Davide Ancelotti y el golpe de realidad en la Copa Libertadores: Liga de Quito elimina a Botafogo
El hijo del legendario técnico Carlo Ancelotti vive su primer gran traspié como entrenador principal tras la sorpresiva eliminación ante el club ecuatoriano
Un debut agridulce para Davide Ancelotti
La Copa Libertadores nunca deja de sorprender, y esta vez, el protagonista fue Davide Ancelotti, hijo del legendario técnico italiano Carlo Ancelotti. Con apenas unos meses como entrenador principal, Davide asumió el mando de Botafogo, uno de los clubes más importantes de Brasil, con la ambiciosa misión de revalidar el título continental. Su camino, sin embargo, fue abruptamente interrumpido por un sólido equipo ecuatoriano: Liga Deportiva Universitaria de Quito.
Una serie que parecía controlada
El equipo brasileño llegaba con ventaja al partido de vuelta después de haber vencido por 1-0 a Liga en el Estadio Nilton Santos de Río de Janeiro. La expectativa era que Botafogo, campeón defensor y dirigido por una joven promesa del banquillo, sellara el pase sin mayores complicaciones. Sin embargo, la altura de Quito y el ímpetu de un equipo histórico como Liga de Quito cambiaron el guión por completo.
En el estadio Rodrigo Paz Delgado, Gabriel Villamil abrió el marcador al minuto 7, encendiendo la esperanza ecuatoriana. Ya en el segundo tiempo, Lisandro Alzugaray convirtió un penal al minuto 60 que puso el global 2-1 a favor de Liga. Botafogo no encontró respuestas, y el sueño de Davide Ancelotti se esfumó rápidamente.
Davide Ancelotti: una figura en construcción
Apenas tiene 35 años, y esta fue su primera experiencia como entrenador en solitario. Davide ha sido la sombra de su padre en clubes como el Bayern Múnich, Napoli, Everton y Real Madrid. Además, forma parte del cuerpo técnico de la selección brasileña, donde su padre es actualmente uno de los asesores estratégicos.
La decisión del dueño de Botafogo, John Textor, de darle las riendas del club después de destituir a Renato Paiva, fue vista como arriesgada por muchos. La eliminación en el Mundial de Clubes había dejado mal sabor en la dirección, y se optó por entregar el timón al joven Ancelotti, quien firmó contrato hasta 2026.
LDU: un viejo zorro continental
La clasificación de LDU no debería sorprender. Estamos hablando del único equipo ecuatoriano que ha ganado la Copa Libertadores, en 2008, bajo el mando del técnico argentino Edgardo Bauza. Además, es habitual protagonista en torneos internacionales. Su experiencia en estas instancias fue más que evidente ante un Botafogo que aún no logra consolidar una identidad sólida pese a haber conquistado el trofeo el año pasado.
El factor altura: una barrera implacable
Uno de los elementos diferenciales fue el efecto de los 2.850 metros de altitud de Quito. Mientras Liga está acostumbrado a jugar en esas condiciones, Botafogo llegó con lo justo físicamente. Como ocurre con frecuencia en competencias sudamericanas, la altura se transforma en un jugador más para los equipos locales.
"La altitud es algo que no puedes preparar realmente, puedes intentar simular entrenamientos, dietas... pero el cuerpo simplemente no reacciona igual", comentó un ex médico de la selección brasileña, resaltando una de las dificultades que Botafogo enfrentó.
¿Fracaso o aprendizaje?
Para Davide Ancelotti, esta eliminación representa un golpe duro, pero también una oportunidad de crecimiento. En el mundo del fútbol, los técnicos jóvenes muchas veces son atravesados por la presión de resultados inmediatos. Su padre, Carlo, comenzó también recibiendo críticas cuando debutó en Reggiana y posteriormente en Parma, antes de convertirse en el técnico más laureado de la historia de la Champions League.
Davide deberá demostrar fortaleza, aprender de este episodio y seguir puliendo su estilo. Botafogo, por su parte, deberá decidir si apuesta por un proyecto a largo plazo o si reacciona con inmediatez –una constante en el fútbol brasileño donde los técnicos tienen poca paciencia.
Lo que viene: LDU vs São Paulo
La recompensa para Liga de Quito es enfrentarse ahora a Sao Paulo FC en los cuartos de final de la Libertadores. Un cruce que promete alto voltaje por la historia y la jerarquía de ambos clubes. São Paulo es tricampeón del torneo (1992, 1993 y 2005), mientras que Liga quiere repetir la gesta de hace 16 años.
Será también un enfrentamiento entre dos estilos: la solidez defensiva que ha mostrado el equipo quiteño en esta edición frente al poder ofensivo que exhibe el conjunto paulista, dirigido por Luís Zubeldía.
Reflexión final: el peso de los nombres no gana partidos
Si algo nos enseña la historia reciente de la Copa Libertadores es que los apellidos no garantizan triunfos. Aunque Davide Ancelotti tenga uno de los nombres más respetados en el mundo del fútbol, el rectángulo verde exige algo más que linaje. Necesita experiencia, gestión emocional, adaptabilidad y eficacia. Davide tiene mucho por crecer, y este traspié quedará como parte esencial de su formación.
Como decía su padre Carlo: “Para ser entrenador necesitas cabeza fría y corazón caliente”. Ahora, el joven Ancelotti debe reacomodar sus ideas, mostrar resiliencia y seguir navegando este desafiante, pero apasionante, camino como técnico profesional.