Política de visados, vacunas y desinformación: El campo minado diplomático y sanitario de EE.UU.
De las restricciones diplomáticas en la ONU a las afirmaciones erróneas de Robert F. Kennedy Jr., el gobierno de EE.UU. enfrenta una tormenta de controversias políticas y científicas
Restricciones diplomáticas: de Palestina a Brasil, pasando por Irán
La administración del expresidente Donald Trump fue conocida por imponer políticas migratorias restrictivas y, en su momento, no dudó en aplicar estas normas incluso en el escenario internacional más importante: la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU). En septiembre de un año clave, la Casa Blanca denegó visas al líder palestino Mahmoud Abbas y su delegación, impidiéndoles asistir a la cumbre anual en Nueva York.
No se detuvieron ahí. Según un memo interno del Departamento de Estado, al que tuvo acceso la prensa, el gobierno de Trump consideraba imponer restricciones de movimiento para varias delegaciones extranjeras, incluyendo las de Irán, Sudán, Zimbabue y sorprendentemente también Brasil. El documento detallaba cómo esas restricciones se aplicarían especialmente fuera de Manhattan, reduciendo la movilidad de los diplomáticos únicamente al radio permitido para los visitantes de la ONU.
¿Una Cruzada contra Irán... en Costco?
Una de las medidas más peculiares planificadas era una propuesta para prohibir el acceso de diplomáticos iraníes a tiendas mayoristas como Costco o Sam’s Club, a menos que obtuvieran un permiso expreso del Departamento de Estado. Estas tiendas habían sido un recurso favorito para los diplomáticos iraníes debido a la posibilidad de adquirir grandes cantidades de productos no disponibles en su país, como consecuencia de las sanciones económicas impuestas a Irán desde hace más de una década.
Este tipo de acciones reflejan no solo un endurecimiento de la política exterior estadounidense bajo Trump, sino también un enfoque simbólico de aislamiento económico y político dirigido a naciones consideradas “problemáticas”.
El caso brasileño: Lula bajo la lupa
Brasil ha disfrutado históricamente de una tradición diplomática única en la ONU: su presidente es siempre el primer jefe de Estado en hablar durante la apertura de la Asamblea General. Sin embargo, ese privilegio pudo estar en riesgo. Aunque el memorando no especifica si la restricción se aplicaba directamente al presidente Luiz Inácio Lula da Silva, su inclusión en la lista negra causó sorpresa.
El trasfondo político también añade un matiz intrigante: Donald Trump ha arremetido repetidamente contra Lula por su papel en la investigación y juicio contra el expresidente brasileño Jair Bolsonaro, un político afín a Trump que ha sido acusado de fomentar un intento de golpe de Estado.
La excepción siria y la estrategia regional
Paradójicamente, Siria, un país anteriormente excluido de muchas interacciones diplomáticas, recibió una exención para sus delegados. Este cambio vino tras la caída del régimen de Bashar al-Ásad (según el mismo memo) y parece reflejar un intento del país norteamericano de recomponer lazos en Medio Oriente. Es notable cómo la diplomacia estadounidense actúa con pragmatismo: el castigo a Irán va acompañado de gestos conciliadores hacia Damasco.
Robert F. Kennedy Jr. y la desinformación sanitaria
Mientras tanto, en otro frente, la confusión y el caos también asumieron protagonismo en el ámbito de la salud pública. Robert F. Kennedy Jr., Secretario de Salud, protagonizó una audiencia de tres horas ante el Senado en la que emitió afirmaciones erróneas sobre vacunas, hospitales rurales y violencia escolar, poniendo en entredicho la política sanitaria oficial de EE.UU. y su relación con la ciencia.
Kennedy, que asumió el cargo en medio de tensiones por su historial de críticas al consenso científico, afirmó que no hay pruebas concluyentes sobre cuántas vidas salvaron las vacunas contra la COVID-19. Sin embargo, los datos lo desmienten tajantemente:
- Según un estudio de The Lancet Infectious Diseases (2022), se estima que las vacunas evitaron 19.8 millones de muertes en el primer año de su implementación a nivel global.
- En EE.UU., se calcula que más de 1.9 millones de vidas fueron protegidas por las vacunas.
- La Organización Mundial de la Salud sostiene que, solo en Europa, se evitaron más de 1.4 millones de muertes.
Estas cifras representan más que estadísticas; son evidencia viva del impacto positivo de la vacunación masiva.
Confusiones sobre los refuerzos y acceso a vacunas
Kennedy también declaró que “cualquiera puede obtener un refuerzo” de la vacuna, lo cual es impreciso. La FDA ha limitado el acceso a las nuevas vacunas a personas mayores o con condiciones de salud subyacentes. La disponibilidad del refuerzo en farmacias y estados varía considerablemente, desmintiendo la afirmación de Kennedy.
Además, la efectividad de las vacunas 2024–2025 ha sido autorizada con base en datos reales: según el CDC, la protección contra hospitalización para edades mayores de 65 años fue del 45% al 46%.
Vacunas infantiles: entre la ciencia y la conspiración
Kennedy también cuestionó el calendario de vacunación infantil, afirmando que los niños en EE.UU. reciben hasta 92 dosis de 19 vacunas diferentes, pero solo una fue testeada contra placebo. Esto es falso. Todas las vacunas incluidas en el calendario han pasado por pruebas rigurosas, incluyendo estudios doble ciego con placebos. Las recomendaciones del CDC y la Academia Americana de Pediatría son claras al respecto.
La insistencia en afirmar que las vacunas son peligrosas, sin prueba alguna, no solo es negligente, sino que alimenta el movimiento antivacunas, un fenómeno que ha tenido consecuencias trágicas como el resurgimiento del sarampión en varios estados del país.
Una distorsión sobre los hospitales rurales
Otro tema abordado por Kennedy fue la inversión en hospitales rurales: aseguró que el gobierno aumentaría en un 50% el financiamiento destinado a estas instituciones gracias a un proyecto de ley impulsado por Trump. La verdad es más compleja.
El presupuesto mencionado preveía $10 mil millones al año para estas zonas, pero este refuerzo buscaba compensar recortes mucho mayores derivados de ajustes en Medicaid. Expertos indican que las pérdidas netas para estos centros podrían oscilar entre $58 y $137 mil millones en la siguiente década, afectando a comunidades enteras donde el acceso a servicios médicos ya es precario.
El estigma a los antidepresivos y la violencia escolar
Finalmente, Kennedy negó haber vinculado los antidepresivos con los tiroteos escolares, pero en una entrevista previa insinuó que los ISRS (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina) podrían estar correlacionados con la violencia. Aunque los estudios científicos sobre este tema existen, ninguno ha demostrado una relación causal directa entre el consumo de antidepresivos y la agresión, y la mayoría de los expertos llama a un tratamiento responsable de pacientes con enfermedades mentales, no a su estigmatización.
Reflexiones finales
Estados Unidos se halla en una encrucijada: ante el mundo, limita el diálogo diplomático y aplica políticas selectivas que reflejan prioridades geopolíticas determinadas por afinidades personales y agendas ideológicas más que estrategias coherentes; internamente, el discurso público sobre ciencia, salud y políticas sanitarias está plagado de imprecisiones, mitos e instrumentalización política.
En ambos escenarios —la diplomacia internacional y la salud pública— los datos existen. La pregunta es: ¿hay voluntad para tomarlos en serio?