Joe Milton, el nuevo experimento de los Cowboys: ¿genio en bruto o apuesta arriesgada?

El joven quarterback busca convertirse en el heredero de Dak Prescott, pero sus errores y virtudes lo convierten en el centro del debate en Dallas

Una nueva era posible para Dallas

La pretemporada de la NFL siempre trae consigo una variedad de historias: jugadores luchando por asegurar un lugar en la plantilla, jóvenes promesas tratando de impresionar a sus coaches y entrenadores evaluando cada movimiento con la precisión de un cirujano. Joe Milton, el nuevo quarterback de los Dallas Cowboys, es la más reciente apuesta del equipo tejano, y sus primeras actuaciones en esta pretemporada han generado un debate candente sobre su verdadero potencial y lo que podría aportar a una franquicia que sigue soñando con volver a su época dorada.

Un comienzo complicado, pero prometedor

El debut de Milton ante los Los Angeles Rams no estuvo exento de dificultades. Terminó el partido con 17 pases completados de 29 intentos para 143 yardas, un touchdown y una intercepción, sumando además 22 yardas por tierra en cinco acarreos. Números sólidos para un novato en pretemporada, pero que no reflejan del todo las sensaciones mixtas que dejó en el campo.

El inicio fue particularmente duro. Falló cuatro de sus primeros seis pases, y los dos que completó sólo sumaron una yarda. Según el coordinador ofensivo de los Cowboys, Brian Schottenheimer, fue una mala decisión suya pedirle a Milton que comenzara lanzando tanto: "Estaba sobreexcitado. Quería salir al campo y comerse el mundo", admitió.

El brazo de Favre... con pies de Allen

Una de las comparaciones más atrevidas que ha hecho Schottenheimer es que el brazo de Milton "se parece al de Brett Favre". De hecho, uno de los momentos más impactantes del partido fue un pase profundo que forzó una penalización de 51 yardas por interferencia. Su capacidad para lanzar con potencia es evidente, pero como bien señaló su coach, eso puede ser tanto una bendición como una maldición.

Su movilidad también generó comparaciones con Josh Allen, algo que, si bien suena halagador, también pone presión sobre sus hombros. Intentó extender jugadas con sus piernas y, en ocasiones, se quedó demasiado tiempo en el bolsillo o intentó jugadas grandes en lugar de aceptar un pase corto seguro. Este tipo de comportamiento puede ser peligroso frente a defensas experimentadas.

Experiencia universitaria limitada

Milton fue seleccionado en la sexta ronda del Draft 2024 después de un paso irregular por las universidades de Michigan y Tennessee. A pesar de haber pasado seis años en el college football, sólo fue titular en una temporada completa. No obstante, su inicio prometedor con los Patriots, donde completó más del 75% de sus pases y corrió para un touchdown en su único inicio en la NFL, le ganó la atención de los Cowboys, quienes concretaron un traspaso por él en abril de este año.

¿La competencia es real?

En teoría, Milton está compitiendo por el segundo puesto detrás de Dak Prescott contra Will Grier, un veterano del sistema y bien conocido por Schottenheimer. Sin embargo, mientras Milton jugó la mayor parte del encuentro frente a los Rams, Grier apenas vio minutos, lo cual podría sugerir una ligera preferencia por priorizar la evolución de Milton.

"No es algo negativo contra Will Grier", dijo Schottenheimer. "Lo conozco desde hace años. Sabemos lo que puede hacer. Ahora queremos saber qué más puede ofrecer Joe".

Grier, por su parte, aprovechó al máximo sus limitadas oportunidades y anotó un touchdown por tierra en su único drive. En los entrenamientos conjuntos con los Rams, también mostró su efectividad al relevar a Milton después de una lesión en el pulgar.

Brian Schottenheimer y el dilema del desarrollo

El coordinador ofensivo de los Cowboys ha mostrado paciencia y comprensión ante el proceso de adaptación de Milton. Ha insistido en que está "aprendiendo qué funciona y qué no funciona con él". Y no es para menos: desarrollar un quarterback talentoso pero crudo puede significar la diferencia entre una temporada mediocre y un futuro brillante.

La NFL está repleta de historias de pasadores con dotaciones físicas impresionantes que nunca consolidaron su carrera, así como otras de jugadores ignorados por el radar que se convirtieron en leyendas. Milton se encuentra en ese delgado filo entre ambos mundos, y su desarrollo dependerá tanto de su disciplina como del entorno que lo rodea.

La anatomía de un riesgo calculado

Seleccionar a Joe Milton en la sexta ronda es la definición pura de "riesgo calculado". Si bien el historial muestra que apenas el 10% de los jugadores seleccionados en dicha ronda se convierten en titulares consistentes en la NFL (según Pro Football Reference), las condiciones físicas de Milton lo hacen una rareza que bien vale ser explorada hasta el límite.

La franquicia de Dallas históricamente ha sentido atracción por los quarterbacks con personalidad fuerte, desde Roger Staubach hasta Tony Romo. Con Milton, tienen a un joven con un cañón de brazo, movilidad natural, y, sobre todo, hambre de demostrar que puede ser "el siguiente". La pregunta es: ¿serán capaces los Cowboys de canalizar su potencial antes de que los errores lo entierren?

La presión de la afición y la nostalgia por el pasado

Dak Prescott ha sido el QB titular desde 2016, siendo un jugador consistente pero criticado por su rendimiento en juegos de playoffs. Esto ha generado un clima de impaciencia en Dallas, donde parte de la afición ve en Milton un posible relevo rejuvenecido con estilo explosivo y temerario, algo más emocionante que lo que Prescott ha ofrecido últimamente.

No es raro que las comparaciones ya comiencen a surgir, especialmente si Prescott tiene un comienzo flojo en la temporada regular. Pero lanzar a un jugador como Milton al ruedo sin que termine su curva de desarrollo puede ser contraproducente. Pregúntenle a los Jets con Zach Wilson, por ejemplo.

¿Qué esperar en los próximos juegos?

Los dos partidos que restan en la pretemporada serán clave para definir los planes del equipo. Está claro que Brian Schottenheimer planea seguir dando a Milton la mayoría de los snaps, tanto para mejorarlo como para evaluar si realmente puede ser el mariscal de campo número 2, un rol vital en caso de una eventual lesión de Dak.

Milton deberá mostrar más consistencia. Tiene que aprender a leer defensas con calma, no confiar tanto en su brazo y tomar decisiones más rápidas. Sus condiciones físicas le permiten un margen de error amplio, pero no infinito.

El próximo enfrentamiento será contra los Houston Texans, otro equipo en reconstrucción, que representa un campo de pruebas interesante. Si Milton logra una actuación sólida, incluso podría presionar a Prescott desde la banca. Pero si repite los errores de su primer encuentro, las alarmas volverán a sonar.

Un diamante por pulir

Joe Milton es todo lo que un equipo desea encontrar en una ronda baja del Draft: una apuesta con alto techo, aunque envuelta en incertidumbre. Pocas veces se habla de los mariscales de campo como "proyectos" en la NFL actual, pero precisamente eso es lo que representa esta joven promesa para los Cowboys.

“Joe es un competidor increíble, con un futuro brillante”, repitió Schottenheimer durante su comparecencia. Y en una liga que celebra tanto el espectáculo como los resultados, sólo el tiempo dirá si Milton se convertirá en otra historia olvidada… o en la leyenda silenciosa que los Cowboys han estado esperando.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press