AJ Dybantsa y la nueva camada de promesas NBA para 2026: ¿Quién dominará el próximo Draft?

Una mirada detallada al próximo grupo de estrellas universitarias, internacionales e incluso procedentes de la NBL australiana que luchan por ser el próximo número uno del Draft de la NBA

El Draft de la NBA 2026 comienza a generar expectativas con una lista de talentos jóvenes que podrían moldear el futuro de la liga. Con nombres como AJ Dybantsa, Darryn Peterson, Cameron Boozer y otros destacados jugadores, el análisis temprano de estas futuras estrellas se hace imprescindible. En este artículo tipo comentario, haremos un repaso profundo sobre los jugadores que están destinados a ocupar las primeras posiciones del sorteo y explorar qué los hace únicos.

AJ Dybantsa: El fenómeno desde Massachusetts

Con 6'9'' de estatura (2.06 metros) y un juego ofensivo pulido, AJ Dybantsa lidera actualmente todos los rankings importantes de reclutamiento como el prospecto número uno de la nación: ESPN, On3 y Rivals coinciden en su supremacía. Lo más llamativo fue su decisión de comprometerse con BYU, dejando atrás ofertas de élite de programas como Kansas, North Carolina y Alabama.

Dybantsa ha armado su reputación como un anotador versátil capaz de desequilibrar tanto desde el perímetro como atacando el aro. En la pasada temporada jugó para Utah Prep, y este verano estará representando a Estados Unidos en el equipo U-19 en la Copa del Mundo FIBA. La expectativa en torno a él recuerda al nivel de atención que recibió Victor Wembanyama antes del Draft 2023.

Darryn Peterson: Kansas suma dinamita perimetral

Peterson, un escolta de 1.96 metros (6'5'') procedente de Ohio, se enroló con Kansas. Su versatilidad le permite jugar como armador o escolta, y su capacidad para generar canastas desde el drible lo convierte en un prospecto temido. Compartió el galardón de Co-MVP en el McDonald’s All-American Game 2025, y su presencia ofensiva y defensiva es notable. Jugó para Prolific Prep en California, una fábrica de talentos de la que han salido figuras como Jalen Green y Gary Trent Jr.

247Sports, sin embargo, pone a Peterson en el primer lugar de su ranking, lo que podría generar un debate interesante conforme nos acerquemos al verano de 2026.

Cameron Boozer: Sangre NBA y potencia ganadora

Hijo del ex jugador de Duke y NBA Carlos Boozer, Cameron ha seguido los pasos de su padre al comprometerse con Duke y dominar el baloncesto colegial. Junto a su gemelo Cayden, ganaron un título nacional escolar y cuatro campeonatos estatales consecutivos en Florida, lo que refleja su madurez competitiva.

En el Nike Hoop Summit, Boozer mostró su habilidad bidireccional con una impresionante línea estadística de 22 puntos, 16 rebotes y 6 asistencias contra el equipo mundial. Es otro de los grandes favoritos a ser una selección Top 3.

Otros prospectos que están dando de qué hablar

  • Nate Ament (Tennessee): Otro alero de 6'9'' con habilidades perimetrales y nombrado Jugador Gatorade del Año en Virginia. Su talento apunta alto, aunque necesita fortalecer su físico.
  • Caleb Wilson (North Carolina): Desde Atlanta llega este All-American que combina atleticismo con capacidad de bloqueo. Anunció su compromiso con los Tar Heels en TNT acompañando a Charles Barkley y Shaquille O’Neal.
  • Chris Cenac Jr. (Houston): MVP del NBPA Top 100 Camp, es un pívot de 2.08 metros con rango de tiro exterior. El entrenador Kelvin Sampson de los Cougars lo describe como “más jugador de baloncesto que pívot tradicional”.
  • Karim López (New Zealand Breakers): Mexicano, parte del programa Next Stars de la NBL, promedia 9.6 puntos con 4.7 asistencias. Es uno de los talentos internacionales que más intrigan a los scouts.

¿Está cambiando la edad y experiencia en el Draft?

Una narrativa que ha ganado tracción en los últimos drafts es cómo los jugadores con más años de universidad y trayectoria sólida, pero menos "potencial futuro", tienen cada vez más difícil escalar en los puestos altos del Draft. Un claro ejemplo es Johni Broome, quien después de una exitosa carrera universitaria con Auburn (18.6 puntos, 10.8 rebotes en su última temporada), cayó hasta el pick 35 en el Draft 2025, seleccionado por los Philadelphia 76ers.

Broome fue calificado por Jay Bilas como "un ganador", pero el hecho de tener 23 años y no poseer atleticismo de élite marcó su techo ante los ojos de los evaluadores NBA. Su máximo salto vertical de 28 pulgadas fue el segundo peor del NBA Combine, mientras que sus porcentajes de triple rondaron el 31.4% pese a intentos consistentes. Su estilo “por debajo del aro” ha sido considerado limitante cuando se compara con prospectos más jóvenes como Derek Queen, quien con menos experiencia universitaria fue tomado en la primera ronda.

¿Quién se proyecta como el número uno?

Todavía falta una temporada completa de baloncesto universitario para definir el escenario final del Draft 2026, pero los datos iniciales colocan en los primeros lugares del debate a:

  1. AJ Dybantsa (BYU): Por versatilidad, madurez y condición atlética.
  2. Darryn Peterson (Kansas): Por su visión de juego y presencia física.
  3. Cameron Boozer (Duke): Por genética, IQ y balance ofensivo-defensivo.

Sin embargo, la competencia es feroz. Prospectos como Jayden Quaintance (Kentucky), Darius Acuff Jr. (Arkansas) y el mexicano Karim López quieren meterse en el radar alto con grandes actuaciones nacionales e internacionales.

Lo internacional, cada vez más influyente

Al igual que ocurrió con Luka Doncic, Victor Wembanyama o Bilal Coulibaly, el talento internacional sigue robusteciendo la perspectiva global del Draft NBA. Programas como el NBL Next Stars han revolucionado la manera de preparar a promesas, y jugadores como Dash Daniels (hermano del base de los Hawks, Dyson Daniels) encarnan ese modelo perfectamente.

Desde España, Francia, México y Australia, los scouts siguen muy de cerca a los jóvenes que pueden ofrecer versatilidad y aprendizaje táctico precoz, algo muy valorado frente a la juventud estadounidense más explosiva pero menos táctica.

La generación 2026 frente a la historia reciente

Desde que Zion Williamson se robó el show como número uno en 2019, la NBA ha vivido constantes debates sobre la validez del “potencial” vs. “productividad”. Nombres como Anthony Edwards, Cade Cunningham, Paolo Banchero y Victor Wembanyama fueron favoritos casi unánimes. La generación 2026 no tiene aún ese candidato indiscutible, pero cuenta con muchas figuras con argumentos fuertes.

Esto hará del Draft una batalla cargada de evaluaciones subjetivas: capacidad física, madurez mental, aportación universitaria, impacto internacional y potencial de crecimiento en entornos NBA.

Lo que se viene en camino

Analistas como Jonathan Wasserman (Bleacher Report) y Kyle Boone (CBS Sports) ya proyectan que el Draft 2026 será de los más equilibrados en la última década, similar al de 2021. No se espera una “súper estrella obvia” a la Wembanyama, pero sí una clase repleta de piezas clave para el futuro de muchas franquicias.

Este equilibrio también se ve reflejado en la primera ronda del Draft 2025, donde la implementación de selecciones como Cooper Flagg (número uno), Dylan Harper (número dos) o VJ Edgecombe (número tres), proyecta que la confianza de los equipos está hoy más en el proceso de formación a largo plazo que en el impacto inmediato.

Todo indica que el 2026 nos regalará una camada rica en talento, multicultural y perfectamente diseñada para alimentar el ya diverso ecosistema del baloncesto profesional.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press