El influencer varado en la Antártida: ¿Héroe de la juventud o imprudente mediático?

Ethan Guo, piloto de 20 años atrapado en la Antártida, desafía a las autoridades chilenas y las reglas aeronáuticas en su búsqueda de un récord mundial

Por más de seis semanas, la historia del joven piloto e influencer estadounidense Ethan Guo ha capturado la atención de numerosos medios alrededor del mundo. Su odisea lo llevó desde un sueño altruista hasta un enfrentamiento legal con un país, todo en uno de los lugares más inhóspitos del planeta: la Antártida.

El viaje de un récord: volar solo a los siete continentes

Ethan Guo, un joven piloto de 20 años, se embarcó en una ambiciosa travesía con múltiples objetivos: convertirse en la persona más joven en volar solo a los siete continentes y recaudar fondos para la investigación contra el cáncer infantil.

Guo ya era conocido en redes sociales por documentar su viaje a bordo de una pequeña aeronave monomotor, donde combinaba contenido de viajes con reflexiones personales. Hasta ese punto, el proyecto parecía ser una historia inspiradora más de superación juvenil. Pero todo cambió tras su llegada a la base aérea Teniente Marsh en la Antártida chilena.

El incidente: aterrizaje no autorizado y una tormenta legal

El avión de Ethan partió desde Punta Arenas con dirección a Ushuaia, Argentina. Sin embargo, según el joven, condiciones climáticas severas y fallos en los instrumentos lo obligaron a desviarse. Solicitó, sostiene su defensa, autorización vía WhatsApp a un oficial de la Dirección General de Aeronáutica Civil de Chile (DGAC) para aterrizar en la base antártica.

La respuesta afirmativa se le habría dado, incluso con confirmación por parte del controlador aéreo presente en la base. A pesar de eso, el 29 de junio las autoridades chilenas lo acusaron de presentar un plan de vuelo falso y de poner en riesgo el tráfico aéreo global.

“Lo que los antecedentes indican es que siempre tuvo la voluntad y el conocimiento de que deseaba llegar a la Antártida a toda costa...”, dijo el fiscal chileno Cristián Crisosto, acusándolo además de haber engañado deliberadamente a las autoridades.

¿Error humano o desobediencia consciente?

El caso ha desatado un mar de opiniones. Algunos consideran a Guo como un joven audaz y apasionado que actuó bajo presión extrema para salvar su vida. Otros lo ven como un influencer imprudente que antepuso su ego y notoriedad en redes a regulaciones aeronáuticas y diplomáticas.

“Mi cliente informó a la DGAC del cambio en el plan de vuelo tan pronto como fue posible... y recibió autorización expresa para aterrizar”, afirmó su abogado Jaime Barrientos en los documentos entregados a la corte.

Aunque las autoridades inicialmente lo acusaron formalmente, el pasado lunes un juez chileno suspendió los cargos mediante un acuerdo que incluye una donación de 30,000 dólares a una fundación contra el cáncer infantil y la prohibición de ingresar a territorio chileno por tres años.

El peso de las redes sociales: ¿facilitador o arma de doble filo?

El caso Guo refuerza cuestiones ya debatidas en nuestra sociedad digital: ¿hasta qué punto la influencia mediática protege o aplasta a quienes la poseen? Su popularidad atrajo apoyo y abogados rápidamente, pero también lo convirtió en blanco de titulares negativos y escepticismo oficial.

Desde que comenzó su aventura, Guo acumuló cientos de miles de seguidores. Muchos lo comparan con jóvenes como Zara Rutherford, quien en 2022 completó con éxito un vuelo en solitario alrededor del mundo a los 19 años. La diferencia crucial está en la adherencia a la reglamentación internacional.

Antártida: desafíos extremos y restricciones legales

La Antártida no es tierra de turismo improvisado. Cualquier vuelo al continente requiere autorizaciones internacionales, planificación de emergencia y control estricto por parte de los países signatarios del Tratado Antártico, donde Chile tiene varios enclaves científicos y presencia militar.

Guo se mantuvo en la base porque las condiciones invernales imposibilitaron vuelos hasta mediados de agosto. Su avión, afirmaron fiscales y expertos en aviación, “probablemente no cumpla con las normas para volar fuera de la Antártida” y tal vez deba ser desmantelado para regresar al continente.

Apoyo juvenil y condena institucional

Pese a los cargos, Ethan recibió manifestaciones de apoyo de numerosos jóvenes en redes, quienes elogian su determinación y valentía. “Es un modelo a seguir para la juventud que busca cambiar el mundo con buenas acciones”, dijo una seguidora en TikTok.

Pero instituciones aeronáuticas, como la Federación Internacional de Aviación, han sido más críticas: “Cuando uno vuela en zonas tan peligrosas como la Antártida, se deben seguir reglas estrictas. Las redes sociales no son excusa para ignorarlas”.

La historia aún no termina

Por ahora, Ethan Guo deberá salir de Chile en cuanto las condiciones se lo permitan. Su avión, según el fiscal Crisosto, probablemente “saldrá de la Antártida en piezas”. Mientras tanto, continúa defendiendo su inocencia y argumentando que la autorización para aterrizar fue legítima.

Su experiencia, aunque esté manchada por la controversia, ya forma parte de las historias modernas sobre la tensión entre la fama digital, las normas globales y el valor juvenil.

No deja de ser irónico que el piloto que quería juntar continentes, terminó dividiendo opiniones alrededor del mundo.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press