Hall & Oates: El ocaso amargo de una de las duplas más exitosas del pop

Tras décadas de éxitos, la icónica pareja musical Daryl Hall y John Oates se separa envuelta en demandas, traiciones y un proceso de arbitraje confidencial

Un dúo inseparable... hasta que ya no lo fue

Durante cinco décadas, Daryl Hall y John Oates dominaron las listas de popularidad con una fusión irresistible de soul, rock y pop. Clásicos como "Maneater", "Rich Girl" y "Kiss on My List" sellaron su lugar en la historia de la música como el dúo más vendido de todos los tiempos. Pero detrás de los escenarios y los coros pegajosos, se gestaba un conflicto latente que, en 2023, estalló en una amarga batalla legal que pondría fin, quizás definitivo, a su sociedad creativa.

La demanda que lo cambió todo

En noviembre de 2023, Daryl Hall interpuso una demanda contra su socio John Oates, acusándolo de intentar vender su parte de la empresa conjunta Whole Oats Enterprises LLP a la firma de inversión Primary Wave IP, sin consultarlo previamente. Hall calificó esta acción como "la máxima traición dentro de una sociedad".

La empresa en cuestión no era poca cosa. Whole Oats Enterprises controla derechos vitales de su legado: marcas registradas, los nombres e imágenes de ambos artistas, ingresos por regalías discográficas y activos digitales como páginas web y redes sociales personales.

Un proceso confidencial y una amistad rota

Tras la demanda, un juez de Tennessee ordenó la suspensión inmediata de la venta para permitir un proceso de arbitraje privado. Este proceso recientemente llegó a su fin, según un nuevo expediente judicial presentado en julio de 2024, aunque el contenido del acuerdo permanece, al igual que el conflicto entre ambos artistas, bajo discreción.

La situación fue descrita como "profundamente dolorosa" por Oates, quien negó categóricamente las acusaciones de Hall. Pero las declaraciones públicas distaban de reconciliación. En febrero de este año, Hall declaró en una entrevista con Los Angeles Times: “Ese barco ya se hundió”. Y agregó: “He tenido muchas decepciones y traiciones en mi vida, así que ya estoy acostumbrado”.

Cuando las bandas rompen en público

La historia de Hall & Oates se suma a una amarga tradición de rupturas icónicas en la música. Desde los enfrentamientos de Roger Waters y David Gilmour en Pink Floyd hasta la guerra mediática entre los hermanos Noel y Liam Gallagher de Oasis, los desacuerdos creativos y financieros han sido un denominador común en grandes bandas. En una lista elaborada por Rolling Stone en 2022, Hall & Oates no estaban mencionados, pero ya apuntaban signos de agotamiento.

Lo que diferencia el caso de Hall y Oates es que durante décadas se mantuvieron distantes de escándalos públicos. En declaraciones anteriores, ambos presumían de una sólida división laboral y una amistad respetuosa. Pero, como muchas sociedades de largo plazo, las fricciones internas ocultas terminaron floreciendo con fuerza ante temas de herencia, control y monetización del legado artístico.

La importancia del catálogo de Hall & Oates

Puede parecer extraño que dos artistas de edad avanzada entren en conflicto por venta de derechos. Pero el valor comercial del legado musical ha crecido exponencialmente en la última década. Firmas como Primary Wave y Hipgnosis han invertido cientos de millones en adquirir catálogos de artistas como Bob Dylan, Neil Young, Bruce Springsteen y Shakira.

Según la firma Music Business Worldwide, el valor medio de grandes catálogos musicales aumentó más de un 30% entre 2020 y 2023, motivado por su potencial de uso en series, películas, videojuegos y campañas publicitarias. Whole Oats Enterprises representa decenas de millones en ingresos futuros y control sobre uno de los catálogos más reconocibles del pop estadounidense.

¿Reconciliación imposible?

En entrevistas por separado, ambos artistas han dejado claro que una reunión está fuera de sus planes. Oates afirmó tajante que no ve una reunión “ni ahora ni nunca”. Y Hall abunda entre líneas en una profunda herida emocional. Es un cierre amargo para una dupla que desde su formación en Filadelfia en los años 60 forjó no solo un estilo, sino casi un credo musical propio.

Incluso durante sus carreras en solitario, Hall y Oates continuaron girando juntos hasta 2022. Su última gran gira, marcada por su habitual química en escena, no auguraba el final tan turbulento que vendría. En retrospectiva, ese tour bien puede leerse como su despedida no anunciada.

El eterno dilema del legado musical

Más allá del caso Hall & Oates, este episodio plantea una cuestión mayor en la industria: ¿quién debe controlar el legado artístico? ¿Los creadores originales, sus herederos, empresas externas o fondos de inversión? La respuesta, cada vez más, implica tensiones legales, éticas y económicas.

En palabras del analista musical Alan Light en Variety: “Estamos viendo no solo ventas de catálogos, sino disputas entre artistas vivos por cómo preservar su identidad musical en el futuro. Es una batalla por el alma del arte.”

Para los fans, un duelo inevitable

Los seguidores de Hall & Oates crecen ahora con el peso de una verdad irreconciliable: quizás nunca más vuelvan a verlos juntos en un escenario. La música está ahí, imperecedera. Pero la magia del dúo en acción ya parece cosa del pasado.

Y así, otro capítulo se escribe en las páginas de la historia del pop. Uno de decepción, traición y silencios definitivos, donde ni siquiera la armonía perfecta de dos voces inmortales pudo evitar lo inevitable: el adiós a Hall & Oates.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press