Tarik Skubal y su temporada histórica: ¿El nuevo as de los Tigres de Detroit?
Con una actuación digna de leyenda, Skubal iguala hitos históricos mientras lidera a los Tigres con dominio absoluto desde el montículo
Por décadas, los Tigres de Detroit buscaron reconstruir el legado glorioso que alguna vez los colocó entre los grandes equipos de las Grandes Ligas. Hoy, su nuevo as, Tarik Skubal, promete devolverles ese brillo perdido.
Una noche para recordar
El pasado sábado por la noche en el Comerica Park, los Tigres de Detroit vencieron por 6-0 a los Medias Blancas de Chicago gracias a una magistral actuación del zurdo Tarik Skubal. En siete entradas, apenas permitió dos imparables, ponchó a seis bateadores y demostró por qué es uno de los lanzadores más dominantes de la temporada 2025.
Lo más impresionante es que esta fue la 12ª apertura del año en la que lanza al menos seis entradas sin permitir carreras, igualando la marca de Adam Wainwright en 2014 y quedando a solo una del legendario Bob Gibson, quien logró 13 en 1968. Se dice fácil, pero lo que está haciendo Skubal es, simplemente, histórico.
Un repaso por su dominio en 2025
El récord actual de Skubal este año es de 13 victorias y 4 derrotas, un número que no solo lo coloca entre los mejores lanzadores de la Liga Americana, sino que también lo postula para el premio Cy Young. Se trata de un salto cualitativo notable para un jugador que comenzó su carrera profesional en 2018 tras ser seleccionado en la novena ronda del draft. Desde entonces, ha recorrido un camino repleto de retos físicos, incluyendo la cirugía Tommy John, pero ha emergido con una fuerza excepcional.
Comparaciones inevitables: ¿El nuevo Justin Verlander?
Ante una base de fanáticos acostumbrada a aclamaciones como las reciben figuras del pasado como Jack Morris, Denny McLain y Justin Verlander, ahora el nombre de Tarik Skubal resuena con fuerza. Su récord está por encima incluso de McLain, cuya mejor marca con los Tigres fue de 10 aperturas de seis entradas sin permitir carreras en 1969, el mismo año en el que ganó 24 partidos.
"Es emocionante cada vez que Tarik toma la pelota. Su dominio esta temporada es un espectáculo", comentó A.J. Hinch, manager de los Tigres.
Además, con un promedio de más de 10 ponches por cada nueve entradas, Skubal se ha convertido en un lanzador intimidante. Ha logrado construir un arsenal de lanzamientos temible que incluye una recta que supera las 97 millas por hora y un slider engañoso que ha desconcertado a bateadores élite.
El momento clave del juego
Chicago empezó agresivo con un boleto a Chase Meidroth, pero una doble matanza lo borró de inmediato. Desde entonces, Skubal simplemente dominó, controlando la zona como un veterano consagrado. No permitió otro corredor hasta el quinto inning y, en total, solo dos jugadores de los Medias Blancas lograron embasarse.
Mientras tanto, del lado ofensivo, los Tigres construyeron su ventaja con un poderoso rally de cinco carreras en el cuarto episodio, liderado por un jonrón de tres carreras de Gleyber Torres. Jahmai Jones también contribuyó con un cuadrangular solitario al abrir el primer inning, replicando una hazaña que ya logró anteriormente en esta misma semana.
Una marca legendaria en la mira
Como mencionamos antes, la marca de Bob Gibson de 13 aperturas con seis entradas o más sin permitir carreras en una temporada permanece como la cima a alcanzar. Lo que hace aún más significativo ese número es que Gibson lo consiguió en 1968, en lo que se considera una de las temporadas más dominantes por un pitcher en la historia moderna (1.12 ERA ese año). Sí, leíste bien: 1.12.
Skubal está a punto de igualarlo, y con varias salidas aún por delante, no sería descabellado pensar que puede superarlo. De hacerlo, el zurdo entraría fácilmente en las conversaciones de una de las mejores temporadas para un lanzador en la historia reciente de MLB.
Perspectiva histórica: de 1968 a 2025
El béisbol ha cambiado drásticamente desde 1968. En aquellos años, los lanzadores tenían más protagonismo, las alineaciones eran menos explosivas y el montículo más elevado. Hoy en día, con un calendario más cargado, nuevas restricciones para los pitchers y una ofensiva más atlética que nunca, lo que está haciendo Skubal cobra aún más relevancia.
Hoy la duración promedio de una apertura para un lanzador en Grandes Ligas es de alrededor de 5.1 entradas. Tan solo eso nos muestra lo inusual que es tener a alguien que lanza consistentemente seis o más entradas sin permitir carreras. A estas alturas, Skubal es un fenómeno anacrónico pero efectivo, un clásico entre la modernidad.
La importancia para Detroit
Para los Tigres de Detroit, una franquicia que no conoce los playoffs desde 2014, tener a Skubal encabezando la rotación representa más que solo victorias: es una señal de esperanza. Con jóvenes como Riley Greene y Spencer Torkelson comenzando a despegar ofensivamente, Detroit ve la luz al final del túnel. Skubal está funcionando como ancla y símbolo de una nueva era.
"El año pasado fue duro, pero sabíamos que teníamos piezas para competir. Tarik nos da esa confianza interna que todo equipo necesita", dijo Riley Greene.
Mirando hacia el futuro
Con solo 27 años, Skubal está entrando en la cúspide de su carrera. Aún no se sabe si será posible mantener este nivel durante toda la temporada o en siguientes campañas, pero si logra al menos mantener el estándar que ha establecido en 2025, el futuro de Detroit luce prometedor.
Sus próximas salidas serán claves. De superar a Gibson, entrará en una conversación histórica que lo colocaría no solo como uno de los mejores lanzadores de su generación, sino como uno de los grandes notables en la larga historia de los Tigres de Detroit.
Datos curiosos: la historia detrás del dominio
- Bob Gibson, cuya marca persigue Skubal, ganó el Cy Young y fue MVP en 1968.
- Adam Wainwright, con quien acaba de ser igualado, es uno de los lanzadores más respetados de la era moderna, con 200 victorias en su carrera.
- Denny McLain, el último pitcher que ganó 30 juegos (1968), era también miembro de los Tigres, lo que da un lindo paralelismo histórico.
Las comparaciones son siempre riesgosas, pero cada vez que Tarik sale al montículo, sus rivales saben que se enfrentan a un brazo implacable, diseñado tanto por el trabajo como por el talento natural. Si el béisbol es un juego de momentos, estamos presenciando uno de los más especiales en los últimos años.