así:

• Kyrie Irving (base)
• Cooper Flagg (escolta/alero)
• Davis Bertans o nuevo fichaje (aleros complementarios)
• Anthony Davis (ala-pívot)
• Dereck Lively II (pívot)

La NBA reconfigurada: impacto en otras franquicias

Pero Dallas no fue el único en mover piezas importantes. Los Boston Celtics, reciente campeón de 2024, comenzaron su reconstrucción de forma sorpresiva. En una serie de movimientos clave, enviaron a Kristaps Porzingis a los Atlanta Hawks en un intercambio a tres bandas.

Boston recibió a Georges Niang y una selección de segunda ronda, y a pesar de salir del “segundo nivel” del impuesto de lujo, seguirán sobre el llamado "first apron". Este ajuste busca darles mayor capacidad de maniobra en los próximos años, especialmente tras la lesión de Jayson Tatum, quien se perderá gran parte de la próxima campaña por una rotura del tendón de Aquiles.

Movimiento de picks y apuestas de futuro

En paralelo, Brooklyn Nets se convirtieron en uno de los grandes protagonistas del Draft tras hacerse con una quinta selección en la primera ronda. Ahora poseen los picks 8, 19, 22, 26 y 27, demostrando que están reconstruyendo con urgencia aunque de forma meticulosa.

Por su parte, el Draft 2025 promete ser uno de los más vistos del último lustro. No solo por el debut de Flagg, quien ha generado un ruido comparable al de Zion Williamson en su momento, sino también porque marca el inicio de varios proyectos deportivos, incluyendo el nuevo núcleo de Oklahoma City Thunder, que sigue acumulando más talento vía Draft.

¿Y los Lakers? La gran incógnita

La llegada de Doncic al equipo angelino marca una nueva etapa, pero abre dudas estratégicas. ¿Cómo encajará el base esloveno junto a LeBron James, D’Angelo Russell y Austin Reaves? Además, ¿será posible mantener un equilibrio defensivo con tantas armas ofensivas?

Lo cierto es que este cambio magnifica al máximo el ya inmenso foco de atención en los Lakers, ahora con uno de los tres mejores jugadores del mundo en sus filas.

Dallas apuesta todo: ¿genialidad o locura?

La pregunta que se hacen muchos es si los Mavericks no han sido demasiado arriesgados. Ceder a Doncic, una superestrella en plenitud, por un veterano con historial de lesiones (Davis), mantener a un Kyrie Irving también propenso a perderse partidos, y confiar en un novato como Flagg es, como mínimo, controversial.

No obstante, también puede interpretarse como una jugada audaz de reposicionamiento total. Lejos de buscar competir desde lo establecido, Dallas parece querer redefinir su identidad desde las trincheras mismas del Draft y el renacimiento de talentos.

Algunos precedentes históricos

Este tipo de decisiones high-risk, high-reward no son nuevas. Recordemos los Oklahoma City Thunder de 2012, quienes en su momento armaron un tridente joven compuesto por Durant, Westbrook y Harden. Aunque no lograron el título, marcaron una era. Más recientemente, los Warriors apostaron por jóvenes como Jordan Poole, Kuminga y Moody mientras mantenían su núcleo veterano.

Los Mavericks, sin embargo, están ejecutando esta transformación tras haber llegado a unas Finales, algo que hace que el riesgo parezca mayor —o tal vez más calculado.

El veredicto: una de las apuestas más valientes del siglo XXI

Es imposible saber si esta nueva iteración de los Mavs dará resultado, pero lo que sí es claro es que han revitalizado el interés por la franquicia. La NBA, liga adicta a las narrativas cambiantes, tiene ahora un nuevo núcleo que promete titulares constantes.

Cuando Cooper Flagg debute, cuando Kyrie regrese de su lesión y cuando Davis esté al 100%, Dallas podría tener un nuevo Big Three moderno. Y, como toda gran historia en la NBA, solo el tiempo dirá si es una obra de genialidad o una jugada demasiado temeraria.

Prepárense, la era post-Doncic en Dallas ya comenzó.