El legado inmortal de Hulk Hogan: Más allá del ring y la polémica

La muerte del ícono de la lucha libre sigue generando preguntas, pero su impacto en la cultura popular es eterno

Hulk Hogan: un nombre grabado con letras doradas en la historia de la lucha libre

Terry Bollea, mejor conocido por su nombre artístico Hulk Hogan, fue mucho más que un luchador profesional. Fue un símbolo cultural, una figura icónica que trascendió los cuadriláteros para convertirse en un fenómeno mundial. Desde su primer combate hasta su aparición estelar en WrestleMania, Hogan fue durante décadas el alma y rostro de la WWE (World Wrestling Entertainment).

El inconfundible carisma de Hogan

Hogan nació el 11 de agosto de 1953 en Augusta, Georgia. En los 80 y 90, su figura imponente, su característica camiseta amarilla y sus cejas arqueadas lo convirtieron en una superestrella global. Los lemas como "Whatcha gonna do when Hulkamania runs wild on you?" se volvieron parte del léxico pop del estadounidense promedio, y los niños de todo el mundo imitaban su famoso movimiento de "copa de oído".

Más allá de su poder físico, lo que convirtió a Hogan en una leyenda fue su impacto mediático. Protagonizó películas, lanzó álbumes musicales, vendió figuras de acción y tuvo incluso su propio reality show, Hogan Knows Best, en 2005.

El primer gran ídolo de la WWE

Hogan se convirtió en el buque insignia de la WWF (ahora WWE) cuando Vince McMahon decidió apostar por un show de proporciones épicas. WrestleMania I, en 1985, fue el primer gran evento de lucha libre profesional que mezcló celebridades, espectáculo y deporte, redefiniendo la industria del entretenimiento.

Su rivalidad con André The Giant, especialmente su combate en WrestleMania III en 1987 ante más de 93,000 personas en el Pontiac Silverdome, es considerada todavía una de las más icónicas en la historia del deporte espectáculo.

La transformación en villano y regreso como héroe

En los años 90, Hogan reinventó su personaje en la WCW al volverse heel (el villano). Integrando el grupo NWO (New World Order), dejó de ser el eterno héroe para adoptar una estética rebelde y oscura, lo que revitalizó su carrera y atrajo a una nueva ola de fanáticos. Fue el primer luchador en operar con éxito en ambos extremos del espectro moral del wrestling.

Controversias y caída en desgracia

Sin embargo, su figura no estuvo exenta de polémica. En 2015, fue removido del Salón de la Fama luego de que se hicieran públicos unos comentarios racistas en unas grabaciones privadas. Hogan pidió disculpas públicamente y fue readmitido en 2018. Desde entonces, sus apariciones fueron contadas, aunque su influencia nunca desapareció por completo.

Una despedida que deja incógnitas

El pasado 24 de julio, el mundo presenció el fallecimiento de Hulk Hogan a los 71 años. Según el informe del forense, se trató de un paro cardíaco, después de una larga lucha contra la leucemia y problemas de arritmia. La familia y los fanáticos quedaron impactados, aunque no se encontraron evidencias de juego sucio.

La policía de Clearwater aún está recopilando declaraciones y registros médicos. El hecho de que el funeral haya sido privado, y que incluso la hija del luchador, Brooke Hogan, haya considerado financiar personalmente una autopsia independiente, ha dado pie a una ola de especulaciones.

Más que un luchador, una figura cultural

Hogan fue pionero en llevar la lucha libre al nivel del mainstream cultural. Participó en películas como Rocky III y tuvo cameos en series populares. Su influencia incluso se extendió a la política, apoyando campañas republicanas y participando en convenciones.

Además, su firma en contratos fue clave para el crecimiento económico de la WWE. Se calcula que entre merchandising, eventos y derechos televisivos, Hogan contribuyó a generar más de 100 millones de dólares en ingresos para la empresa solo durante la década de los 80. (Fuente: WWE Corporate Financial Archives)

Una huella que perdura en generaciones

En la era actual, donde nuevos rostros como Roman Reigns o Cody Rhodes dominan el cuadrilátero, el legado de Hogan permanece como una vara de medición para las superestrellas. La "hulkamanía" trasciende décadas, generaciones y controversias.

En palabras del actual presidente de la WWE, Nick Khan: “Sin Hogan, no habría WWE como la conocemos”.

¿Qué sigue para el legado Hogan?

Muchos se preguntan si en algún momento se estrenará una biopic o serie documental de gran profundidad sobre su vida. Netflix tenía previsto desarrollar un proyecto biográfico protagonizado por Chris Hemsworth, pero el proyecto ha quedado en pausa. Hoy más que nunca, el mundo parece listo para reflexionar sobre lo que Hogan representó: la lucha entre el héroe mítico y el ser humano falible.

Una despedida con sabor a eternidad

El legado de Hogan no pertenece exclusivamente a la WWE ni a sus millones de fanáticos. Pertenece a la cultura popular global. En un mundo donde los héroes son escasos, Hogan ofreció durante décadas fantasía, fuerza e inspiración. Su vida, marcada por triunfos y caídas, es un testimonio eterno de lo que significa ser una leyenda.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press