África quiere corregir el mapa: la verdadera dimensión de un continente oculto

Una campaña encabezada por activistas africanos impulsa el uso de proyecciones geográficas precisas para restaurar la imagen distorsionada del continente más joven y poblado del planeta

La batalla por la representación cartográfica

La cartografía, más que una herramienta científica, es también una poderosa forma de comunicación. Durante siglos, los mapas han ayudado a descubrir rutas, definir fronteras e influido en la percepción del mundo. Pero, ¿qué pasa cuando esa percepción está distorsionada intencionadamente?

Desde abril de 2024, se ha intensificado una campaña liderada por grupos de defensa africanos como Africa No Filter y Speak Up Africa, para reemplazar el uso de la proyección Mercator, aún común en aulas y aplicaciones tecnológicas, por la proyección Equal Earth, una alternativa actual y más precisa que muestra los continentes en sus proporciones reales. La campaña ya ha sumado a un peso pesado: la Unión Africana, que representa los 55 países del continente, anunció su respaldo formal el 14 de agosto.

¿Por qué importa el tipo de mapa que usamos?

Los mapas no son neutrales. El tipo de proyección que se utilice puede alterar drásticamente la percepción del tamaño y, por ende, la importancia de un territorio. La proyección Mercator, creada en 1569 por el cartógrafo flamenco Gerardus Mercator, fue diseñada para ayudar a los navegantes europeos en sus rutas marítimas. Gracias a sus líneas de rumbo recto, era ideal para la navegación, pero distorsionaba significativamente las proporciones reales, inflando las masas terrestres cercanas a los polos (como Europa y Norteamérica) y reduciendo notablemente el tamaño de regiones ecuatoriales como África y Sudamérica.

En contraste, la proyección Equal Earth, desarrollada en 2018 por científicos del Boston College y la Universidad Estatal de Oregón, representa a los continentes con una escala más realista, siguiendo la curvatura de la Tierra.

La subestimación histórica de África

En los mapas Mercator, Groenlandia aparece casi del mismo tamaño que África, cuando en realidad África es casi 14 veces más grande. África tiene una superficie de más de 30 millones de kilómetros cuadrados, lo que la hace más extensa que China, Estados Unidos, Europa Occidental, India y Argentina juntos. Sin embargo, su imagen en los mapas ha contribuido, durante siglos, a minimizar su relevancia.

“Corregir el mapa no es solo un asunto africano. Es una cuestión de verdad y precisión que afecta a todo el mundo”, declara Fara Ndiaye, cofundadora de Speak Up Africa. Añade que esta distorsión ha contribuido a una imagen sesgada en la que África se percibe como marginal, cuando en realidad ocupa un lugar estratégico y fundamental en el equilibrio global del siglo XXI.

Una imagen distorsionada, una historia manipulada

La distorsión no es una cuestión menor: desde la colonización hasta las dinámicas económicas globales, África ha sido históricamente invisibilizada o reducida. Esa visión se refuerza en la educación cuando se usa un mapa donde África parece "menos" que otros lugares.

El académico Mark Monmonier, profesor emérito de geografía en la Universidad de Syracuse, ha señalado que el uso del Mercator en el aula “carece de justificación hoy en día fuera del ámbito marítimo” y que ha perpetuado una visión eurocéntrica del mundo. Además, Monmonier advierte que “cuando una generación entera crece viendo a África tan reducida, interioriza la idea de que el continente también es menos importante económica o culturalmente”.

Una campaña con impacto global

La campaña impulsada por los grupos africanos se llama Change The Map. La meta es clara: llevar el mapa Equal Earth a las escuelas del continente y presionar a organismos internacionales, medios de comunicación e incluso plataformas como Google Maps, que aún mantienen la proyección Mercator en sus aplicaciones móviles, para que adopten proyecciones más precisas.

El respaldo de la Unión Africana no solo legitima la campaña, sino que la convierte en una política del bloque. Es un raro ejemplo de unión continental en torno a una cuestión que parece técnica, pero es profundamente simbólica: quién controla la narrativa visual del mundo.

África en cifras: el gigante silenciado

  • Población: más de 1.400 millones de personas en 2024.
  • Edad promedio: 19 años (el continente más joven del planeta).
  • Riqueza en recursos: alberga más del 30% de los recursos minerales del mundo, incluyendo cobalto, uranio, oro, petróleo, tierras raras y más.
  • Diversidad lingüística: más de 2.000 idiomas hablados.
  • Proyección futura: según la ONU, África albergará a 1 de cada 4 personas en el mundo para el año 2100.

A pesar de estas cifras impresionantes, la imagen minimizada de África en los mapas ha servido para justificar políticas de indiferencia económica y geopolítica. Como afirma la activista senegalesa Aissatou Diop: “Cuando reduces visualmente un continente, también reduces su peso político”.

Los mapas como herramienta colonial

Durante la época de la colonización europea, los mapas eran artefactos de poder. No se trataba solamente de mostrar el planeta, sino de representarlo de una forma que reforzara el dominio colonial. La desproporción de África en la cartografía fue funcional a estos intereses.

Incluso hoy en día, organizaciones internacionales siguen usando la proyección Mercator, dándole una apariencia de neutralidad que no existe. La campaña Change The Map busca romper con esa tradición.

¿Qué se puede hacer desde fuera de África?

Los activistas piden a los gobiernos occidentales y especialmente a las escuelas e instituciones educativas que abandonen el uso del Mercator. Expertos en educación, como el geógrafo Denis Wood, han propuesto también utilizar otros medios visuales como gráficos comparativos o globos físicos, que permiten una mejor comprensión de las verdaderas proporciones geográficas.

A nivel individual, los usuarios pueden optar por mapas alternativos o usar apps de geografía que incorporan el Equal Earth o la proyección Peters. Herramientas como The True Size permiten comparar directamente el tamaño real de los países.

Más allá de la geografía: un acto de dignidad

Corregir los mapas, en palabras de Ndiaye, no es solo una cuestión técnica. Es un acto de justicia: “Se trata de otorgar a nuestro continente la dignidad que merece”. En un mundo donde la imagen lo es todo, la campaña busca devolverle a África el espacio que le corresponde en la mente colectiva global.

Si África va a ser protagonista del futuro —por su juventud, recursos, cultura y talento—, el mundo necesita dejar de verla desde la sombra de una proyección gaussianamente errónea.

“Hasta que no se cambien los mapas, no cambiará tampoco la historia que nos contamos sobre nosotros mismos y sobre los otros”, concluye la activista sudafricana Noma Dlamini.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press