Una travesía inolvidable: Tres hermanos escoceses rompen récord mundial al cruzar el Pacífico a remo
Los hermanos Maclean completan el cruce del océano Pacífico sin asistencia, enfrentando tormentas, hambre y peligro extremo, todo por una noble causa humanitaria.
Un desafío que reescribió la historia marítima
El 30 de agosto de 2025 será recordado como una fecha histórica en la navegación a remo. Ese día, los hermanos escoceses Jamie, Ewan y Lachlan Maclean completaron la travesía más rápida jamás realizada, sin asistencia, a través del océano Pacífico, desde Perú hasta Cairns, Australia. La hazaña, que duró 139 días y recorrió más de 9,000 millas náuticas, superó el anterior récord mundial por 21 días.
Los hermanos, originarios de Edimburgo, no solo buscaron desafiar los límites físicos y mentales del ser humano, sino también recaudar fondos para proyectos de acceso a agua potable a través de su organización benéfica, Maclean Foundation.
Más que una aventura: un llamado por el agua potable
El desafío tenía una motivación mucho más profunda que el anhelo de gloria. Cabe destacar que esta odisea tenía como objetivo recaudar £1 millón (aproximadamente $1,350,450 USD) para implementar sistemas de agua potable en comunidades vulnerables de Madagascar. Hasta ahora, han logrado reunir más de £700,000, lo que representa una esperanza concreta para alrededor de 40,000 personas que viven sin acceso a agua limpia.
“Ha sido lo más difícil que he hecho en mi vida, algo que jamás hubiera intentado sin mis hermanos,” confesó Ewan, el mayor de los tres, en un video publicado pocas horas antes de arribar a puerto.
Una odisea con sabor a libertad y supervivencia
Durante sus casi cinco meses en el mar, los hermanos se enfrentaron a:
- Tormentas violentas, una de las cuales arrojó a Lachlan por la borda.
- Malgamiento de alimentos, lo que los hizo pensar que no podrían llegar al destino final.
- Lesiones físicas y desgaste emocional que pusieron a prueba su voluntad.
- Mareos, deshidratación y desnutrición parcial en ciertos puntos del viaje.
Y a pesar de ello, llegaron a la Cairns Marlin Marina tocando gaitas escocesas y ondeando las banderas de Escocia, Australia y Reino Unido. Una multitud de familiares y simpatizantes los aguardaban, incluyendo su madre Sheila, quien los recibió entre lágrimas.
¿Por qué remar desde Sudamérica a Australia?
Este cruce particular desde América del Sur hasta Australia sin asistencia nunca había sido completado antes, lo que marcó un logro único en la historia de la navegación deportiva. El anterior récord lo tenía el explorador ruso Fyodor Konyukhov, quien en 2014 completó la travesía en 160 días, pero en solitario.
Según la Ocean Rowing Society, esta hazaña no solo rompe récords cronológicos, sino también conceptuales, al abrir nuevas rutas para exploradores oceánicos que buscan impulsar causas humanitarias a través del deporte extremo.
Una hermandad forjada en el océano
Los Maclean no fueron improvisados: antes del viaje, se entrenaron durante más de un año en condiciones simuladas, aprendiendo sobre meteorología oceánica, navegación astronómica e incluso medicina de emergencia. La experiencia consolidó su relación fraterna. “Reímos hasta que nos dolieron las mejillas y lloramos lágrimas de emoción,” añadió Jamie, el hermano del medio.
La anécdota más surrealista ocurrió en las últimas horas, cuando Ewan preguntó por radio a la marina de Cairns: “¿Tienen pizza y cerveza? Repito, ¿tienen pizza y cerveza? Cambio.” Una petición humorística que simbolizaba la llegada al final de una experiencia tan abrasadora como transformadora.
El impacto de la Maclean Foundation
La Maclean Foundation fue creada para cubrir una necesidad urgente: el acceso a fuentes seguras y sostenibles de agua potable. Según datos de la OMS, aproximadamente 2.2 mil millones de personas en el mundo carecen de servicios de agua potable gestionados de manera segura. De ellas, millones se encuentran en África subsahariana, y dentro de este contexto, Madagascar figura entre los más afectados.
El plan de los Maclean es utilizar los fondos reunidos para implementar sistemas de agua por gravedad, pozos perforados y tecnologías de purificación con energía solar en comunidades rurales de difícil acceso. Su objetivo inmediato es beneficiar al menos a 40,000 personas en los próximos dos años.
¿Qué convierte a esta hazaña en un ejemplo global?
Desde una perspectiva deportiva, la travesía de los Maclean es un testimonio de resistencia humana, preparación estratégica y hermandad. Pero lo que realmente la convierte en excepcional es su trasfondo solidario.
No se trató de una simple búsqueda de un récord Guinness. Fue un movimiento bien estructurado para cambiar realidades. La hazaña sumó miles de donantes en distintas partes del mundo, motivados por el esfuerzo genuino de tres hermanos escoceses con una misión noble.
“No puedes cambiar el mundo con un solo viaje, pero puedes empezar el cambio una gota a la vez.” – Jamie Maclean
Lo que viene: más agua, más mar y más esperanza
Ahora que han tocado tierra, los Maclean no piensan detenerse. Ya han anunciado planes de nuevos desafíos oceánicos para el 2026, incluido un cruce del océano Índico en colaboración con atletas africanos, para visibilizar la crisis hídrica en Somalia y Etiopía.
Además, están trabajando en un documental sobre su travesía titulado “Row for Life”, que esperan lanzar en festivales de cine ambiental en 2026, junto con materiales educativos para escuelas secundarias sobre crisis del agua y solidaridad internacional.
Su gesta nos deja una lección poderosa: el deporte puede ser un instrumento de cambio, la aventura un canal de conciencia y la hermandad, una fuerza indestructible.