NFL Semana 1: J.J. McCarthy vs Caleb Williams, los nuevos rostros del futuro en la NFC Norte
Los renovados Vikings y Bears se enfrentan en un duelo de quarterbacks novatos con grandes expectativas y un pasado lleno de contrastes
El renacer de dos franquicias históricas
La NFC Norte revivirá una rivalidad histórica este lunes por la noche cuando los Minnesota Vikings (14-4) visiten a los Chicago Bears (5-12) en el Soldier Field. Sin embargo, el duelo no solo se centra en sumar la primera victoria de la temporada, sino que simboliza un cambio generacional con dos quarterbacks debutantes que simbolizan la nueva era para ambas franquicias: J.J. McCarthy por los Vikings y Caleb Williams por los Bears.
Un duelo de quarterbacks novatos con historia en el colegial
Ambos pasaron por el circo mediático del Draft NFL 2024. McCarthy salió como la décima selección global tras una dominante etapa en Michigan, mientras que Caleb Williams, ganador del Heisman Trophy en 2022, fue el pick No. 1. Aunque con caminos distintos, el destino los reúne en un escenario mediático ideal: Monday Night Football.
McCarthy, quien se perdió toda su temporada de novato por una lesión de rodilla sufrida en su primer partido de pretemporada, fue elegido capitán por sus compañeros antes de haber jugado un solo snap oficial. Eso refleja el respeto y liderazgo que ya imprime en el vestidor. "Su mentalidad ganadora recuerda al propio Tom Brady en sus inicios", aseguró el coach de los Vikings, Kevin O’Connell, quien acaba de ser nombrado Entrenador del Año en 2024.
Por otro lado, Williams tuvo un turbulento año de novato. A pesar de lanzar para 3,541 yardas —récord para un novato en Chicago— fue capturado 68 veces, la cifra más alta en la NFL la temporada pasada. Sumado a los despidos de su entrenador en jefe y coordinador ofensivo, el camino fue todo menos estable. Ahora, bajo el joven y ofensivo entrenador Ben Johnson, Caleb busca finalmente consolidarse como el quarterback franquicia que los Bears no han tenido desde los tiempos de Sid Luckman en los años 40.
Choque de filosofías: la experiencia de Minnesota contra la reconstrucción de Chicago
Los Vikings entran al duelo como favoritos por 1½ puntos, según BetMGM, y traen una inercia ganadora después de conseguir 14 victorias en 2024, la segunda mejor marca en 64 años de historia del equipo. En contraste, los Bears solo han tenido tres apariciones en playoffs desde 2006, y suman seis temporadas consecutivas sin un récord ganador.
La temporada pasada, los Vikings ganaron los dos enfrentamientos entre ambos. Uno de ellos fue un thriller en el Soldier Field, donde Minnesota desperdició una ventaja de 11 puntos en los últimos segundos, pero ganó 30-27 en tiempo extra gracias a un gol de campo de Parker Romo.
Duelo estrella: Jefferson vs Jaylon Johnson
Una batalla clave será la del dos veces All-Pro Justin Jefferson contra el esquinero dos veces Pro Bowl Jaylon Johnson. Sin embargo, Johnson sigue recuperándose de una lesión en la ingle y su participación está en duda. En ocho partidos vs Chicago, Jefferson acumula 685 yardas en 50 recepciones con tres touchdowns.
Este año, sin embargo, McCarthy no contará con su receptor número dos, Jordan Addison, suspendido tres partidos por violar la política de abuso de sustancias de la NFL. Esto pone una presión adicional sobre Jefferson y el joven receptor Jalen Nailor, quien también está saliendo de una lesión.
La clave: protección y presión
Uno de los factores determinantes será la protección al quarterback. Williams fue el mariscal más capturado en 2024, y aunque la línea ofensiva fue renovada y ahora incluye al dos veces All-Pro Joe Thuney, sigue siendo una incógnita. Tiene a su favor a D.J. Moore como receptor principal (98 recepciones en 2024) y al versátil D’Andre Swift en el juego terrestre, aunque este último llega de una temporada decepcionante con solo 3.8 yardas por acarreo.
Los Vikings por su parte tienen a uno de los pass-rushers más efectivos de 2024: Jonathan Greenard, quien logró 12 capturas. Su presencia en el perímetro puede aprovechar las vulnerabilidades de la joven línea ofensiva de Chicago.
Además, la defensa vikinga fue la segunda mejor contra la carrera en 2024, permitiendo apenas 90.2 yardas por partido, por lo que Swift y compañía tienen un reto complicado desde el inicio.
Lesiones impactantes
- Minnesota: No contará con el fullback Pro Bowl C.J. Ham, ni con el safety Harrison Smith, aún en proceso de recuperación. Sin embargo, Andrew Van Ginkel y Jalen Nailor han vuelto a entrenar.
- Chicago: El cornerback Terell Smith está fuera por toda la temporada, al igual que los corredores Travis Homer y Deion Hankins. También pierden al DE Austin Booker, lo que puede comprometer la presión externa sobre McCarthy.
Motivaciones e historia
Este partido en Monday Night Football cobra una nueva dimensión histórica. Los Vikings han ganado cinco partidos consecutivos en Soldier Field y lideran la serie histórica 68-58-2. Chicago no gana en casa ante Minnesota desde 2019.
Pero más allá de los récords y estadísticas, es el inicio de una nueva era. Ambos equipos han apostado todo a sus quarterbacks novatos, con entrenadores diseñando las ofensivas alrededor de ellos y, en consecuencia, afectando incluso el futuro institucional de la franquicia.
El impacto Fantasy y más allá
Desde una perspectiva Fantasy Football, vale la pena considerar a la defensa de Minnesota como una opción sólida para esta semana, dado que enfrentarán a un quarterback aún adaptándose a un nuevo sistema con una línea ofensiva reconfigurada. Las estadísticas de captura del año pasado lo refuerzan.
En Chicago, vale la pena observar el uso de D.J. Moore y el potencial breakout de rookies como Omarion Hampton, sobre todo si el ataque terrestre encuentra ritmo. Sin embargo, las condiciones no son ideales frente a una defensa elite como la de los Vikings.
El veredicto
Los ojos del prime time estarán en los hombros de McCarthy y Williams. El duelo no solo marca el inicio de la temporada, sino lo que podría ser una nueva narrativa para dos de las franquicias más emblemáticas del norte de la NFL. Si McCarthy logra comandar una ofensiva balanceada sin su WR2 y aprovechar una defensa infiltrada de bajas, podría consolidarse como un contendiente desde el primer día.
Mientras tanto, Williams necesita demostrar que la sufrida temporada de novato fue un calentamiento. Las piezas están ahí, pero la ejecución —y la protección— serán decisivas.
Sea como sea, este juego marca el inicio de una era. La pregunta es: ¿quién tomará la delantera?