Mandela Day: Cocina, compasión y 67,000 litros de sopa contra el hambre en Sudáfrica

En el Día Internacional de Nelson Mandela, chefs, estudiantes y organizaciones cocinan miles de litros de sopa para alimentar a los más necesitados y luchar contra el desperdicio alimentario

Una tradición de servicio con sabor a humanidad

El 18 de julio, Día Internacional de Nelson Mandela, no es solo una fecha para recordar al ícono de la lucha contra el apartheid. En Sudáfrica, esta jornada se ha convertido en una celebración activa del servicio, la empatía y la justicia social. Y en 2025, esta conmemoración se vivió con el aroma de verduras frescas, especias y una noble misión: preparar 67,000 litros de sopa para los más necesitados.

En Johannesburgo, decenas de chefs profesionales, cocineros comunitarios, estudiantes de cocina y voluntarios se unieron para cocinar una cantidad monumental de sopa: el equivalente simbólico de un litro por cada minuto de los 67 años de servicio público de Mandela.

La logística detrás de miles de litros de esperanza

La iniciativa fue organizada por la ONG Chefs with Compassion, que lidera este evento solidario desde hace seis años. Según su presidente, el chef ejecutivo James Khoza, el objetivo es claro: alimentar con dignidad y reducir el desperdicio alimentario reutilizando comida rescatada de mercados, supermercados y granjas.

“No se trata solo de cocinar en grandes cantidades, sino de entregar comida de calidad. Porque esas personas también merecen lo mejor”, expresó Khoza.

Para conseguir esta hazaña culinaria, la jornada comenzó desde temprano en la prestigiosa HTA School of Culinary Arts de Johannesburgo. Las ollas industriales comenzaron a hervir a las 6:00 a.m., y durante todo el día se cocinaron diferentes variedades de sopa: de lentejas, vegetales, pollo, y más.

Más allá de la cocina central, cientos de cocineros en todo el país aportaron desde sus propias cocinas y comunidades. Todos colaboraron con el objetivo nacional: alimentar estómagos y corazones.

Comida con dignidad: mucho más que sopa

En un año particularmente difícil para Sudáfrica, donde según el National Food and Nutrition Security Survey (NFNSS) 2024 el 63.5% de los hogares sufre de inseguridad alimentaria, esta acción adquiere una dimensión más profunda. Estamos hablando de más de 20 millones de personas que no tienen garantizado el acceso a alimentos cada día.

Paralelamente, el estudio reveló que se desperdician alrededor de 10.3 millones de toneladas de alimentos anualmente. Ante esta situación, organizaciones como Chefs with Compassion y Nosh Food Rescue están en pie de guerra contra el despilfarro.

“La energía alrededor del Día de Mandela es maravillosa, pero queremos invitar a la gente a que esta atención no sea cosa de un solo día”, dijo Hanneke Van Linge, directora de Nosh Food Rescue.

Una lección desde las aulas

Incluso los más jóvenes se unieron con entusiasmo. Tyra Nyakudya, estudiante de 18 años, pasó el día pelando y cortando vegetales con su escuela, que aportó 300 litros de sopa al conteo nacional.

“Yo era pequeña cuando Mandela falleció, pero sus valores siguen vivos. Él dio todo por su gente. Ahora es nuestro turno”, comentó Tyra.

El poder del alimento como gesto político y social

La comida, en este caso, no es solo sustento. Se convierte en un acto de resistencia, solidaridad y reconocimiento. Como explicó James Khoza:

“A menudo la gente en situación de calle recibe lo que sobra, lo que nadie quiere. Pero nosotros venimos del mundo hotelero. Sabemos que cada plato que servimos dice algo. Y este dice: ‘Eres importante. Eres digno’”.

La acción de cocinar sopa para miles es, a la vez, un símbolo de unión. Es una respuesta a una sociedad donde la desigualdad alimentaria es una de sus heridas más profundas. Y en medio de los retos del cambio climático, el desempleo y los precios elevados, se vuelve urgente rescatar alimentos y redistribuir la abundancia.

67 minutos que dejan huella

Desde 2009, Naciones Unidas promueve celebrar el 18 de julio con 67 minutos de servicio, uno por cada año que Nelson Mandela luchó por los derechos humanos, la justicia y la igualdad. Y en Sudáfrica, ese espíritu se ha materializado de muchas formas: desde limpiar plazas, ayudar en escuelas, donar ropa, hasta simplemente escuchar y ofrecer compañía.

Pero ver cientos de litros de sopa burbujeando en grandes calderos es un recordatorio tangible de lo que significa darle un propósito a cada minuto. De devolver a la comunidad. De recordar que, como decía el propio Madiba:

“Lo que cuenta en la vida no es el mero hecho de haber vivido. Es la diferencia que hemos hecho en la vida de los demás lo que determinará el significado de la vida que llevamos.”

Que esta sopa no solo llene el estómago, sino también el alma.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press