El millonario premio oculto del béisbol: el bono prearbitraje que está transformando la MLB

Pete Crow-Armstrong lidera una generación de jóvenes talentos que se benefician del innovador fondo de $50 millones, diseñado para recompensar a las futuras estrellas antes de llegar al arbitraje salarial.

Un cambio de paradigma en el béisbol de Grandes Ligas

La Major League Baseball (MLB) ha experimentado una transformación silenciosa pero de gran impacto desde la implementación del bono prearbitraje como parte del acuerdo laboral colectivo de 2022. Este incentivo financiero, poco conocido fuera de los círculos más especializados del béisbol, distribuye anualmente $50 millones entre jugadores jóvenes destacados que aún no son elegibles para arbitraje salarial.

¿Quiénes se benefician? ¿Cómo se calcula este bono? Y, sobre todo, ¿qué implicaciones tiene esta remodelación económica en la estructura y proyección de los jóvenes talentos en las Grandes Ligas?

¿Qué es el bono prearbitraje?

El acuerdo colectivo alcanzado en 2022 entre los jugadores y los propietarios de MLB marcó un hito con la creación del fondo de bonificaciones prearbitraje. Este busca recompensar a aquellos jugadores que, a pesar de tener menos de tres años de experiencia en Grandes Ligas (menos de 2 años y 132 días), logran un impacto significativo en el terreno de juego.

Históricamente, muchos de estos jugadores recibían apenas el salario mínimo de la liga (en 2025, fijado en $760,000), mientras generaban millones en ingresos para sus equipos. Este bono busca nivelar dicha desigualdad.

¿Cómo se determina el reparto?

Uno pensaría que esto se hace con base en estadísticas tradicionales, pero no: la clave es el WAR (Wins Above Replacement). Esta métrica avanzada cuantifica el valor total de un jugador en comparación con un suplente promedio.

Un comité conjunto de la MLB y la Asociación de Jugadores desarrolla la fórmula exacta del WAR utilizada para calcular los montos.

Además de los valores asignados según WAR, se otorgan bonos por méritos especiales: ganar MVP o Cy Young ofrece una bonificación de $2.5 millones, mientras que ser Novato del Año garantiza $750,000.

Pete Crow-Armstrong: el joven millonario que lidera el ranking

El jardinero central de los Chicago Cubs, Pete Crow-Armstrong, no solo ha conquistado un lugar en el Juego de Estrellas de 2025. También es el receptor proyectado del mayor bono individual de este fondo: $1,091,102 gracias a su impresionante WAR acumulado hasta el 8 de julio.

Crow-Armstrong, de apenas 22 años, tiene un contrato de apenas $771,000 en salario base este año, lo que convierte su bono en un incremento salarial de más del 140%.

El Top 10 del reparto: presencia latina y diversidad de posiciones

  • Paul Skenes (Pittsburgh): $961,256
  • James Wood (Washington): $863,835
  • Corbin Carroll (Arizona): $798,397
  • Hunter Brown (Houston): $786,838
  • Cristopher Sánchez (Philadelphia): $764,854
  • Elly De La Cruz (Cincinnati): $717,479
  • Carlos Narváez (Boston): $703,007
  • Ceddanne Rafaela (Boston): $685,366
  • Riley Greene (Detroit): $665,470

Se destaca especialmente la presencia latina entre los beneficiados. El dominicano Cristopher Sánchez y el boricua Carlos Narváez representan el éxito de talentos internacionales dentro de la nueva generación dorada de la MLB.

¿Una reacción a las críticas históricas?

Durante décadas, los sindicatos de jugadores y analistas criticaron la economía injusta para los novatos, quienes rara vez veían beneficios proporcionales a su producción en sus primeros años, cuando sus derechos contractuales están completamente controlados por la franquicia.

Con este fondo, al menos 100 jugadores reciben una compensación adicional directa basada en rendimiento, no en arbitrajes o contratos a largo plazo.

Un vistazo al histórico: ¿quién ganó más en 2024?

El campocorto de los Royals, Bobby Witt Jr., recibió la mayor parte del bono el año pasado: $3,077,595. Le siguió Paul Skenes con $2,152,057, a pesar de que debutó en Grandes Ligas el 11 de mayo. Esto demuestra cómo un impacto inmediato puede traducirse en bonificaciones significativas y rápidas.

Finanzas y estrategia: cómo afecta esto a los equipos

Irónicamente, aunque el fondo fue creado para beneficiar a los jugadores, puede generar cambios estratégicos en los despachos gerenciales. Algunos equipos podrían decidir mantener a ciertos talentos en ligas menores unas semanas más, evitando así aumentar sus bonificaciones con WAR.

Esto revivió el debate sobre el “service time manipulation”, práctica en la que los equipos retrasan intencionalmente el debut de un jugador para no activar ciertos beneficios contractuales.

Estrellas en formación: una clase All-Star con proyección millonaria

Entre los principales beneficiados del bono 2025, varios ya han sido seleccionados al Juego de Estrellas: Pete Crow-Armstrong, Paul Skenes, James Wood, Corbin Carroll, Hunter Brown, Elly De La Cruz y Riley Greene. Su inclusión en el evento no solo corona el esfuerzo del primer semestre, sino que realza su valor de mercado.

Es probable que, con actuaciones sobresalientes en la segunda mitad del año, algunos de ellos ganen premios como el Novato del Año o entren en el All-MLB Team, elevando aún más sus bonificaciones individuales.

Un sistema cuestionado… ¿pero efectivo?

A pesar de los beneficios, algunos críticos destacan que el fondo no elimina la necesidad de un sistema de compensación más justo. El propio Corbin Carroll, quien figura en el Top 10, firmó un contrato de $111 millones por ocho años en su tercer año, volviendo irrelevante su participación en el bono.

Pero para talentos emergentes como Gunnar Henderson o Michael Busch, quienes aún están forjando su carrera, estas cifras marcan enormes diferencias en su seguridad financiera.

Un futuro prometedor para la juventud en la MLB

La implementación del bono prearbitraje ha transformado las reglas de juego económicas para los jóvenes talentos. Ha permitido que el rendimiento se traduzca de inmediato en beneficios económicos concretos.

Y si bien todavía queda camino por recorrer hacia una equidad salarial plena, esta herramienta marca un paso firme hacia esa dirección.

Los próximos años serán clave para observar cómo se ajusta este sistema, cuánto crece el fondo y qué otros mecanismos se pueden diseñar para consolidar un entorno competitivo sano, justo y motivador para las promesas del diamante.

Fuente: MLB en AP News

Este artículo fue redactado con información de Associated Press