Maratón sin tregua: el calendario 2024 de MLB que desafía los límites del béisbol moderno
Entre doble jornadas, viajes incesantes y pocos descansos, el calendario de la MLB 2024 plantea preguntas incómodas sobre salud de los jugadores y la calidad del espectáculo
¿Deporte profesional o experiencia de resistencia?
Desde los últimos días de marzo hasta finales de septiembre, la Major League Baseball (MLB) ejecutará una odisea diaria en la que 30 equipos se embarcan en lo que parece más una gira mundial que una temporada deportiva. La MLB 2024 promete romper todos los récords de viajes, enfrentamientos seguidos y, en el proceso, los límites del cuerpo humano.
Este calendario interminable arroja preguntas urgentes sobre la sostenibilidad del béisbol profesional en su formato actual. ¿Dónde se traza la línea entre el entretenimiento y el agotamiento? ¿Puede un calendario tan apretado ofrecer el mejor nivel competitivo posible? Este artículo es un análisis en profundidad del calendario de MLB 2024 y cómo este impacta a jugadores, equipos y aficionados por igual.
Calendario: una sinfonía de 162 partidos en 187 días
Tal como se ha configurado para esta temporada, los equipos jugarán 162 partidos en el lapso de poco más de seis meses. Aunque esto no es nuevo en términos de cantidad —la cifra no ha cambiado desde 1961 para la Liga Americana y 1962 para la Nacional—, la forma en que se han dispuesto los partidos para 2024 es la que ha encendido las alarmas.
Veamos, por ejemplo, el caso de una franquicia genérica: abre el 26 de marzo, sin descanso hasta el 1 de abril salvo una única fecha libre. A partir de ahí, encuentros diarios, viajes a tres ciudades distintas en solo ocho días, y apenas dos jornadas libres en todo abril.
“No estamos hablando solo de jugar partidos todos los días, que ya es extenuante. Es volar tras un partido nocturno y enfrentar un juego diurno en una ciudad a 2,000 kilómetros de distancia 18 horas después”, señaló el medico y analista de rendimiento deportivo Dr. Karl Jacobsen.
Viajes interminables: factor clave en la fatiga
De acuerdo con MLB.com, en 2024 los equipos recorrerán entre 40,000 y 50,000 kilómetros en vuelos domésticos. Para poner esto en perspectiva, eso es más que la circunferencia de la Tierra en el ecuador (aproximadamente 40,075 km).
Entre los más afectados están los equipos del oeste como los Dodgers de Los Ángeles y los Mariners de Seattle, quienes enfrentan más desplazamientos por la poca cercanía geográfica con los equipos del este.
- Los Yankees de Nueva York, por ejemplo, juegan en 11 estados distintos solo en los primeros 45 días.
- Los Rockies de Colorado viajan a la costa Oeste cuatro veces y a la Este tres, dentro de los primeros tres meses.
“Está comprobado científicamente que los cambios horarios frecuentes y los vuelos largos alteran los ritmos circadianos, bajan el rendimiento muscular y reducen la capacidad cognitiva”, explicó Jacobsen.
Juegos sin descanso: lo que nos dice la historia
Si analizamos el béisbol de décadas pasadas, veremos que los desplazamientos eran igual de complicados, pero el calendario solía tener más respiros. En los años 70 y 80, los dobles juegos eran comunes, pero también lo eran los días de descanso más regulares.
En 2024, muchos equipos tienen largas rachas sin un solo día libre. Algunas secuencias notables:
- 22 días seguidos de partidos para los Cardinals de St. Louis entre mayo y junio.
- 18 partidos en 19 días para los Red Sox a lo largo de julio, incluyendo 3 viajes de costa a costa.
- Viaje triple: de Nueva York a Kansas City, luego a California y de regreso al este en apenas 9 días.
“Los calendarios actuales priorizan la televisión, no a los atletas”, advirtió el exjugador y actual comentarista de ESPN Alex Rodríguez.
¿Se resiente la calidad del juego?
La salud de los jugadores es uno de los ejes de este debate, pero también lo es la calidad del espectáculo. Un pitcher titular que debe viajar entre turnos muy cortos, o un bateador designado fatigado por noches sin descanso, no ofrece al público su mejor versión.
Los resultados lo demuestran. En temporadas recientes, la tasa de lesiones ha ido en aumento, en particular lesiones musculares relacionadas con el sobreuso.
Según Baseball Prospectus:
- En 2023 se registraron más de 700 lesiones significativas durante la temporada regular.
- El 63% de ellas fueron de tipo muscular (bíceps, cadera, isquiotibiales, etc.)
- Los lanzadores se llevaron la peor parte: el 42% de las lesiones involucraron a este tipo de jugadores.
Los jugadores se pronuncian: silencio corporativo
A pesar de que la protesta por parte de los jugadores ha sido discreta —en parte porque los sindicatos mantienen negociaciones constantes sobre temas de calendario—, ya algunos se han manifestado.
Max Scherzer, veterano de múltiples equipos, dijo en 2022:
“Estamos en un calendario donde ya no importa tanto el juego de hoy, sino cómo sales físicamente del juego para poder enfrentarte al de mañana. Eso debería preocupar a todos”.
También Mookie Betts, estrella de los Dodgers, dejó entrever en una entrevista con MLB Network que los momentos para compartir con la familia son cada vez más escasos:
“Entre tantos vuelos, series y entrenamientos, pocas veces me siento descansado… Es una rutina brutal”.
¿Cuál es el beneficio de un calendario tan extenso?
Según los dueños y ejecutivos de la liga, hay componentes comerciales que no pueden pasar desapercibidos:
- Más juegos significan más taquilla, más ingresos por publicidad local y regional, y más derechos televisivos vendidos.
- En promedio, cada juego genera entre $1.5 y $2.4 millones de dólares para el equipo local.
Con agendas definidas por contratos televisivos con gigantes como ESPN, FOX y Apple TV, cada día sin un juego puede representar millones no recuperables para las franquicias.
¿Y el aficionado?
Los aficionados, sobre todo aquellos que compran pases de temporada o siguen cada juego por televisión, están también en el centro del análisis. Algunos agradecen tener partidos todos los días, otros ya reportan “cansancio visual” o desinterés hacia las series de baja competitividad.
“Siento que a veces hay demasiados juegos. Sigo a los Mets, pero ver siete juegos seguidos contra equipos sin alma no siempre emociona”, dijo Daniela Pérez, fan en Nueva Jersey.
¿Hacia dónde nos dirigimos?
Con la MLB expandiéndose globalmente (juegos en México, Londres, y pronto Corea del Sur), parece que el volumen de calendario no hará más que crecer. Sin embargo, voces como la del excomisionado Bud Selig han sonado a favor de acortar la temporada regular a 154 partidos, como ocurría antes de los años 60.
Por ahora, la pelota sigue rodando —y los jugadores también. Pero el interrogante permanece: ¿hasta cuándo podrá resistir el béisbol este ritmo frenético sin romperse?