Paul Dans vs. Lindsey Graham: ¿Está el trumpismo listo para tomar el Senado?

Con la irrupción del ideólogo de Project 2025 en las primarias republicanas, Carolina del Sur se convierte en el nuevo campo de batalla entre el establishment político y el ala dura del MAGA

Por primera vez en años, el senador Lindsey Graham se enfrenta a una amenaza real dentro de su propio partido. Y no es cualquier amenaza: Paul Dans, exfuncionario de la administración Trump y principal arquitecto del polémico Project 2025, anunció que desafiará a Graham en las primarias republicanas por el escaño de Carolina del Sur en el Senado. Pero este no es solo un desafío electoral. Es, ante todo, un pulso de poder entre dos visiones diametralmente opuestas del futuro del Partido Republicano y de Estados Unidos.

¿Quién es Paul Dans?

Paul Dans no es un outsider cualquiera. Este abogado y padre de cuatro hijos trabajó como enlace de la Casa Blanca con la Oficina de Gestión de Personal durante la administración Trump. Desde ahí, comenzó a diseñar una visión radical para una futura administración conservadora: Project 2025. Este proyecto, impulsado por la Heritage Foundation —el think tank conservador más influyente de Estados Unidos—, se presenta como una guía de 900 páginas para "desmantelar el estado administrativo" y "cerrar la puerta a la era progresista".

"Lo que hemos hecho con Project 2025 es cambiar realmente las reglas del juego", declaró Dans. Su objetivo, claramente declarado, es llevar esa revolución al corazón del poder legislativo: el Senado de los Estados Unidos.

El legado del Project 2025

No se puede entender del todo la candidatura de Dans sin analizar a fondo qué es Project 2025. El plan, cuya elaboración comenzó tras la salida de Trump de la Casa Blanca, busca reducir drásticamente el tamaño del gobierno federal, eliminar cargos públicos considerados innecesarios y restar poder a agencias reguladoras. Algunos lo han descrito como una hoja de ruta para una limpieza ideológica profunda en Washington.

Entre los puntos clave del proyecto se encuentran:

  • La eliminación de miles de empleos del sector público.
  • La reestructuración de agencias como el FBI, CDC y el Departamento de Educación.
  • Una agenda social alineada con valores cristianos evangélicos.
  • El control férreo del Departamento de Justicia desde el Ejecutivo.

Dans afirma que compiló muchas de las ideas "desde la mesa de su cocina en Charleston", reflejando su desdén hacia el establishment de Washington.

¿Por qué desafiar a Lindsey Graham?

Graham ha estado en el Senado desde 2003 y ha sabido mantenerse relevante a pesar de los crecientes cambios dentro del Partido Republicano. Aunque ha tenido altibajos en su relación con Trump, Graham ha sido uno de sus aliados más visibles en televisión, incluso compartiendo campo de golf con el expresidente. Trump incluso lo respaldó para su reelección, lo que hace aún más interesante el desafío de Dans.

Para Dans, sin embargo, Graham representa el pasado —el status quo—. En palabras del propio candidato:

“Graham ha pasado la mayoría de su carrera en Washington; es tiempo de mostrarle la puerta”.

Además, Dans señala que el Senado es "el manantial del pantano", reforzando la narrativa MAGA de que Washington está lleno de burócratas que frenan el progreso conservador.

¿Trump en el centro del juego?

La irrupción de Dans pone a prueba las lealtades internas del movimiento MAGA. ¿Podrá Trump mantenerse neutral entre un amigo como Graham y un ideólogo como Dans? De momento, el expresidente ha respaldado a Graham, preocupando a algunos de sus seguidores más radicales que consideran que el senador ya no representa el espíritu del movimiento.

Algunos analistas creen que Trump podría cambiar su apoyo dependiendo de cómo evolucionen las encuestas en 2025. Ya en otras ocasiones rompió con aliados históricos si percibía una pérdida de popularidad entre su base.

¿Un campo de batalla en expansión?

La contienda no será solo entre Dans y Graham. El ex vicegobernador de Carolina del Sur, André Bauer, y la demócrata Annie Andrews, también lanzaron sus campañas. Sin embargo, lo más probable es que la primaria republicana se convierta en el epicentro estratégico para la agenda trumpista. Si Dans gana, se abriría una puerta importante para consolidar el Project 2025 desde el Senado.

Dans no llega sin apoyos. Su paso por la Heritage Foundation le proporcionó alianzas ideológicas y acceso a una red de financiación millonaria. Aunque esta relación terminó en julio de 2024, debido a la controversia que generó el Project 2025, muchos observadores afirman que el proyecto ya echó raíces profundas en sectores del partido y de la administración pública.

El "Deep State" y la narrativa del enemigo interno

Dans es claro en su postura: cree firmemente en la existencia del "Estado profundo" o deep state, una teoría ampliamente difundida en los círculos MAGA que sostiene que existe una red de funcionarios gubernamentales que trabajan para obstaculizar la agenda conservadora.

"Soy el único que realmente comenzó a drenar el pantano al final del primer mandato de Trump", dice Dans. También resaltó iniciativas como las de eliminar oficinas federales, presuntamente inspiradas por asesores cercanos a Trump como Elon Musk. (Nota: no hay constancia oficial de que Musk haya tenido injerencia directa en el gobierno).

Una campaña con aroma evangélico

El lanzamiento oficial de su campaña incluye un desayuno de oración y un evento en un lugar histórico en Charleston, apuntando claramente a la base cristiana evangélica de Carolina del Sur. Este grupo constituye un pilar electoral clave en el sur profundo estadounidense y ha sido uno de los más leales a Trump desde 2016.

Dans no oculta que postula su candidatura con la intención de dar un giro moral a la política, invocando valores tradicionales y familiares. Esto podría resonar contundentemente en áreas rurales y entre ciudadanos desencantados con la política convencional.

¿Un ensayo general para 2026... o para 2028?

La batalla por el Senado en Carolina del Sur puede parecer una pelea local, pero en realidad está cargada de simbolismo nacional. El trumpismo busca solidificar su tercer acto, esta vez desde una base ideológica más estructurada que nunca. Dans es la manifestación de ese fenómeno: radical en su discurso, académico en su lenguaje político y profundamente estratégico.

La pregunta que queda es: ¿responderán los votantes MAGA con la misma pasión por las ideas como lo hacen por el carisma de Trump? Dans trata de capitalizar el momento y definirse como el heredero doctrinario del movimiento. Pero sin el respaldo explícito de Trump, su escalada podría ser cuesta arriba.

Por otro lado, si Graham logra resistir este embate radical, no solo consolidaría su liderazgo, sino que también podría significar una advertencia al ala extrema del partido: el Partido Republicano aún no está listo para convertirse en una extensión total del trumpismo ideológico.

Carolina del Sur está en la mira. Y todos los reflectores apuntan a esta batalla que podría redefinir el rumbo del conservadurismo estadounidense en la próxima década.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press