MLS al límite: ¿quién se salva y quién se hunde en la recta final del Este y el Oeste?
Un análisis de los equipos en crisis y los que aún pueden dar la sorpresa en la tabla de posiciones
Con la temporada regular de la Major League Soccer (MLS) entrando en su fase decisiva, se intensifican los enfrentamientos entre equipos que luchan por mantenerse a flote y otros que buscan apurar sus últimas esperanzas de clasificación a playoffs. Esta semana, tres partidos claves marcan el panorama de lo que se juega en los extremos de las conferencias: CF Montreal vs. Atlanta United, New England Revolution vs. D.C. United, y FC Dallas vs. Portland Timbers.
Montreal vs. Atlanta: duelo en el fondo del Este
En el Stade Saputo de Quebec, el CF Montreal (4-15-6) recibe a Atlanta United (4-11-9) en un enfrentamiento entre dos equipos inmersos en crisis. Montreal suma apenas tres victorias ante rivales de su conferencia, y su diferencia de goles de -24 es una de las peores de la liga: ha anotado 22 goles y encajado 46.
Prince-Osei Owusu ha sido la chispa ofensiva del conjunto canadiense con 11 goles y 2 asistencias, aunque poco ha podido hacer para maquillar la fragilidad defensiva. Su compañero Dante Sealy añadió 2 goles en los últimos 10 partidos, insuficiente para revertir la tendencia.
Atlanta tampoco vive un presente prometedor. Comparten la debacle del Este ubicándose 11º y con una racha reciente que apenas suma 2 victorias en los últimos 10 juegos. Emmanuel Latte Lath (7 goles), junto con Aleksey Miranchuk (3 goles en los últimos 10 partidos), tratan de llevar el peso ofensivo en un equipo que permite demasiados goles (2.1 por partido en sus últimos encuentros).
¿Qué está en juego? Más allá de los puntos, es una oportunidad para recuperar moral. La caída libre de ambos clubes es un reflejo de gestiones poco efectivas, fallos defensivos sistemáticos y falta de una identidad clara de juego.
New England Revolution vs. D.C. United: colisión de equipos desahuciados
En el Gillette Stadium, el Revolution intentará frenar una racha de tres derrotas consecutivas ante un D.C. United que también encadena derrotas y empates en un bucle sin salida (1 victoria en 10 juegos). Son 10º y 13º en el Este, respectivamente, con muy pocas posibilidades realistas de meterse en playoffs.
El Revolution, dirigido por Caleb Porter, aún conserva algunas piezas destacables, como Carles Gil (8 goles, 5 asistencias), aunque la ofensiva del equipo no ha sido suficiente para paliar las inconsistencias defensivas que le hacen encajar 2.1 goles por partido.
D.C. United, por su parte, tiene como principal figura a Christian Benteke, quien suma también 8 goles, pero el equipo promedia solo 0.9 goles por partido en sus últimos 10 encuentros, demasiado poco para ser competitivo en un torneo tan físico.
Más allá del insípido empate 1-1 en su anterior cruce esta temporada, el duelo del sábado puede representar el inicio del fin para alguno de los entrenadores de estos dos históricos clubes.
Dato curioso: D.C. United ha generado más córners (112) que New England (101), lo que evidencia una mayor presencia ofensiva a balón parado, pero con poco rédito en la red.
FC Dallas vs. Portland Timbers: esperanza vs. oportunidad
En el Oeste, la situación no es menos tensa. FC Dallas (6-11-7) lucha por no quedar descolgado de los play-in y recibe en Frisco al Portland Timbers (10-7-7), que ocupa una posición más cómoda pero todavía presionado por mantenerse en zona de clasificación directa.
Dallas llega al partido tras un refrescante empate 3-3 ante NYCFC con Logan Farrington como figura tras marcar 2 goles. Sin embargo, su campaña en la Conferencia Oeste es mediocre (5-9-4) y su diferencia de goles vuelve a inquietar: permite 2.2 goles por partido, lo cual empaña las buenas actuaciones de su goleador Petar Musa con 12 goles y 5 asistencias.
Portland, mucho más consistente, ha ganado 4 de sus últimos 10 encuentros. Con figuras como Antony (6 goles y 3 asistencias) y el apoyo en la construcción de juego por parte de David Pereira Da Costa, puede tomar ventaja en un partido que lo mantendría como aspirante firme a la postemporada.
La estadística del día: Portland es el segundo equipo con más córners generados en el Oeste (5.5 por partido), una muestra del dominio que intenta establecer desde las bandas y el balón parado.
¿El fútbol ofensivo está fracasando en la tabla?
En general, estos equipos comparten un patrón: tienen amenazas ofensivas claras, pero problemas estructurales profundos en la zaga y el medio campo. Varios de los encuentros citados han superado los 2.5 goles en apuestas recientes, pero eso no se traduce en puntos.
Para muchos analistas, eso representa una crisis de identidad futbolística. En palabras de Taylor Twellman, exjugador y voz de MLS Season Pass: "No basta con tener un goleador como Benteke o Musa si la defensa es un colador. Vemos demasiados equipos que quieren jugar como si tuvieran recursos de elite, pero no lo son".
¿Un reflejo del diseño de plantilla?
La MLS ha evolucionado, pero sigue siendo una liga en constante ajuste. Equipos como Montreal o D.C. United han apostado por fichajes económicos o promesas sin experiencia comprobada. La presión del salary cap y la falta de profundidad en el banquillo se hacen evidentes en el tramo final del campeonato.
Mientras tanto, los fanáticos buscan respuestas. En foros como /r/MLS y en redes sociales como X (antes Twitter), se multiplican los reclamos: "¿Por qué seguimos teniendo temporadas mediocres año a año?", se pregunta un hincha de DC desde hace más de una década.
Lo que viene
Estos tres partidos pueden marcar un antes y un después para algunos proyectos técnicos. El fracaso de alcanzar la postemporada suele significar reestructuraciones internas, despidos y movimientos en el mercado.
Por lo pronto, el sábado es un termómetro: si Montreal, DC y Dallas no logran resultados positivos, podrían verse condenados antes de cerrar agosto. En cambio, una victoria de Atlanta o Portland les podría dar un impulso clave para pelear entre los siete primeros o al menos acceder a los playoffs vía repechaje.
La MLS ha demostrado ser impredecible, competitiva y dinámica. Pero en este punto de la temporada, hay poco margen para los errores. Cada gol cuenta. Cada punto podría marcar la diferencia.