Trump y los republicanos reavivan el debate fiscal con un proyecto de ley controversial

Con recortes de impuestos, gasto militar, deportaciones masivas y recortes sociales, la nueva propuesta republicana amenaza con transformar profundamente el rumbo económico de EE. UU.

Un megaproyecto con huella ideológica

En una carrera contrarreloj legislativa, los republicanos han avanzado con un mastodóntico proyecto de ley de 940 páginas que combina recortes fiscales, gasto militar y severas políticas migratorias, entre otras medidas polémicas. Donald Trump, en su regreso al epicentro de la política con sabor a campaña, ha presionado a su partido para que se apruebe el proyecto antes del 4 de julio, convirtiéndolo no solo en una propuesta económica, sino también en un estandarte ideológico.

Un alud de recortes fiscales con sabor electoral

Los republicanos justifican la urgencia por aprobar el paquete antes de fin de año debido a la expiración programada de varios beneficios fiscales que datan de la presidencia de Trump. El nuevo texto extiende y amplía dichas medidas, proponiendo recortes por un valor total estimado de 4,5 billones de dólares.

  • El crédito tributario por hijo sube de $2,000 a $2,200.
  • Se eliminan o reducen impuestos a propinas y pagos por horas extra.
  • Una deducción de hasta $6,000 para personas mayores con ingresos inferiores a $75,000.
  • Gasto deducible en financiamiento automotriz e inversión empresarial.

Según el Congressional Budget Office (CBO), el 20 % más rico de la población recibiría, en promedio, beneficios fiscales por $12,000 anuales, mientras que el 20 % más pobre perdería $1,600. La clase media se movería entre un retorno de $500 y $1,500.

Prioridades en defensa y migración con elevadas cifras

El proyecto incluye más de $350 mil millones en gasto para seguridad nacional y fronteriza:

  • $46 mil millones para continuar la construcción del muro fronterizo.
  • $45 mil millones para ampliar los centros de detención de inmigrantes a 100,000 camas.
  • Contratación de 10,000 nuevos agentes migratorios con bonificaciones iniciales de $10,000.
  • Fondos estatales de $10 mil millones adicionales para colaborar en deportaciones.
  • Un objetivo declarado de deportar hasta 1 millón de migrantes al año.

En paralelo, el Departamento de Defensa recibiría una fuerte inyección económica, incluyendo:

  • $25 mil millones para el desarrollo del sistema de defensa antimisiles "Golden Dome".
  • Fondos extraordinarios para misiles, construcción naval y bienestar militar.
  • $1 mil millones asignados exclusivamente a seguridad fronteriza.

Pagando la factura: recortes sociales de alto impacto

Para equilibrar parcialmente el abismo fiscal, los republicanos buscan reducir programas sociales clave como Medicaid y cupones de alimentos (SNAP), afectando gravemente a decenas de millones.

Las nuevas medidas incluyen:

  • Requisitos laborales de 80 horas mensuales para adultos hasta los 65 años.
  • Cobros de copagos de $35 para pacientes de Medicaid.
  • Exclusión de cobertura para padres de niños mayores de 14 años si no cumplen condiciones laborales.

Actualmente, 71 millones de personas usan Medicaid y 40 millones reciben ayuda alimentaria. De aprobarse, alrededor de 11,8 millones perderían el seguro médico para 2034, y más de 3 millones dejarían de recibir ayuda alimentaria.

Para operar en áreas rurales y evitar deserciones republicanas, se propone un nuevo programa de transformación de hospitales rurales con $25 mil millones en financiamiento.

La ofensiva contra las energías renovables

El plan también implica una reversa dramática en política ambiental y energética, eliminando o acotando créditos fiscales clave impulsados por Joe Biden en su legislación climática de 2022.

Entre las propuestas más polémicas:

  • El fin del crédito por producción energética renovable para plantas no conectadas a la red antes de 2027.
  • Imposición de nuevos impuestos a proyectos eólicos y solares que utilicen componentes de origen chino.
  • El crédito para compra de vehículos eléctricos expiraría el 30 de septiembre de 2025, en lugar de 2032.
  • Expansión de créditos para carbón metalúrgico usado en siderurgia.

El senador demócrata Ron Wyden lo calificó como "una sentencia de muerte para la energía eólica y solar en Estados Unidos".

Trump Accounts, armas y héroes

Un abanico de medidas adicionales evidencia el componente ideológico del proyecto:

  • Se crean las cuentas de ahorro infantiles "Trump Accounts", con depósitos de hasta $1,000 por parte del Tesoro.
  • $40 millones para la creación del "National Garden of American Heroes" impulsado por Trump desde 2020.
  • Desaparece el impuesto de $200 sobre silenciadores de armas, rifles y escopetas de cañón corto.
  • Se bloquea el envío de fondos a organizaciones de planificación familiar como Planned Parenthood.
  • Asignación de $88 millones a un comité de rendición de cuentas pandémico.
  • Se evita que estados regulen la inteligencia artificial, vinculado al financiamiento federal para infraestructura de IA.
  • Expansión de la compensación por exposición a radiación (Radiation Exposure Compensation Act), favoreciendo a comunidades afectadas por ensayos nucleares.
  • Financiamiento para futuras misiones a la Luna y Marte como parte del programa Artemis.

Contabilidad creativa, deuda y un abismo fiscal

El CBO estima que, de aprobarse este proyecto tal como está, los déficits federales aumentarían en $3,3 billones entre 2025 y 2034. No obstante, los republicanos argumentan que esta cifra es engañosa, apelando a la idea de que las exenciones fiscales ya representan la política vigente y por lo tanto no deberían contarse como nuevas obligaciones.

Bajo esa interpretación alternativa, el proyecto incluso reduciría el déficit en $500 mil millones durante la próxima década. Expertos no partidistas como el Comité por un Presupuesto Federal Responsable han criticado este enfoque, señalando un "truco contable que haría sonrojar a los ejecutivos de Enron".

Adicionalmente, se propone elevar el techo de deuda en $5 billones para mantener la capacidad de cumplir con las obligaciones federales vigentes.

La batalla partidaria y lo que está en juego

Con los demócratas unidos en bloque en contra del proyecto, el Senado vivió intensas sesiones de votaciones sobre enmiendas, en un proceso conocido como vote-a-rama. Estas rondas permiten la presentación ilimitada de enmiendas por parte de los legisladores, cada una sujeta a votación. Si el proyecto se aprueba en el Senado, pasará a la cámara baja, donde enfrentará una batalla igualmente tensa.

La magnitud ideológica, económica y social del proyecto lo posiciona como uno de los documentos más transformadores —y divisivos— de los últimos años en la política estadounidense. Mientras los republicanos lo presentan como un regreso al orden fiscal y valores tradicionales, los demócratas y múltiples análisis técnicos alertan que podría llevar a una crisis de desigualdad, abandono social y retrocesos ambientales profundos.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press