Zubimendi, la nueva joya del Arsenal: ¿puede cambiar el destino del club en la Premier League?

El internacional español llega a Londres en el mejor momento de su carrera y se convierte en la gran apuesta de Arteta para conquistar el título que se les resiste desde hace 20 años.

El fichaje de Martin Zubimendi por el Arsenal ha encendido las alarmas —y la ilusión— en el norte de Londres. El mediocampista donostiarra de 26 años, internacional con España y con más de 200 partidos en la Real Sociedad, finalmente ha dado el salto a la Premier League en una operación cercana a los 60 millones de libras esterlinas (alrededor de 82 millones de dólares).

Un fichaje que tardó en llegar

Hace justo un año, Zubimendi rechazaba una propuesta formal del Liverpool. En ese entonces, su lealtad a la Real Sociedad y su deseo de seguir desarrollándose en España prevalecieron. Pero el fútbol tiene sus tiempos, y el contexto ha cambiado.

Arsenal le ha ofrecido algo que ni el Liverpool ni otros clubes europeos pudieron: un sistema que se adapta perfectamente a sus cualidades, la dirección de un compatriota con filosofía similar (Mikel Arteta) y un proyecto deportivo ambicioso en el que puede ser eje fundamental.

¿Por qué Zubimendi encaja tan bien en el Arsenal?

Zubimendi es un mediocentro posicional con inteligencia táctica, despliegue físico y precisión en el pase. Se formó en Zubieta bajo una filosofía que prima el juego asociativo, lo colectivo sobre lo individual y la presión tras pérdida. Su estilo recuerda al de Sergio Busquets, pero con una mayor capacidad para romper líneas gracias a su visión y su físico.

Arteta lo sabe y lo valora: “Martin es un jugador que aportará mucha calidad e inteligencia futbolística. Se adaptará muy bien y tiene todas las cualidades para ser clave en el equipo”, declaró el entrenador vasco al oficializarse el fichaje.

¿Sustituto natural de Thomas Partey?

El contexto del fichaje también tiene un trasfondo inevitable. Thomas Partey, cuyo contrato ha expirado, enfrenta numerosas acusaciones que lo alejan del foco deportivo. Así, Zubimendi llega para hacerse con el puesto de forma inmediata, y no solo cubrir un vacío, sino revolucionar el mediocampo.

En cifras, Zubimendi ha jugado 236 partidos con Real Sociedad, en los que sumó 7 goles y 8 asistencias, pero su aportación va más allá de los números. Su índice de recuperación de balón en campo rival y su precisión en el pase corto (91% esta temporada) reflejan el tipo de perfil que Arteta busca para consolidar su 4-3-3 en fase ofensiva ó 4-2-3-1 en transición.

Un campeón europeo que llega con hambre

El momento de forma también acompaña: Zubimendi fue parte importante en la Euro 2024, donde España conquistó el torneo tras vencer a Inglaterra 2-1 en la final, precisamente en Múnich. Aunque no fue titular habitual, entró en 19 partidos a lo largo del ciclo, consolidándose entre los mediocentros más confiables para Luis de la Fuente.

Su entrada en la segunda mitad en la final ayudó a España a contener los embates ingleses. Ganó el 80% de sus duelos individuales y completó 23 de 25 pases mientras dirigía el tempo del equipo en los últimos 35 minutos, cuando más se necesitaba cabeza fría y control.

El Arsenal necesita mucho más que talento

Desde la última Premier ganada en 2004, los “Gunners” han vivido en una montaña rusa emocional. Su brillantez táctica, cantera prometedora y fichajes ambiciosos no se han traducido en títulos. La afición ha visto cómo, en tres temporadas consecutivas, el club ha quedado segundo detrás del Manchester City, siempre cerca del premio gordo, pero con el sabor amargo del “casi”.

Zubimendi puede no ser el anhelo mediático de muchos fans, pero su perfil parece diseñado a la medida para aportar equilibrio, solidez y guía. ¿Puede ser el factor diferencial que rompa la sequía?

Los números no mienten

Una rápida comparación con algunos de los mejores mediocentros defensivos de Europa esta temporada según datos de FBref:

  • Pases completados por 90 minutos: Zubimendi — 75, Rodri — 82, Rice — 70
  • Precisión en pase largo: Zubimendi — 81%, Rodri — 84%, Rice — 76%
  • Entradas ganadas por 90: Zubimendi — 2.1, Rodri — 1.9, Rice — 1.4
  • Intercepciones por 90: Zubimendi — 1.6, Rodri — 2.0, Rice — 1.3

La diferencia no es abismal, y si se tiene en cuenta que viene de un equipo con menor posesión y presión media más baja, el desempeño de Zubimendi aún resulta más impresionante.

¿Cómo encajará en el esquema de Arteta?

Es muy probable que Zubimendi arranque como titular desde el primer día en una posición crítica: el eje. Por delante tendrá a Odegaard y Declan Rice con libertad para conectar con Saka, Martinelli o Havertz.

Esta posición de pivote no solo le exige técnica, sino concentración para proteger la zaga y corte de anticipación. La capacidad de Zubimendi para cubrir espacios, ir al cruce sin cometer faltas y circular el balón, será valiosa en un equipo que busca ser amo del balón.

Una Premier cada vez más española

Con Zubimendi, Arsenal suma a su segundo fichaje estrella español en dos años (Mikel Merino el año pasado) y se une a una denominada “generación dorada” de jóvenes españoles que están emigrando a la élite inglesa. Rodri (City), David Raya (Arsenal), Pedro Porro (Tottenham), Marc Cucurella (Chelsea), entre otros, demuestran que la Premier es cada vez más receptiva al equilibrio técnico que España produce.

Quizás no veremos “tiki-taka” puro en Londres, pero sí control, clase y personalidad, elementos que en los últimos años han hecho falta en la batalla por cazar al City de Guardiola.

El desafío es mental

Más allá de su rendimiento físico y técnico, Zubimendi deberá adaptarse a la intensidad mediática y competitiva de la Premier. No será fácil. Arsenal no es la Real. La presión es mayor, los errores se magnifican y el margen de maniobra es mínimo. Pero si algo ha demostrado este donostiarra es equilibrio emocional, capacidad de adaptarse y constancia.

Hay quienes recordarán cómo debutó con apenas 21 años en un derbi vasco en San Mamés y no desentonó ni un segundo. O cómo asumió el brazalete interinamente en jornadas cruciales cuando la Real luchaba por entrar a Champions.

Ese carácter podría marcar la diferencia.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press