Zelenskyy, Trump y el teatro de la diplomacia: ¿se acerca el fin de la guerra en Ucrania?
Entre agradecimientos forzados, promesas ambiguas y sonrisas calculadas, la reciente reunión en la Casa Blanca pone en foco los verdaderos obstáculos para la paz en Ucrania
La diplomacia del "gracias": un cambio de estrategia de Zelenskyy
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, aprendió una lección política en carne propia tras su desastrosa reunión en febrero con el presidente estadounidense Donald Trump. En aquel entonces, fue reprendido públicamente por el vicepresidente JD Vance por no expresar suficiente gratitud hacia los esfuerzos estadounidenses para frenar la invasión rusa. Esta vez, Zelenskyy no dejó espacio a críticas: agradeció a Trump nueve veces en el primer minuto de su intervención en la Oficina Oval.
No fue casualidad. El tono y la forma fueron cuidadosamente calibrados. "Gracias por la invitación y por sus esfuerzos personales para detener las muertes", dijo repetidamente. Incluso agradeció a Melania Trump por una carta escrita a Putin solicitando tener en cuenta a los niños ucranianos en medio de la guerra. Esta nueva estrategia, bautizada por algunos analistas como “diplomacia de gratitud”, busca calmar las aguas y asegurar una postura favorable del impredecible presidente estadounidense.
Europa se une con un mensaje claro, pero sin un plan sólido
La reunión de esta semana no fue solo entre Trump y Zelenskyy, sino también un ejercicio de cohesión transatlántica. Líderes europeos como el canciller alemán Friedrich Merz, el primer ministro británico Keir Starmer y el presidente francés Emmanuel Macron se sumaron a las conversaciones en Washington, buscando presentar una imagen de unidad frente a Rusia.
Sin embargo, más allá de las sonrisas y declaraciones positivas, los avances concretos fueron escasos. "Superó mis expectativas", dijo Merz, pero admitió que seguían sin resolverse los principales obstáculos que impiden un acuerdo de paz.
Uno de los puntos cruciales es la creación de garantías de seguridad para Ucrania si se alcanza un acuerdo de paz. Zelenskyy insiste en que su país necesita un ejército fortalecido, apoyado militar y logísticamente por Occidente. Se ha planteado incluso una alianza de defensa similar al Artículo 5 de la OTAN, pero sin ofrecer claridad sobre su ejecución.
¿Participará EE.UU. directamente en la defensa de Ucrania?
Europa quiere que Estados Unidos se comprometa más allá de la "coordinación" prometida por Trump. Según reportes, una coalición de 30 países, incluyendo a Japón y Australia, estaría dispuesta a apoyar esta iniciativa. Pero Rusia, de antemano, ha rechazado tajantemente cualquier posibilidad de presencia de tropas de la OTAN en suelo ucraniano.
Trump ha sido ambiguo: por un lado, dice apoyar la protección de Ucrania; por otro, se niega a comprometer tropas estadounidenses. Esta ambigüedad puede resultar costosa, ya que el tiempo corre a favor de Moscú, cuyas fuerzas avanzan lentamente en el terreno.
¿Un alto al fuego realista?
Mientras Ucrania y sus aliados piden un cese al fuego como condición previa para negociaciones de paz, Putin parece no estar dispuesto a frenar su avance. Después de años de estancamiento bélico, un alto al fuego podría consolidar los territorios tomados por Rusia y dar lugar a una situación geopolítica congelada durante décadas, similar a Corea del Norte y del Sur.
Aunque Trump inicialmente amenazó con “consecuencias severas” si Rusia no aceptaba un cese al fuego, terminó rebajando su postura al referirse a él como “innecesario”. Sin embargo, tras las reuniones con los líderes europeos, volvió a suavizar su tono: “todos preferimos, obviamente, un cese al fuego inmediato mientras trabajamos en una paz duradera”. ¿Cambio de rumbo o simple estrategia de negociación?
Territorios ocupados: ¿una moneda de cambio para la paz?
Actualmente, Rusia controla aproximadamente el 20% del territorio ucraniano, incluyendo Crimea, regiones del Donbás y otras zonas estratégicas. Putin habría exigido reconocimiento de estas posesiones como parte de cualquier acuerdo.
Zelenskyy insiste en que la constitución de Ucrania prohíbe ceder territorio y que hacerlo no haría más que alentar a Rusia a seguir avanzando en el futuro. A pesar de esto, la posibilidad de una "paz territorial" no fue discutida a fondo en Washington, ya que los europeos prefieren dejar que este tema lo negocien directamente Putin y Zelenskyy.
¿Se reunirán Putin y Zelenskyy cara a cara?
La idea de una reunión directa entre los líderes de Rusia y Ucrania está sobre la mesa, impulsada por Trump. El expresidente comunicó en redes sociales que ya habría iniciado gestiones para organizar un encuentro presencial entre ambos mandatarios, reservándose a unirse luego como mediador.
Pero desde Moscú, el asesor de Putin, Yuri Ushakov, negó que haya un acuerdo sobre tal encuentro. Los expertos europeos, como Janis Kluge del Instituto Alemán para Asuntos Internacionales y de Seguridad, creen que el objetivo es poner a Putin en la posición de tener que rechazar la oportunidad, exponiéndolo como el principal obstáculo para la paz.
El peso político de Trump en el conflicto
Tras varios años de guerra y una nueva campaña presidencial en marcha, Trump se muestra como un “hombre de paz”, capaz, según Starmer, de acercar el conflicto a su fin como nadie más. Esto explica las múltiples muestras de gratitud y halagos de todos los asistentes hacia el expresidente estadounidense.
En un mundo donde lo simbólico tiene tanto peso como lo práctico, los líderes europeos y Zelenskyy jugaron perfectamente su papel. Agradecieron, sonrieron y escucharon. Y aunque no hubo acuerdos concretos, el solo hecho de alinear a las potencias democráticas frente a Rusia ya supone un tablero diplomático mejor que el de hace seis meses.
Como escribió Kluge en X: "Los europeos exageran las expectativas para forzar a Putin a decepcionarlas". El teatro continúa, pero en la escena final, aún falta un actor clave por entrar: Vladímir Putin.