Ken Paxton y el laberinto legal de los 'hogares primarios': ¿fraude hipotecario en la cima del poder?
El Fiscal General de Texas enfrenta graves acusaciones por declarar múltiples residencias como 'hogar principal', obteniendo beneficios fiscales y financieros indebidos. ¿Hasta dónde llega la impunidad política en EE.UU.?
Un fiscal bajo la lupa (otra vez)
Ken Paxton no es ajeno a la controversia. Como fiscal general de Texas y figura destacada dentro del ala trumpista del Partido Republicano, su carrera ha estado plagada de escándalos, investigaciones y hasta un juicio político en 2023. No obstante, su gestión ha sobrevivido como un símbolo de resistencia conservadora. Ahora, una nueva investigación amenaza con manchar aún más su reputación: la declaración fraudulenta de múltiples hogares como 'residencia principal' en hipotecas y documentos fiscales.
Los hechos: préstamos, declaraciones falsas y beneficios fiscales
De acuerdo con una revisión de registros hipotecarios públicos en poder del estado de Texas, Paxton y su esposa, la senadora estatal Angela Paxton, firmaron documentos hipotecarios que clasifican tres propiedades distintas como "residencia principal".
Según Jennifer E. Laurin, profesora de derecho en la Universidad de Texas, para que se configure delito, debe probarse que quien firma el documento tenía conocimiento de que estaba haciendo una declaración falsa. Pero en este caso, tal como apuntan múltiples expertos legales, Paxton, **como abogado y máximo responsable de la ley en Texas**, debería haber conocido las implicaciones de tales actos.
¿Por qué importa declarar una propiedad como “residencia principal”?
El objetivo es claro: tasas de interés más bajas y deducciones fiscales considerables. Las hipotecas sobre residencias principales tienen tasas más favorables que aquellas destinadas a segundas residencias o propiedades de inversión. Eso se traduce en ahorros de decenas de miles de dólares a lo largo de los años.
Según Arif Lawji, abogado de bienes raíces en Texas con más de 30 años de experiencia, "Si él llenó los documentos del prestamista sabiendo que eran falsos, eso constituye una declaración fraudulenta hipotecaria. Y eso es punible".
Paxton y la doble exención fiscal: otro posible delito
Pero las tasas de interés no son el único cabo suelto. La familia Paxton también habría cobrado simultáneamente la exención fiscal de "homestead" en dos propiedades: la residencia familiar de Dallas y una casa de $1.1 millones en Austin. Bajo la ley de Texas, esta exención fiscal se otorga exclusivamente sobre la residencia principal y no puede duplicarse.
Esta exención equivale a varios miles de dólares en beneficios fiscales al año. Para obtenerla, es necesario enviar un formulario firmado por el solicitante —lo que constituye, según expertos, una actividad consciente e intencional, no una omisión menor.
¿Violaciones contractuales? Airbnb y alquileres prohibidos
Los registros muestran además que los Paxton podrían haber violado los términos contractuales de al menos dos hipotecas más: una en College Station, Texas, y otra en Broken Bow, Oklahoma.
Ambas hipotecas incluyen cláusulas que prohíben explícitamente el alquiler de las propiedades, estipulando que deben ser para uso exclusivo del prestatario. Sin embargo, ambas viviendas —una catalogada como "cabaña de lujo de 5 habitaciones"— han sido alquiladas regularmente mediante plataformas como Airbnb, lo que va en contra del contrato firmado con los prestamistas.
Las entidades crediticias involucradas, entre ellas Stifel Bank y Cornerstone Home Lending, no han emitido declaraciones, pero especialistas financieros confirman que este tipo de violaciones contractuales permiten que el banco exija el pago total inmediato del préstamo.
¿Justicia selectiva?: Schiff, James y la vara doble del trumpismo
La situación de Paxton ha sido utilizada por algunos críticos para mostrar una doble vara en la aplicación de la justicia dentro de la administración Trump, que en su segundo mandato ha emprendido investigaciones contra figuras demócratas por situaciones similares.
Letitia James, fiscal general de Nueva York, fue acusada por el Departamento de Justicia por una supuesta declaración falsa en un formulario hipotecario tras ayudar a su sobrina en la compra de un inmueble en Virginia. No obstante, en documentos y correos electrónicos previos, James dejó en claro que no pretendía vivir allí.
Por su parte, Adam Schiff —senador por California— tuvo durante años dos propiedades designadas como “residencia principal”, una en Washington y otra en California. Sin embargo, en 2020 corrigió esa situación y reportó adecuadamente una de ellas como vivienda secundaria.
Ken Paxton no ha realizado ninguna corrección ni ha explicado sus acciones hasta la fecha, pese a que los documentos contradicen abiertamente sus declaraciones fiscales y legales.
Inmunidad bajo su propio cargo
Muchos expertos consideran poco probable que Paxton enfrente consecuencias legales importantes, y no solo por su cercanía con Trump. Como fiscal general, su oficina es precisamente la que investiga los delitos de fraude hipotecario en el estado de Texas. Es decir, tendría que autoinvestigarse.
El problema va más allá de la hipocresía política: plantea dudas profundas sobre la equidad del sistema legal estadounidense cuando se trata de sus propios funcionarios más poderosos.
Una carrera marcada por escándalos
El historial de Paxton está plagado de polémicas que, en casi cualquier otro político, habrían significado el fin de su carrera.
- Fue acusado formalmente por violar leyes de valores en 2014, caso que perduró por casi 10 años hasta ser finalmente desestimado en 2024.
- En 2023, fue impeached por la Cámara de Representantes de Texas, controlada por el Partido Republicano, bajo acusaciones de corrupción, tráfico de influencias y abuso de poder.
- La causa incluyó su relación con el desarrollador inmobiliario Nate Paul, quien fue condenado por emitir declaraciones falsas a instituciones financieras.
- Paul, a su vez, habría empleado a una mujer con la que Paxton mantenía una aventura extramarital. A cambio, Paxton presuntamente habría emitido opiniones legales que favorecieron al empresario.
Angela Paxton, quien no votó en el juicio político de su esposo, **ha solicitado el divorcio** este año, citando infidelidad y otros "descubrimientos recientes".
¿La política por encima de la ley?
Mientras decenas de figuras públicas son investigadas agresivamente, el caso de Ken Paxton pone en evidencia la politización de la justicia y la fragilidad institucional frente al poder político.
“Si realmente les interesa erradicar el fraude, deberían empezar por investigar al Fiscal General de Texas”, afirmó el abogado Abbe Lowell, defensor de Letitia James, en reacción a los cargos presentados contra la demócrata. Lowell ha representado a figuras de ambos partidos, incluidos Hunter Biden e Ivanka Trump.
¿Y ahora qué?
Paxton busca ahora un nuevo cargo: desea competir por un asiento en el Senado de Estados Unidos, desafiando al actual senador republicano John Cornyn. Las revelaciones hipotecarias prometen convertirse en un tema clave en las primarias, y posibles bombas de tiempo judiciales según cómo avancen los recursos legales.
En definitiva, el caso Ken Paxton no solo arroja luz sobre las irregularidades de una figura política poderosa, sino también sobre los márgenes de impunidad dentro del propio sistema de justicia estadounidense. Un sistema donde, con demasiada frecuencia, quienes deben hacer cumplir la ley, parecen ser los primeros en violarla.