Sydney Sweeney se transforma en leyenda boxística: ¿Nace una nueva reina del Oscar?

Una noche inolvidable en Toronto

Sydney Sweeney llegó al Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) con una sola idea en mente: hablar de Christy, y lo hizo con contundencia. La actriz de 27 años, conocida por su trabajo en Euphoria y nominada al Emmy, dejó sin palabras al público con su interpretación de Christy Salters Martin, pionera del boxeo femenino, en el esperado biopic Christy dirigido por David Michôd.

El entusiasmo fue inmediato. Al término de la función, la audiencia del Princess of Wales Theatre ovacionó a Sweeney y a la misma Christy Martin, quien subió al escenario junto a la actriz para una aparición cargada de emoción. "Fue un sueño hecho realidad, como actriz y como persona", afirmó Sweeney, visiblemente conmovida. Y no es para menos.

¿Quién es Christy Martin?

Para entender la magnitud de esta película, hay que conocer a la verdadera Christy Salters Martin. Apodada la “Coal Miner’s Daughter”, Martin fue una figura revolucionaria en el boxeo de los años 90. Fue portada de Sports Illustrated, campeona mundial y, más tarde, sobreviviente de un intento de asesinato perpetrado por su esposo y exentrenador, Jim Martin. Esa historia de poder, silencio, identidad sexual y renacimiento es el corazón de Christy.

Jim la controló y abusó psicológica y físicamente durante años, en un matrimonio que fue tanto una fachada para ocultar su orientación como un calvario cotidiano. El clímax de ese horror ocurrió en 2010 cuando, tras decidir separarse, él la apuñaló y la disparó. Martin sobrevivió milagrosamente y, tras testificar en su contra, Jim fue condenado a 25 años de prisión. Falleció en noviembre del año pasado.

Sweeney frente al desafío de su vida

“No quería hacer otra película sexy”, comentó Sweeney sobre su preparación para interpretar a Christy. Y vaya que lo logró. Dejó atrás la imagen glamurosa que la ha hecho célebre y asumió una transformación física impactante: entrenó durante meses, adoptando una rutina de tres sesiones diarias con entrenadores, nutricionistas y, en sus propias palabras, “mucho Chick-fil-A, muchos batidos de proteínas”.

Esta dedicación rindió frutos. Sweeney aparece durante toda la película con cabello oscuro, atuendos deportivos y una musculatura notable, encarnando con intensidad la dualidad de Christy: la figura mediática desafiante y la mujer introvertida que luchaba por aceptarse. Desde ya, varios críticos la apuntan como candidata fuerte al Oscar. De hecho, cineastas y expertos ya han visto en su actuación un potencial estelar: "Más allá de una actuación, es una metamorfosis", publicó la revista Variety.

“Christy”: biopic que golpea dentro y fuera del ring

La película, coproducida por la propia Sweeney y Black Bear Pictures, es mucho más que un filme deportivo. Se trata de una exploración personal, política y cultural sobre la opresión, el odio y la autocensura. Explora cómo una mujer logró superar no solo las barreras del machismo en el boxeo profesional, sino también las cadenas culturales que impiden a muchas personas LGBTQ+ vivir plenamente.

“Tengo dos partes en mi personalidad”, comentó Martin en rueda de prensa. “Y eso es lo que hace que Sydney lo haga tan bien. Nadie esperaba ver a la hermosa Sydney; en cambio, interpretó a una Christy ruda, brillante y completamente distinta”.

Más allá del boxeo: luchas internas y supervivencia

Desde su intento de homicidio, Christy Martin ha sido una luchadora aún más inspiradora fuera del ring. Fundó una organización de ayuda para sobrevivientes de violencia doméstica y ha dedicado más de una década a promover la visibilidad de mujeres lesbianas y bisexuales en entornos tradicionalmente masculinos. Su historia no solo es de perseverancia, sino también de reconstrucción.

Christy ofrece un espejo emocional profundo: refleja la sociedad que silencia identidades diversas, que etiqueta emocionalmente a las sobrevivientes, y a una industria del espectáculo acostumbrada a vender imágenes estereotípicas. Aquí es donde Sweeney arriesga. Este no es un papel diseñado para lucirse; es un papel para incomodar y revelar.

¿Un nuevo capítulo para Sydney Sweeney?

Con Christy, Sweeney parece estar dando un giro ambicioso a su carrera. Después de años de ser vista como una actriz pop de alto impacto visual, está alzando la voz como productora, como intérprete comprometida con historias con impacto real. “Me siento más fuerte”, dijo Sweeney al terminar el rodaje. Y es evidente: su papel marcará un antes y después en su filmografía.

No es raro que TIFF se convierta en terreno fértil para los Oscar: allí debutaron films como Room, La La Land y Three Billboards Outside Ebbing, Missouri. Con la aclamación inicial y aplausos de pie, es probable que Sydney esté más cerca que nunca de su primera nominación al Oscar.

¿Y qué hay de la controversia de American Eagle?

En medio de este éxito, la actriz ha debido manejar la controversia por un anuncio reciente con American Eagle, con el eslogan “Sydney Sweeney tiene buenos jeans”, un juego de palabras entre jeans y genes. Críticos acusaron la campaña de glorificar la blancura, a lo que la marca respondió explicando que “el enfoque era, y siempre fue, los jeans”.

Al respecto, Sweeney fue categórica: “No estoy aquí para hablar de jeans”. En entrevista para Vanity Fair, recalcó su deseo de centrar la atención en el legado de Christy Martin. Y así lo ha hecho: con su actuación, ha silenciado escándalos para que el personaje que interpretó hable más fuerte.

Un cierre prometedor y feminista

Christy llega a salas el 7 de noviembre, con distribución de Black Bear en su primera incursión en este rubro. La conjunción entre historia real, mensaje social y ejecución actoral puede convertirla en una de las sorpresas del año. En tiempos donde Hollywood necesita narrativas valientes, Sweeney y Martin entregan algo más que una película: aportan testimonio de lucha y renacimiento.

El boxeo tiene nuevas reglas y, probablemente, un nuevo rostro femenino inolvidable: Sydney Sweeney interpretando a Christy Martin.