Graham Greene: El legado eterno del actor indígena que conquistó Hollywood
El actor canadiense rompió barreras en cine, televisión y videojuegos representando dignamente a los pueblos originarios
Graham Greene no fue simplemente un actor más en la industria del entretenimiento. Fue un pionero, un símbolo de representación real y digna de los pueblos indígenas en Hollywood, y un artista versátil cuya carrera dejó una marca profunda en múltiples disciplinas, desde el cine y la televisión hasta los videojuegos y la música.
El comienzo: de obrero a actor
Graham Greene nació en junio de 1952 en Ohsweken, una comunidad indígena en la Reserva de las Seis Naciones en Ontario, Canadá. Antes de consagrarse como actor, trabajó en oficios diversos como soldador, carpintero, y obrero de construcción. Su incursión en la actuación no llegó hasta la década de 1970. En 1979 apareció en la serie canadiense "The Great Detective", y su primer trabajo cinematográfico importante fue en "Running Brave" en 1983.
Su carrera dio un giro verdaderamente transformador en 1990, cuando interpretó al sabio y compasivo Kicking Bird en la icónica película "Dances with Wolves" ("Bailando con Lobos"), protagonizada y dirigida por Kevin Costner. Su actuación le valió una nominación al Oscar como Mejor Actor de Reparto en 1991, siendo uno de los doce reconocimientos que recibió la película, la cual finalmente ganó siete estatuillas, incluyendo Mejor Película y Mejor Director.
Una carrera polifacética
La trayectoria de Greene se extendió mucho más allá de Dances with Wolves. Participó en producciones como "Maverick" (1994), "Die Hard with a Vengeance" (1995), "The Green Mile" (1999), y "Wind River" (2017). Se convirtió en un personaje familiar para millones de fanáticos de franquicias populares al aparecer en The Twilight Saga: Breaking Dawn - Part 2 en 2012.
En televisión también dejó huella. Fue parte de series innovadoras como "Reservation Dogs", "1883", "Tulsa King" y "The Last of Us", donde su presencia siempre aportaba profundidad y sabiduría a los personajes que encarnaba.
Voz merecedora de un Grammy
Su talento se extendió también al arte de la narración. En el año 2000, Graham Greene ganó un Premio Grammy a Mejor Álbum Hablado para Niños por su participación en "Listen to the Storyteller". Una muestra más de su versatilidad y su compromiso con el arte en todas sus formas.
Greene en el mundo de los videojuegos
El actor también dejó su sello en el universo digital al interpretar al venerado jefe nativo americano Chief Rains Fall en el exitoso videojuego de Rockstar, "Red Dead Redemption 2" (2018). Este título, considerado por muchos como una obra maestra por su narrativa y realismo, contó con la actuación vocal de Greene para traer a la vida a un personaje que encarnaba los valores de sabiduría ancestral y resistencia cultural.
Un referente y mentor
Graham Greene no sólo interpretó personajes indígenas: fue un defensor del derecho de sus comunidades a contar sus propias historias. Fue mentor de jóvenes actores y un referente para las nuevas generaciones.
El actor D’Pharaoh Woon-A-Tai, protagonista en Reservation Dogs, escribió en Instagram tras su fallecimiento:
“Nos enseñaste que se puede, y cómo dejar huella. Abriste camino para cada joven nativo que sólo soñaba con actuar. Gracias por ver algo en mí y compartir tu conocimiento a lo largo de nuestra amistad.”
La actriz Lily Gladstone, nominada al Oscar por "Killers of the Flower Moon", también dedicó palabras: "Graham Greene fue de los mejores que ha habido. Vivía en la pantalla de una manera absolutamente inigualable. Hacía que todo lo que tocaba fuera más profundo y memorable".
Reconocimientos y legado
La contribución de Greene fue influyente no sólo para las audiencias, sino también entre los académicos de estudios indígenas y críticos cinematográficos. Fue uno de los primeros actores de pueblos originarios en Estados Unidos y Canadá en alcanzar reconocimiento internacional sin tener que estereotiparse ni maquillar su identidad.
En 2002, recibió una nominación a los Premios Independent Spirit por su papel en "Skins", una película que documenta la vida en una reserva Lakota Sioux en Dakota del Sur, abordando problemáticas reales como la violencia, alcoholismo y marginación.
Un símbolo de resistencia cultural
En una industria donde históricamente los roles indígenas han sido caricaturizados o asignados a actores no nativos, Graham Greene cambió la narrativa. Demostró que los intérpretes indígenas no sólo podían representar sus propias culturas, sino elevarlas al mainstream con dignidad, profundidad y autenticidad.
Vida personal
Greene vivió sus últimos días en Stratford, Ontario, y falleció a los 73 años el pasado lunes tras una larga lucha contra una enfermedad no especificada. Le sobreviven su esposa Hilary Blackmore y su hija Lilly Lazare-Greene.
Mucho más allá del reconocimiento crítico o de los premios, el mayor legado de Graham Greene reside en abrir camino a otros y demostrar que ser indígena no es una limitación, sino una fortaleza artística en sí misma.
Él queda “oficialmente increíble”, como dirían los Guinness World Records, pero sobre todo, queda como oficialmente inolvidable.