Pretemporada NFL 2025: Luces, sombras y peleas por un lugar en el roster
Tua, Buechele, Shavers y Sanders protagonizan una vibrante jornada de ensayos en el camino a la temporada regular
Con las últimas fechas de la pretemporada NFL 2025 completadas, los focos se desvían de las grandes figuras que descansan a la espera de la temporada regular y se centran en las historias humanas, atléticas y competitivas de aquellos que juegan al borde del abismo. Desde jugadores en la cuerda floja hasta sorpresas brillantes, el fin de semana dejó una muestra fascinante de lo que implica pelear por un lugar en la liga más exigente del mundo.
La noche de Shane Buechele: una carta abierta a la NFL
El mariscal de campo Shane Buechele fue el gran protagonista en el partido entre los Buffalo Bills y los Tampa Bay Buccaneers. En ausencia del MVP reinante Josh Allen, quien no jugó en toda la pretemporada, Buechele lanzó para 278 yardas y un touchdown, completando 25 de 30 intentos. Una actuación digna de llamar la atención de otros equipos, considerando que está detrás de Allen, Mitchell Trubisky y Mike White en el orden jerárquico de Buffalo.
"Sabía que era una oportunidad única para mostrar de lo que soy capaz. No sé qué pasará, pero lo dejé todo en el campo", confesó Buechele tras el partido. Un año después de estar en la lista de lesionados, el texano dio una lección de precisión y temple.
Batallas en la trinchera: Kyle Trask vs. Teddy Bridgewater
En Tampa Bay, Kyle Trask también pujó por la atención del staff técnico. Completó 13 de 17 pases para 93 yardas y un pase de touchdown. Aunque sus números no fueron tan espectaculares como los de Buechele, su eficiencia fue notoria. El gerente general Jason Licht reveló en la transmisión oficial del equipo que la decisión entre Trask y el veterano Teddy Bridgewater como suplente de Baker Mayfield aún no está tomada.
Tyrell Shavers y un salto a lo "Odell"
El receptor abierto Tyrell Shavers hizo probablemente la mejor atrapada de la noche. Ante una cobertura pegajosa del esquinero Bryce Hall, Shavers realizó una majestuosa recepción a una mano para convertir un pase de 11 yardas en un touchdown. Fue una jugada que capturó la atención de aficionados, analistas y potencialmente de los técnicos que deciden los últimos cortes del roster.
Tensiones al límite: la expulsión de Shilo Sanders
No todo fue heroico. El safety novato Shilo Sanders, hijo del legendario Deion "Coach Prime" Sanders, fue expulsado en el segundo cuarto por lanzar un puñetazo al ala cerrada Zach Davidson. El incidente se produce en pleno proceso de corte, lo que complica aún más las aspiraciones del joven defensivo, quien también fue penalizado por interferencia de pase en el mismo partido.
Sanders no fue seleccionado en el Draft de 2025 y llegó a los Bucs gracias a su potencial. En la universidad de Colorado jugó bajo las órdenes de su propio padre y recibió elogios por su agresividad y anticipación. No obstante, las emociones se desbordaron. La repetición muestra empujones previos entre ambos jugadores hasta que Sanders pierde la compostura y lanza un golpe, dejando su futuro inmediato en entredicho.
Frank Gore Jr.: herencia y potencia
Otro apellido ilustre presente en la jornada fue el de Frank Gore Jr., hijo del legendario corredor Frank Gore. Logró un touchdown de 1 yarda y acumuló 32 yardas por tierra y 29 por recepción. Su estilo recuerda mucho al de su padre: compacto, agresivo e incansable. El joven Gore ha estado construyendo una sólida pretemporada y, dependiendo de las lesiones y los espacios, podría obtener un puesto en el roster final.
Un Tua dubitativo pero efectivo
En Miami Gardens, Tua Tagovailoa jugó sus únicos minutos de pretemporada. En tres series ofensivas llevó a los Dolphins a un touchdown, lanzó un pase de anotación de 25 yardas al receptor Malik Washington, y completó cuatro de ocho intentos. También fue capturado dos veces. A pesar de la protección inestable, su conexión con los receptores fue suficiente para mostrarse listo para la temporada.
El touchdown fue seguido por una conversión de dos puntos lanzada por Tua al ala cerrada Pharaoh Brown. Washington mostró agilidad e instinto al eludir a dos defensores en su carrera a la zona prometida. Miami venció a Jacksonville por 14-6 en un partido donde los Jaguars optaron por no alinear a sus titulares principales.
Malik Willis y Riley Leonard: sorpresas de rotación
Otros mariscales como Malik Willis (Tennessee) y el tercer string Riley Leonard (Indianapolis) firmaron actuaciones sólidas. Willis lanzó un pase de touchdown y los Packers capturaron cinco veces a Jalen Milroe, mientras que Leonard brilló con los Colts en una victoria abultada de 41-14 sobre los Bengals.
Estadísticas de impacto: regresos y patadas
- Los Buccaneers promediaron 38 yardas por devolución de kickoff, con Kameron Johnson alcanzando un retorno de 57.
- Los Bills promediaron 31.6 yardas, incluyendo una escapada de Laviska Shenault de 38 yardas.
- Una historia curiosa: el ala cerrada Zach Davidson realizó tareas de pateador debido a una enfermedad del punter Brad Robbins. Impresionó con un despeje de ¡62 yardas!
Lesiones que preocupan
En el frente médico, Tre’Davious White de los Bills sufrió una lesión en la pierna baja durante un entrenamiento previo al juego. Su tiempo de recuperación aún es incierto. El receptor Curtis Samuel tampoco participó por enfermedad.
Tampa Bay no contó con su tackle estrella Tristan Wirfs, quien se recupera de una cirugía de rodilla. El manager Licht mencionó que podría volver antes que el receptor Chris Godwin, quien sigue lidiando con una severa lesión de tobillo.
Lo que viene: la cuenta regresiva
La temporada regular inicia oficialmente el 7 de septiembre. Los Bills recibirán a los Ravens en “Sunday Night Football”, mientras que Tampa buscará iniciar con pie derecho en Atlanta. Miami, por su parte, viajará a Indianápolis para enfrentarse a los Colts.
Con los recortes finales a la vuelta de la esquina, los partidos de pretemporada han cumplido su función: mostrar talento, verificar esquemas y, sobre todo, ofrecer una última plataforma a quienes buscan vivir el sueño de la NFL.
El drama de agosto es la antesala a la gloria (o el olvido) de septiembre. La intensidad no baja, aunque el calendario diga que la temporada aún no empieza.