Diamondbacks vs. Red Sox: Una noche de batazos, redención y esperanza en Arizona

Con jonrones cruciales de Carroll y Vargas, los Diamondbacks vencen 10-5 a Boston y regresan a .500 en la temporada. ¿Renace la ilusión del comodín en la Liga Nacional?

Una noche gloriosa en el Chase Field

Cuando el bate de Ildemaro Vargas conectó ese jonrón de tres carreras en la tercera entrada, se desató una euforia innegable en Phoenix. Momentos después, Corbin Carroll repitió la dosis con otro vuelacercas de tres carreras en la octava. Los Arizona Diamondbacks vencieron 10-5 a los Boston Red Sox en una noche donde el béisbol regaló emociones de sobra para los fanáticos del desierto.

Los D-backs llevan siete victorias en sus últimos nueve encuentros y, con esta racha positiva, volvieron a alcanzar el 50% de efectividad (71-71), algo que no conseguían desde el 20 de julio.

El juego en números

  • Resultado final: 10-5 a favor de Arizona
  • Jonrones destacados: Carroll (3 carreras), Vargas (3 carreras), Perdomo (solitario)
  • Pitcheo: Eduardo Rodríguez (6 entradas, 1 carrera permitida, 4 ponches)
  • Récord de Arizona: 71-71
  • Récord de Boston: Superado en la segunda posición del Este de la Liga Americana por los Yankees.

El despertar ofensivo de los D-backs

Arizona mostró un despertar ofensivo con 14 imparables, liderados por Perdomo, quien tuvo una actuación de 4 hits. Fue precisamente él quien inició la explosiva entrada número 8 con un sencillo remolcador.

Ese inning fue clave: a pesar de solo tener dos outs, Arizona fabricó cuatro carreras que ampliaron el marcador de 6-5 a 10-5, con el potente batazo de Carroll como joya de la corona.

“Este equipo no ha dejado de creer”, declaró Corbin Carroll a los medios tras el encuentro. “Estamos luchando por un comodín, y cada juego cuenta.”

El contexto de la temporada

Esta victoria no solo fue importante por romper la paridad ante Boston, sino también porque mantiene vivas las posibilidades de postemporada. La Nacional se encuentra en una lucha encarnizada por los comodines. Equipos como los Cubs, Reds y Marlins también mantienen aspiraciones reales, y cada victoria puede definir el destino.

Arizona ha tenido una temporada irregular, iniciando fuerte pero cayendo en un bache después de julio. No obstante, la química de sus jóvenes estrellas —incluido un Carroll que ya suma 30 jonrones en 2025— y las sólidas actuaciones desde el montículo como la de Rodríguez, han mecido la balanza a favor de los del desierto recientemente.

¿Qué pasó con Boston?

Por el lado de Boston, el abridor Peyton Tolle no pudo repetir su debut brillante del 29 de agosto. El joven zurdo permitió cinco carreras en solo tres entradas, con cinco hits y cuatro boletos, una combinación letal contra un equipo encendido como Arizona.

Intentaron volver en la octava con una ráfaga ofensiva de cuatro carreras, destacando un doblete de dos carreras de Alex Bregman y un fly de sacrificio de Romy González. Pero la oportunidad se desvaneció cuando Nate Eaton se ponchó ante Andrew Saalfrank, quien preservó una ventaja de 6-5 antes del estallido definitivo en la parte baja.

Carroll y sus 81 bambinazos: una leyenda en formación

Los 30 cuadrangulares que lleva Carroll esta temporada lo colocan entre los bateadores más consistentes del joven circo de MLB. A sus 25 años, ya suma 81 jonrones en las Grandes Ligas. Su poder desde el lado izquierdo, combinado con su velocidad en bases, lo convierten en un jugador de cinco herramientas que lidera la nueva generación diamante.

Mirando hacia adelante

Arizona buscará seguir escalando posiciones este sábado por la noche con una prometedora apertura de Brandon Pfaadt (12-8, 5.33 ERA), mientras Boston responderá con Lucas Giolito (10-2, 3.38).

Con apenas veinte juegos restantes, el margen de error es mínimo. Un desempeño como el de la noche del viernes no solo les da una W más en la columna, sino combustible emocional para un equipo que aspira a resurgir justo a tiempo.

¿Pueden los D-backs lograr la hazaña?

La historia no está a su favor. En los últimos 15 años, solo 3 equipos en la Nacional han llegado a la postemporada con un récord por debajo del 50% en algún momento del último mes de temporada regular. Pero si el béisbol ha enseñado algo, es que cuando el madero se calienta y el pitcheo cumple, cualquier cosa puede pasar.

Los Diamondbacks no le temen al reloj. Lo enfrentan, y se crecen.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press