Eagles, Ravens y Seahawks: Tres caminos, un mismo objetivo en la NFL 2025

Philadelphia Eagles: En busca de una dinastía

Los Philadelphia Eagles llegan a la temporada 2025 como los grandes favoritos de la NFL. Con un récord de 14-3 la temporada pasada y con el trofeo Vince Lombardi en sus vitrinas, el equipo dirigido por Nick Sirianni no solo apunta a revalidar el campeonato sino a consolidar una dinastía.

La dupla compuesta por Jalen Hurts y Saquon Barkley es, sin duda, una de las más temidas de toda la liga.

• Hurts sumó 18 pases de touchdown contra solo 5 intercepciones y añadió 14 touchdowns terrestres, la mayor cifra en su posición.
• Barkley, por su parte, rompió la marca histórica de más yardas de carrera (temporada regular + playoffs) con 2,504 yardas y 18 touchdowns.

Y detrás de semejante producción ofensiva hay una línea ofensiva estelar, pilotada por Jason Kelce y Lane Johnson. Aunque hay algunas dudas con la recuperación del guardia izquierdo Landon Dickerson (operado de menisco), el cuerpo técnico ha logrado profundidad con jóvenes como Drew Kendall.

Nuevas piezas y bajas sensibles

Entre los nuevos nombres destacan el receptor John Metchie III y el defensivo Jakorian Bennett, además de los novatos Jihaad Campbell (LB) y Drew Mukuba (S). Estas incorporaciones intentarán llenar el vacío que dejaron salidas importantes como Darius Slay, James Bradberry y C.J. Gardner-Johnson en la secundaria.

Sin embargo, la gerencia liderada por Howie Roseman ha hecho movimientos prudentes, como el fichaje del mariscal suplente Sam Howell y el liniero Fred Johnson, reforzando posiciones críticas.

¿Hay debilidades?

Pocas. Tal vez el único aspecto por definir sea el tercer receptor detrás de A.J. Brown y DeVonta Smith, más aún considerando que Brown ha lidiado con molestias musculares en la pretemporada. El resto del roster está tan profundo como talentoso.

Proyección: Final de conferencia como mínimo. Repetir campeonato es difícil en la NFL moderna, pero si alguien puede hacerlo, son estos Eagles.

Baltimore Ravens: El eterno aspirante que quiere coronarse

Los Ravens son una de esas franquicias que siempre están en la conversación, pero no logran romper el techo de cristal. Con un récord de 13-6 en 2024 y liderados por un Lamar Jackson en pleno prime, Baltimore tiene todo para intentar su asalto al Super Bowl.

Las estadísticas avalan esa ambición:

• Jackson comandó la ofensiva número uno de la liga en yardas totales en 2024.
• Fue segundo en votos para el MVP, rozando su segundo trofeo individual.
• Con Derrick Henry en el backfield, lograron desequilibrar cualquier defensa rival.

A esto se le suma un roster con cinco All-Pros defensivos: Roquan Smith, Kyle Hamilton, Marlon Humphrey, Justin Madubuike y Odafe Oweh. La defensa de los Ravens, siempre física e intimidante, busca redimirse de los errores del pasado, especialmente los cometidos en playoffs contra Kansas City y Buffalo.

Refuerzos que ilusionan

La llegada del receptor DeAndre Hopkins puede ser el factor diferencial que necesitaba Jackson. Con Hopkins, Zay Flowers, Rashod Bateman y Mark Andrews, la ofensiva aérea luce más peligrosa que nunca.

A nivel defensivo, los fichajes del esquinero Jaire Alexander y el novato Malaki Starks apuntan a corregir la mayor debilidad del equipo: la secundaria. Cincinnati los expuso duramente en 2024, pero ese escenario parece mucho menos probable este año.

La gran incógnita

El único lunar del equipo podría ser la pérdida del legendario pateador Justin Tucker, cortado tras acusaciones fuera del campo. Su reemplazo, Tyler Loop, ha impresionado con un gol de campo de 61 yardas en pretemporada, pero la presión de jugar en Baltimore puede ser enorme.

Proyección: Todo depende del mes de enero. Si logran evitar errores en momentos clave, los Ravens podrían finalmente volver a un Super Bowl tras más de una década.

Seattle Seahawks: Entre el cambio de piel y el sueño de playoffs

Con marca de 10-7 en 2024, los renovados Seattle Seahawks se lanzan a una nueva etapa bajo la dirección del head coach Mike Macdonald y el debut de Sam Darnold como mariscal titular, tras una sorprendente campaña con los Vikings.

Sin embargo, Seattle sufrió bajas ofensivas mayúsculas, perdiendo a dos íconos como DK Metcalf y Tyler Lockett. En su lugar, llegan Cooper Kupp y Marquez Valdes-Scantling, además de confiar en una gran temporada del joven Jaxon Smith-Njigba, quien ya superó las 1,000 yardas.

La clave está en el juego terrestre

En 2024, los Seahawks terminaron quintos por la cola en yardas terrestres. Recuperar la explosividad de Kenneth Walker III, afectado por lesiones, será vital, al igual que la evolución de la línea ofensiva con el novato Grey Zabel y jóvenes como Jalen Sundell.

Permitir 54 sacks el año pasado es una cifra insostenible si se quiere competir en la NFC. Será responsabilidad de Klint Kubiak, nuevo coordinador ofensivo, mejorar ese frente.

Defensa: una muralla que busca consolidarse

Si algo pueden presumir los Seahawks es su unidad defensiva. En 2024 fueron 14º en yardas permitidas y octavos en sacks (45). Con la adición de DeMarcus Lawrence a una línea que ya posee a Jarran Reed, Byron Murphy II y Leonard Williams, se espera una mejora aún mayor.

Además, mantienen una secundaria élite liderada por Devon Witherspoon y Riq Woolen, capaces de contener cualquier ataque aéreo. El novato Nick Emmanwori también promete ofrecer versatilidad en la secundaria.

¿Hasta dónde puede llegar Seattle?

El éxito de los Seahawks dependerá en gran parte de cuánto pueda aguantar Sam Darnold el ritmo como mariscal y de si pueden mantener una defensa dominante. También influirá si los 49ers logran mantener su nivel en la NFC Oeste.

Jugadores a vigilar en fantasy:

• Smith-Njigba: Alto volumen de targets y sin Metcalf ni Lockett, es el WR1.
• Walker III: Si está sano, puede retornar al top 10 de corredores.

Proyección: Temporada muy volátil. Desde 7-10 hasta 11-6. Todo dependerá del ritmo ofensivo y del estado físico de las piezas clave.

¿Qué nos depara la NFL 2025?

Mientras Philadelphia busca consolidar una era dorada, Baltimore anhela una coronación largamente esquiva y Seattle intenta reinventarse con sangre nueva. Tres franquicias, tres planes distintos, y un solo objetivo: levantar el trofeo Vince Lombardi en febrero. Será una temporada imperdible.