¿El Derby de Jonrones está perdiendo brillo? La decisión de Alonso y Schwarber enciende el debate
La ausencia de dos grandes toleteros en el evento más explosivo del béisbol deja preguntas sobre su futuro atractivo
El Derby de Jonrones del Juego de Estrellas de la MLB siempre ha sido un espectáculo cargado de adrenalina, una fiesta de poder al bate que ha electrificado a los fanáticos desde su introducción en 1985. Sin embargo, este 2025 llega con una baja notable en su cartel: Pete Alonso y Kyle Schwarber, dos de los cañoneros más temidos de la liga, han decidido no participar. ¿Estamos viendo un declive en el interés de las superestrellas por este emblemático evento?
El peso de las decisiones: dos caídas de último momento
Pete Alonso, campeón del Derby en 2019 y 2021, confirmó que no participará en esta edición, alegando falta de motivación y el deseo de usar el receso como tiempo de recuperación física. Aunque respeta mucho el evento y lo considera "sick", como lo expresó a MLB.com, Alonso dejó claro que su prioridad es el rendimiento con los Mets en la segunda mitad de la temporada.
Por su parte, Kyle Schwarber se despidió con un “quizás el próximo año”, manteniendo la esperanza de poder lucirse ante su público cuando el Juego de Estrellas de 2026 se celebre en Filadelfia, ciudad del equipo al que representa como bateador designado.
¿Por qué está costando llenar la cartelera?
Históricamente, el Derby de Jonrones ha sido una de las actividades más vistas de todo el calendario de MLB All-Star. Pero en los últimos años, ha habido una resistencia creciente por parte de los jugadores élite. Esto obedece a una combinación de factores:
- Fatiga física: La segunda mitad de la temporada se acerca, y muchos jugadores prefieren descansar en lugar de arriesgarse a una lesión o sufrir agotamiento muscular.
- Riesgo de perder timing: Algunos bateadores creen que los swings potentes y repetitivos alteran su mecánica —una teoría respaldada por estudios como el de Sport Science Journal (2020), que exploraron el impacto de la fatiga en la precisión del golpeo.
- Recompensa simbólica, bajo incentivo físico: Aunque el premio en metálico para el ganador es de $1 millón, para atletas con salarios anuales de $20 o $30 millones, esa cifra queda relegada.
Un evento que vive de nombres
La falta de nombres rimbombantes tiende a afectar directamente el rating de televisión. Según Nielsen, la edición de 2019 (con Alonso y Vladimir Guerrero Jr. como protagonistas) fue una de las más vistas de la última década. En comparación, el evento de 2023, donde las estrellas decidieron ausentarse masivamente, tuvo la caída de rating más pronunciada en nueve años.
En 2025, hasta ahora están confirmados:
- Ronald Acuña Jr. (Bravos de Atlanta)
- James Wood (Nacionales de Washington)
- Cal Raleigh (Marineros de Seattle)
Si bien todos tienen poder al bate, el estatus de estrella mediática del evento decae sin representantes como Alonso, Schwarber o incluso Juan Soto o Shohei Ohtani.
¿Debería la MLB replantearse el formato?
Con la intención de hacerlo más emocionante y menos riesgoso, algunos analistas han propuesto cambiar el formato actual. La MLB ya experimentó una vez, eliminando el sistema por outs y reemplazándolo por cronómetros en 2015 —una decisión que trajo más dinamismo. Ahora, algunas propuestas frescas incluyen:
- Formato por equipos: Dos equipos de cuatro jugadores, enfrentándose por acumulado colectivo.
- Menos rondas, más premiación: Para evitar la fatiga, una única ronda por jugador y mayores incentivos financieros.
- Interacción entre fanáticos y jugadores: Eventos que vinculen directamente a los fans, como elegir el lanzador o votar un “power play”.
Una nostalgia intacta, pero en transformación
Para muchos aficionados, el Derby sigue siendo una ventana a los ídolos de siempre. Quién no recuerda los 41 jonrones de Vladimir Guerrero Jr. en 2023 o los 28 consecutivos de Josh Hamilton en 2008. El evento tiene historia y emoción, pero tal vez esté pidiendo a gritos una evolución.
Como lo expresó el periodista deportivo Ken Rosenthal en una entrevista para FOX Sports: “El Derby ha sido increíble, pero estamos en un momento en que el físico del pelotero importa más que el show. El balance debe reencontrarse.”
La mirada de los equipos: ¿enemigos del show?
Lo que muchos no consideran es que los propios equipos están influyendo en las decisiones de sus jugadores. Durante la última década, múltiples managers han expresado su recelo ante el desgaste físico que puede causar el evento. Joe Maddon, exentrenador de los Cubs, lo dijo de manera clara en 2016: "Si tengo una estrella, prefiero que me la devuelvan fresca y sin lesiones".
En ligas como la NFL, el Pro Bowl rara vez ve participación de los verdaderos protagonistas. La NBA mantiene viva su competencia de volcadas, pero ha perdido lustre ante la falta de figuras como LeBron James desde hace años. ¿Está la MLB simplemente siguiendo esa tendencia?
¿Qué se puede hacer?
La solución parece ir más allá del dinero o del formato: debe haber una reconexión emocional entre el jugador y la experiencia del Derby. Promociones temáticas, vinculación con causas benéficas, inclusión de leyendas como coaches, todo podría enriquecer esa conexión emocional.
Además, permitir que algunos fanáticos representen a sus jugadores en el concurso de jonrones con premios simbólicos es otra apuesta que podría reinventar la experiencia del espectador común.
El futuro inmediato: todo en manos de Atlanta
Este 2025, el Derby de Jonrones se celebrará en el Truist Park de Atlanta. La esperanza es que la casa de los Bravos logre mantener la emoción a pesar de las ausencias. Aunque Alonso y Schwarber estén fuera, los focos estarán puestos en Acuña Jr., la gran cara del béisbol moderno, quien buscará dejar su marca personal, y tal vez recuperar la chispa del evento.
El evento inicia el lunes 14 de julio, a las 8:00 p.m. hora del Este (ET), y será transmitido en vivo por ESPN. Para entonces, conoceremos si alguna estrella más se suma al lineup y si los fanáticos terminan aceptando esta nueva (y más joven) generación de bombarderos.
En el béisbol, como en la vida, todo regresa en ciclos. El Derby de Jonrones quizás no esté muerto… pero como todo ícono: necesita reinventarse para sobrevivir.