¿Inmortalidad en el siglo XXI? El curioso momento entre Xi Jinping y Putin que reaviva el debate científico

Un insólito intercambio captado por micrófono abierto durante un desfile militar en China expone cómo los líderes mundiales fantasean con alargar la vida humana y alcanzar la juventud eterna gracias a los avances científicos

Un desfile, tres líderes y una conversación inesperada

En el marco de la conmemoración del 80º aniversario de la rendición japonesa en la Segunda Guerra Mundial, Beijing fue escenario no solo de un majestuoso desfile militar, sino también de una de las conversaciones más insólitas y provocativas entre líderes mundiales en los últimos tiempos. Xi Jinping, Vladimir Putin y Kim Jong-un caminaban hacia la plataforma de observación cuando las cámaras y micrófonos, aún activos, captaron un diálogo digno de ciencia ficción.

Fue el presidente chino quien inició la conversación, mencionando cómo en el pasado llegar a los 70 años era considerado un logro, pero que hoy en día uno “sigue siendo un niño” a esa edad. La traducción al ruso que siguió dio pie a las elucubraciones del presidente ruso sobre la longevidad humana.

Putin y la promesa científica de la vida eterna

En unas décadas, con el desarrollo de la biotecnología, los órganos humanos continuarán siendo reemplazados y la gente se volverá más joven, tal vez incluso logren la inmortalidad”, tradujo al chino un intérprete que acompañaba al líder ruso.

Ambos líderes sonrieron levemente, entre sorprendidos y cómplices, mientras Kim Jong-un se inclinaba para escuchar mejor. La escena fue transmitida en directo por el centro de medios del desfile a agencias internacionales. Poco después, el audio reveló una voz—presumiblemente Xi—comentando que “algunos predicen que en este siglo, puede que sea posible vivir hasta los 150 años.”

Esta conversación fortuita ha reabierto el debate sobre hasta dónde puede llegar la ciencia médica en la extensión de la vida y si deberíamos siquiera seguir ese camino.

¿Cuál es el estado actual de la ciencia de la longevidad?

La idea de prolongar la vida humana más allá de los límites actuales no es nueva. Durante siglos, alquimistas y científicos han buscado la fuente de la eterna juventud. Pero en las últimas dos décadas, los avances han sido verdaderamente significativos.

  • CRISPR: la revolucionaria técnica de edición genética que permite alterar genes con precisión quirúrgica.
  • Terapia con células madre: utilizada para regeneración de tejidos dañados y potencialmente capaz de revertir el envejecimiento celular.
  • Senolíticos: fármacos diseñados para eliminar células senescentes, una de las causas del envejecimiento.
  • Inteligencia Artificial: aplicada al análisis genómico y ensayos clínicos para acelerar descubrimientos.

Empresas como Altos Labs, financiada por Jeff Bezos y otros magnates, invierten miles de millones en investigación orientada a revertir el envejecimiento. En 2023, investigadores del Salk Institute en California lograron revertir parcialmente el envejecimiento en ratones, algo que ha despertado tanto expectativas como alarmas éticas.

Longevidad como poder geopolítico

Que sean precisamente Xi Jinping y Vladimir Putin quienes conversen sobre este tema no es casualidad. Ambos líderes están inmersos en una competencia global por la supremacía tecnológica y científica. El dominio de tecnología de longevidad no solo tiene implicaciones médicas, sino también geoestratégicas.

China ha invertido más de $250 mil millones en biotecnología entre 2020 y 2024, según datos del Ministerio de Ciencia y Tecnología del país. Rusia, por su parte, ha creado el proyecto "Russia 2045", con un plan a largo plazo de “transferir la conciencia humana” a plataformas no biológicas.

¿Podría entonces el control de la longevidad convertirse en un nuevo eje de poder? Tal vez estamos ante un nuevo tipo de carrera armamentista, donde lo que se compite no es por destruir más, sino por vivir más.

Estirando los límites: de Silvio Berlusconi a Elon Musk

Putin aludió también a Silvio Berlusconi, recordando que el ex primer ministro italiano había promovido fervientemente la idea de prolongar la vida activa más allá de los 100 años. Y es que esta obsesión es compartida por varias figuras del poder y los negocios en el mundo.

  • Elon Musk fundó Neuralink, con el objetivo de fusionar el cerebro humano con interfaces tecnológicas.
  • Larry Page, cofundador de Google, ha invertido en Calico, empresa biotech enfocada en combatir el envejecimiento.
  • Peter Thiel, cofundador de PayPal, es inversionista en startups de criogenización y rejuvenecimiento celular.

La longevidad se considera hoy una nueva frontera de inversión, la “industria del envejecimiento inverso”, estimada en valer más de $610 mil millones para 2025, según Bank of America.

¿Y los dilemas éticos?

Mientras Xi y Putin divagaban sobre un futuro en el que llegar a los 150 años sería la norma, muchas voces en la comunidad científica y filosófica ya han encendido las alarmas:

  • ¿Quién tendrá acceso a estas tecnologías? ¿Serán un lujo para los ricos?
  • ¿Qué implicaciones sociales y económicas tendría doblar la esperanza de vida?
  • ¿Cómo afectará al planeta una humanidad prácticamente eterna?

La bioética también plantea escenarios inquietantes: ¿seremos menos humanos si comenzamos a reemplazar órganos, borrar memorias o vivir mediante cerebros artificiales?

Una conversación que dice mucho más

El micrófono abierto de Xi y Putin puede parecer simplemente anecdótico, pero deja entrever cómo los grandes líderes del presente contemplan el futuro desde un lugar donde la ciencia ya no es simplemente tecnología, sino una extensión del poder. Y donde el deseo de trascender la muerte adquiere tintes políticos.

Sus palabras configuran un escenario en el que la humanidad ya no solo conquista el espacio como medio de dominación global, sino también el tiempo de vida como ventaja evolutiva.

Quizás el verdadero giro geopolítico del siglo XXI no vendrá de una nueva guerra ni de una revolución industrial, sino de quién domine mejor los secretos de la longevidad.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press